No hace falta que el agua alcance el nivel de la carrocería o algún componente del motor para provocar un escenario de alto riesgo. Unos 15 centímetros bastan para perder el control de un auto compacto
De momento no se vislumbra ningún episodio de calor extremo, sino temperaturas propias de plena canícula o incluso más bajas de lo habitual en la mitad norte
Se espera un diluvio en Barcelona: 120 en apenas tres o cuatro horas, mientras que en los termómetros habrá un desplome, especialmente en el norte y este, donde las temperaturas serán más propias de la primavera que de pleno verano
El Servicio Meteorológico estima que ‘Flossie’, en el Pacífico, evolucione a huracán en las próximas horas, con precipitaciones intensas en el centro y sur del país
Las altísimas temperaturas continuarán este viernes y el sábado, pero el domingo caerán en Galicia y las comunidades cantábricas y el lunes en el resto del país, salvo el este y Baleares
Comienza un episodio de altas temperaturas en el que las máximas y las mínimas estarán entre 5° y 10° por encima de lo normal en amplias zonas del país
Especialistas del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático sostienen que los habitantes de zonas rurales son quienes más riesgos corren
Los investigadores relacionan el aumento en la dureza de estos episodios con el incremento de la demanda de evaporación atmosférica por el calentamiento global
La semana comienza con un descenso térmico y más inestabilidad, que se traducirá en tormentas localmente fuertes en el norte y en el este de la Península
Conagua ha reportado lluvias intensas, rachas de viento de hasta 100 km/h y oleaje de hasta 5 metros de altura en el occidente del país, especialmente en costas de Jalisco, Colima y Michoacán
El sábado comenzará un ascenso térmico que llevará a temperaturas de pleno verano la semana que viene en buena parte del territorio, superiores en 5° a 10° a las normales para la época del año
Decenas de edificios de la ciudad egipcia, la más poblada del sur del Mediterráneo, están colapsando por la erosión de la costa y la consecuente intrusión de agua marina en los acuíferos