Un Pacto Nacional por la Educación en Cataluña tras los resultados de PISA
En el mundo docente, los profesionales van a lo suyo. ¿Y el sindicato mayoritario? Parece más preocupado por la fecha de inicio del curso escolar que por la calidad del sistema


El fiasco de las adjudicaciones de plazas docentes vivido por el Departamento de Educación de la Generalitat ha desviado el foco del verdadero problema que tiene el sistema educativo de Cataluña, que no es otro que el que vienen ilustrando últimamente evaluaciones como las pruebas PISA o las “evaluaciones de final de etapa”. En triste defensa de la consejera Esther Niubó, cabe recordar que no es la primera vez que el caos organizativo golpea a la administración catalana cuando maneja grandes números: en 2023 la misma Generalitat reconoció “incidencias muy graves” en las oposiciones convocadas para estabilizar a su personal, en las cuales 13.581 aspirantes se disputaban 1.825 plazas.
El 27 de junio supimos que el alumnado catalán no alcanza el nivel deseable en matemáticas, inglés ni ciencias en 4º de ESO, curso final de la etapa obligatoria, y tampoco en 6º de primaria, donde los resultados en matemáticas fueron los peores de los últimos 16 años. Estos resultados se añaden a los de las pruebas PISA de 2022, que cayeron en picado en todos los ámbitos evaluados y dejaron al alumnado catalán por debajo de la media española y de los países de la OCDE.
En 2003, el PSC, ERC y los comunes de entonces (ICV-EUiA) firmaron el famoso Pacto del Tinell, que dio lugar al primer gobierno tripartito de la historia. En el texto, los firmantes dijeron que la educación sería una “prioridad central” del Gobierno catalán y prometieron un Pacto Nacional para la Educación, que se firmó el 20 de marzo de 2006.
La situación actual de la educación en Cataluña parecería exigir un nuevo Pacto Nacional, pero la verdad es que una parte importante de los agentes que deberían firmarlo no están por la labor. Cuando el Gobierno catalán anunció su voluntad de firmar un convenio con la OCDE para la mejora de los resultados educativos, lo primero que hizo el Parlamento catalán fue aprobar una moción de la CUP en contra de la iniciativa, que secundaron también los socios de investidura de Illa y Junts. Por suerte, Illa hizo caso omiso de la moción y el convenio ya está en marcha.
En el mundo docente, los profesionales van a lo suyo. Cuando se anunciaron reformas en el bachillerato, la plataforma Docentscat saltó en defensa de las tres horas semanales de lengua catalana; la plataforma Docents de Filosofia se movilizó para mantener la tercera hora de esta materia en 1º de bachillerato; la plataforma Ciències en Perill se opuso a la fusión de Biología, Geología y Ciencias Ambientales, así como a la de Física y Química. Etcétera. ¿Y el sindicato mayoritario? Cualquiera sabe: en 2006 no firmó el Pacto Nacional porque estaba en contra de la sexta hora en la pública (y lo está, por eso Niubó la ha dejado caer, a pesar de que figura en el pacto de investidura con los comunes); oyendo a sus líderes, hoy el sindicato parece más preocupado por la fecha de inicio del curso escolar que por la calidad del sistema.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.