Trump enmienda la estrategia de Vox en Madrid al destacar la seguridad de la capital de España
La Casa Blanca subraya la baja tasa de asesinatos de la ciudad, pese a que su socio lleva más de un lustro criticando la supuesta inseguridad


En el momento de la verdad, el minuto de oro del debate de las elecciones de 2021, un instante mágico que debe utilizar para seducir a los electores, Rocío Monasterio, la candidata de Vox a la presidencia de la Comunidad de Madrid, dispara: “Sin seguridad no hay libertad. Necesitamos tener la seguridad de que nuestros hijos y mayores puedan caminar por la calle sin ser atacados, de que nuestras viviendas no sean okupadas”. Esa descripción de Madrid como una región y una ciudad sin ley es marca de la casa. La extrema derecha ha construido gran parte de su discurso en la capital alrededor de una supuesta inseguridad. Y por eso el lunes se encuentra con un problema: la Casa Blanca de Donald Trump, socio de Vox al otro lado del Atlántico, destaca la baja tasa de asesinatos de Madrid, según sus datos mejor también que la de París o Londres, para justificar la intervención de la Guardia Nacional en Washington. Los argumentarios del equipo de Santiago Abascal acaban de saltar por los aires.
“En el caso de España, en general, y Madrid, en particular, el miedo al delito se explica mejor por la difusión de determinados discursos políticos catastrofistas, medios de comunicación alarmistas y, significativamente, por la “deflagración” de este tipo de mensajes en todas las redes sociales”, argumenta César San Juan, Profesor de Psicología Criminal y Psicología Jurídica en la Universidad del País Vasco. “Esta situación, obviamente repercute negativamente en la convivencia, y en el aumento de la conflictividad social”, sigue. “Y esto es así porque la gente no se comporta atendiendo a la delincuencia que hay, sino a la que cree que hay”, añade, subrayando que los datos de Madrid indican que la delincuencia convencional va a la baja, “especialmente robos y homicidios, aunque con desafíos emergentes como la ciberdelincuencia y los delitos sexuales”
Hasta ahora, Trump había funcionado como amplificador del discurso de Vox: “Felicidades a Vox por todos los grandes mensajes que lanzáis a la gente de España y del mundo”, llegó a decir en 2022. La foto del líder estadounidense con Abascal, de 2024, fue todo un aval a sus tesis. Hasta ahora. El lunes, la Casa Blanca de Trump distribuyó entre los periodistas un par de gráficos para intentar justificar la intervención de la Guardia Nacional en Washington con una supuesta situación de inseguridad que no avalan los datos ni la percepción de muchos residentes. Entre la información aportada, una comparativa entre ciudades de todo el mundo basada en datos de origen desconocido (no se atribuyen) y que coloca a Madrid como la más segura entre las analizadas en función de la tasa de asesinatos. Una fotografía que deja a Vox en fuera de juego.
The murder rate in Washington, D.C. today is greater than Bogota, Mexico City, and more ⬇️
— The White House (@WhiteHouse) August 11, 2025
MAKE D.C. SAFE AGAIN! pic.twitter.com/0L9SVfY1KG
“[La comparativa de la Casa Blanca] deja fuera precisamente todo el grupo de delitos que más preocupan a los españoles, que crecen a un ritmo exponencial en nuestras calles y que vemos todos los días abrir los telediarios: agresiones, robos con violencia, hurtos y, sobre todo, violaciones”, contraponen en el partido ultra, donde admiten que “efectivamente” los asesinatos no han crecido al mismo ritmo. Y rematan: “Como bien apunta Washington, Londres y París están peor que Madrid en índices delictivos, y, por tanto, la intención de Vox es precisamente alertar sobre este extremo para que no tengamos que llegar a ese punto para darnos cuenta del problema”.
Esto dicen las estadísticas. La tasa de delitos por 1.000 habitantes de Madrid ha bajado de 72 en 2016 a 67 de 2024, según recuerda Josep Cid, profesor de criminología de la Universidad Autónoma de Barcelona, basándose en datos del balance trimestral de criminalidad del Ministerio del Interior. En el mismo periodo, añade, la tasa de asesinatos se hundió de 0,60 (19 homicidios consumados) a 0,34 (12). Además, durante el primer trimestre de 2025, la ciudad de Madrid también registró un descenso de un 6,3% en el número de infracciones penales, y de un 1,2 en la tasa criminalidad con respecto a 2024, según la delegación del gobierno. Sin embargo, los delitos contra la libertad sexual crecieron un 5,8% en ese periodo, lo que el gobierno central explica con el argumento de que ahora se denuncia más que antes.
“Es cierto que la tasa de homicidios consumados en Madrid es, de acuerdo con estándares internacionales, baja”, explica Cid antes de analizar algunos de los argumentos que lleva deslizando la extrema derecha desde hace años. “Respecto del aumento de la criminalidad que se habría producido en Madrid por la llegada de menores [extranjeros] no acompañados, los datos del periodo 2016-2024 no parecen confirmarlo, más bien se observa una estabilidad de la delincuencia”, argumenta. Y sobre la proliferación de bandas latinas, que han llenado de machetazos las páginas de sucesos, apunta: “Sin haber estudiado el tema a fondo, no creo que el problema de las bandas en España (y en Madrid, en concreto) sea de mayor gravedad que en el resto de los países europeos”.
🇺🇲🇪🇸 | Donald Trump reconoce el labor de VOX en España y felicita a Santiago Abascal: "España es un gran país. Tenemos que asegurarnos de defender nuestras fronteras y una agenda conservadora".pic.twitter.com/uLHfQHzcD8
— La Derecha Diario (@laderechadiario) October 9, 2022
En Madrid operan medio millar de miembros de bandas, siendo los más numerosos y violentos los Dominican Don`t Play y los Trinitarios, que rivalizan por un territorio cuyas fronteras invisibles solo ellos conocen. Aunque entre sus integrantes hay nacidos en España (“Los de las bandas latinas son tan españoles como Abascal”, llegó a espetarle Isabel Díaz Ayuso a Monasterio), Vox ha alimentado su discurso contra la inmigración ilegal y el supuesto aumento de la violencia en las calles gracias a episodios de terror que hasta ahora parecían propios de otras latitudes, alimentando con esos hechos puntuales la percepción en un sector del electorado de que hay un problema generalizado.
“Kelvin, víctima inocente de los Dominican Don’t Play“, se publicó el 10 de agosto en EL PAÍS. “El brutal ataque de los Dominican Don’t Play a un chico de 17 años que hacía un muñeco de nieve con sus amigos“, el 5 de julio. ”La mara Salvatrucha deja su rastro de sangre en Madrid: dos homicidios, lágrimas negras y un asesinato por 3.000 euros“, a finales de junio.
Horribles tragedias puntuales que Vox utiliza para movilizar a sus votantes y captar otros nuevos, transmitiendo el mensaje de que lo excepcional es la norma. Una estrategia sobre la que se está apuntalando la mejora de las expectativas electorales de la extrema derecha, que en Madrid ha puesto la diana sobre los centros de acogida a menores no acompañados.
“La inmigración ilegal vacía nuestra tesorería y llena nuestras cárceles”, lanzó este julio a las puertas del de Hortaleza Isabel Pérez-Moñino, la portavoz de Vox en la Asamblea regional.
“Mi hipótesis es que el consumo de estos discursos afecta [a la percepción de inseguridad y la decisión de voto]”, concluye Cid. Aunque los datos no lo reflejen.
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