Feijóo descarga en los socios del Gobierno una posible moción de censura y convoca una manifestación contra Sánchez

El Partido Popular vuelve a echarse a la calle contra el Gobierno progresista. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha convocado este jueves una manifestación contra el Ejecutivo para el próximo 8 de junio en Madrid, al tiempo que ha puesto sobre la mesa la posibilidad de una moción de censura, cuya responsabilidad descarga en los socios de Pedro Sánchez. Feijóo ha elevado el tono al máximo contra el Gobierno, al que califica de “mafia” cuyo “capo”, llega a decir, es el presidente socialista.

El líder del PP ha anunciado este jueves que su partido vuelve a las calles en una comparecencia sin preguntas convocada de urgencia en la sede del PP en la calle Génova, en la que ha apelado a la “gran frustración” de la derecha “ante la gravedad de los hechos conocidos en los últimos días y especialmente en las últimas horas”. Se refiere a las informaciones sobre la militante del PSOE Leire Díez, que según este partido no actúa en su nombre ni trabaja en la organización, quien maniobró para intentar lograr información negativa del teniente coronel Antonio Balas, uno de los principales mandos de la UCO. “Esto va de democracia o mafia”, ha llegado a decir Feijóo.

El jefe de la oposición ha lanzado un llamamiento “a la mayoría de los españoles decentes” que quieran evidenciar su rechazo “al estado de putrefacción” del actual Gobierno. “La degradación es total”, sostiene Feijóo. “El partido, el Gobierno y la familia más directa del actual presidente del Gobierno están rodeados de corrupción. Todas las personas de su confianza, antes de llegar a la Moncloa, están imputadas o señaladas”, ha reflexionado. “En pocas horas hemos conocido ofertas de impunidad a delincuentes a cambio de obtener expedientes contra agentes y fuerzas de seguridad del Estado, promesas de ascenso a mandos policiales que se dejen corromper, extorsión de servidores públicos amenazados con airear vídeos sexuales, persecución a fiscales y jueces que persiguen la corrupción, amenazas a periodistas que lo publiquen… Que nadie se engañe: todo esto que estamos viviendo, leyendo y escuchando son prácticas mafiosas que no caben en democracia. Sí en otros regímenes, pero en democracia no”.

Feijóo se ha dirigido también a los actuales socios del Gobierno de Pedro Sánchez, recordando que hace siete años apoyaron una moción de censura para combatir la corrupción del entonces Ejecutivo del PP presidido por Mariano Rajoy, tras la sentencia del caso Gürtel. “Si fuesen consecuentes, ahora deberían hacer lo mismo sin ninguna duda”, ha razonado.

El líder del PP se limita a presionar a los socios con una declaración pública, pero reconoce su frustración porque no está en su mano que la iniciativa prospere. “Seré claro: la moción de censura para sacar la corrupción de la Moncloa no depende de mi voluntad. Yo la tengo toda. Depende de quienes le han dado soporte parlamentario hasta ahora. Si quieren acabar con esto, el Partido Popular sigue a disposición. Si no quieren, no tengan duda de que les arrastrará y que la mayoría de los españoles decentes les hará cómplices de esta degradación y no la olvidarán”, ha subrayado en Génova.

La realidad es que el contexto de las relaciones del PP con los socios de Sánchez, como el PNV o Junts, no puede ser peor. Esta misma semana, el líder de Junts, Carles Puigdemont, culpó al PP de maniobrar en Bruselas para impedir que el catalán, el gallego y el vasco se convirtieran en lenguas oficiales de la Unión Europea, y agrandó la brecha entre ambos partidos. Los populares rompieron los puentes también con el PNV hace unos meses, cuando pusieron el grito en el cielo por la cesión a los peneuvistas de un palacete en París que había sido incautado por la Gestapo a ese partido.

El PP es consciente de las escasísimas opciones de una moción de censura que prospere, y por ese motivo Feijóo no la presentará. Tampoco tiene previsto contactar en privado con los socios de Sánchez para explorar las posibilidades de llevar adelante una moción, explican en el PP.

Pero en medio de una fortísima presión en la derecha para que haga algo para echar a Sánchez del poder, Feijóo da pasos con un discurso cada vez más duro y retomando las manifestaciones contra el Gobierno. Los populares habían dejado de convocar protestas en las calles este primer semestre del año, después de la media docena de concentraciones que celebraron contra la ley de amnistía en la primera parte de la legislatura. El equipo del líder del PP ha movido ficha y reaccionado en las últimas horas, ya que hace solo dos días, el martes, Feijóo descartó convocar una manifestación preguntado por los periodistas tras presentar los avales a su candidatura como presidente del PP. El contexto del congreso de los populares, que se celebra a principios de julio en Madrid, influye también en este movimiento del líder. Al PP le interesa caldear el ambiente en los prolegómenos de un congreso pensado en clave electoral para impulsar a Feijóo.

El jefe de la oposición ha salido incluso del tono institucional en el que defiende que debe desarrollarse la política. “Toda mafia tiene un capo”, escribió la noche del miércoles el líder popular en un mensaje en sus redes sociales, donde llamó “capo” al jefe del Ejecutivo. Feijóo se mueve también bajo la presión del ala dura de la derecha, que desde que convocó el congreso del PP le ha hecho ver con mensajes velados que no está conforme con su actuación como líder de los populares. El sector liberal del PP quiere más caña y batalla cultural que “ilusione” a la derecha.

El político gallego ha profundizado este jueves en los descalificativos al presidente, al que ha llamado “indigno”. “Quiero dirigirme al señor Sánchez”, ha afirmado en Génova. “Servir a la nación como presidente del Gobierno es un honor y hace tiempo que ya no es digno de ejercerlo. Dure lo que dure, pero su mandato está en fase terminal porque no da más de sí. Y cuanto más se resista, más será la humillación con la que se irá. Incluso quienes le tienen estima deberían aconsejárselo”.

El líder popular ha reconocido que tendrá que ser la justicia la que determine “con exactitud los delitos cometidos” ―a diferencia de la sentencia del caso Gürtel, que motivó la moción de censura contra Rajoy, el caso de Leire Díaz todavía no ha saltado de las informaciones periodísticas, mientras otros casos que afectan al entorno de Sánchez están en fase de investigación judicial―, pero considera que políticamente “esta situación es inaceptable e inasumible para cualquier demócrata”. “La inmoralidad de este Gobierno y de este presidente es incompatible con la decencia democrática”, ha concluido Feijóo, que ahora testará cuánto apoyo popular tienen sus acusaciones contra el PSOE.

Al líder del PP se ha sumado otro presidente popular. José María Aznar ha empleado un símil similar, en este caso “los bajos fondos”, para referirse tácitamente al Gobierno. El exlíder del partido ha asegurado en un foro de la fundación FAES, que preside, que España vive una situación política en la que se entrega “un fruto de pactos políticos a los adversarios de nuestro país” y se ceden “cada vez más porciones del Estado, cada vez más partes de la nación española” y, al tiempo, se están “deteriorando las instituciones de un modo tremendo”. El expresidente del Ejecutivo ha planteado “tres caminos” para “superar” este contexto: “o dimiten los bajos fondos, cosa que no parece lo más probable; o hay una moción de censura para acabar con los bajos fondos, cosa que no es posible” o “hay unas elecciones”. “Creo que los bajos fondos son capaces de hacer cualquier cosa”, ha insistido Aznar, informa José M. Abad Liñán.

Vox se ha desmarcado de la manifestación convocada por el PP y le ha instado a que presente ya una moción de censura contra Pedro Sánchez. “Lo que ha convocado el señor Feijóo no es una manifestación, es un acto de partido”, ha zanjado su secretario general, Ignacio Garriga. En una rueda de prensa en Barcelona, el número dos de la formación ultra ha emplazado al líder popular a que “presente de una vez por todas” una moción de censura para presentar su proyecto político. “Los españoles conocen cuál es la alternativa que lidera Vox, lo que no conocen suficientemente es qué es lo que ofrece el señor Feijóo”, ha añadido.

Garriga ha recordado que su partido apoyaría cualquier moción de censura “cuyo punto central fuera desalojar de manera inmediata a Pedro Sánchez y que no tuviera ningún tipo de cesión a los separatistas. Si hoy no se está debatiendo [una moción de censura] es porque Vox no tiene diputados suficientes” para presentarla, ha rematado, informa Miguel González.