Carlos Cuerpo se plantea lanzar su candidatura para competir con Donohoe en la carrera para presidir el Eurogrupo

La carrera para presidir el Eurogrupo durante los próximos dos años y medio ya se ha lanzado. Falta por saber si la correrá solo el ministro de Finanzas irlandés, Paschal Donohoe, que ocupa el cargo desde hace cinco años y este viernes ha recibido el apoyo de todos sus homólogos del Partido Popular Europeo, o competirá con otro titular de la cartera de Finanzas de la zona euro. En Bruselas, varias fuentes diplomáticas dan por hecho que el ministro español, Carlos Cuerpo, va a intentarlo. Pero él sigue sin despejar la incógnita. “Todavía no hemos tomado una decisión sobre la presentación de la candidatura”, ha dicho este mismo jueves, justo unas horas antes de que Donohoe recibiera el respaldo de sus correligionarios.

Donohoe llegó a la Presidencia del Eurogrupo, el órgano que agrupa a los ministros de Finanzas de la zona euro, en julio de 2020. Lo logró derrotando a la entonces vicepresidenta primera española y ministra de Economía, Nadia Calviño, quien, además, era la favorita. Y después renovó su el mandato en enero de 2023.

En estos cinco años, su balance ha sido magro. Ha tratado de impulsar elementos pendientes como la Unión Bancaria, pero apenas ha logrado avances. Sirve de atenuante que el Eurogrupo ya no es el órgano clave que fue durante las crisis financieras. Como explicaba hace unas semanas un alto cargo de un Gobierno de la zona euro, “casi es buena noticia que el Eurogrupo haya perdido peso”. No obstante, ni ese Ejecutivo ni otros del área monetaria están muy satisfechos con el trabajo del irlandés.

Una prueba de ese descontento llegó la semana pasada en el órgano preparatorio de las reuniones del Eurogrupo, en el que están los números dos de los ministerios de Finanzas. En ese foro, las cinco grandes economías de la zona euro (Alemania, Francia, Italia, España y Países Bajos) presentaron un documento de trabajo en el que planteaban cambios en la forma de trabajo como y reclamaban un impulso a la Unión Bancaria y a la Unión del Mercado de Capitales, elementos importantes para avanzar hacia un verdadero mercado único y lograr una mayor competitividad de las empresas europeas.

Ese documento no tenía críticas explícitas a Donohoe, pero casi podía leerse como un listado de carencias del Eurogrupo en los últimos años. En cambio, este jueves, a su llegada a la Luxemburgo para la reunión con sus colegas, el irlandés optó por la ironía cuando se le preguntó al respecto y afirmó que al leerlo se sentía que era “un reconocimiento” al trabajo que había hecho en los últimos años. Y un día después, ha encontrado el respaldo de los ministros de Finanzas del Partido Popular Europeo, la principal fuerza política de la UE y la que cuenta con más gobiernos en los Estados miembros.

Aquí estaría uno de los talones de Aquiles de una potencial candidatura de Cuerpo para competir con Donohoe. Hay más. Otro sería que España ya tiene colocados a varias personas en puestos económicos importantes de la UE: Nadia Calviño preside el Banco Europeo de Inversiones (BEI); Luis de Guindos es vicepresidente del BCE; Teresa Ribera es vicepresidenta de la Comisión Europea y máxima autoridad de Competencia, un departamento muy poderoso del Ejecutivo de la Unión; y José Manuel Campa dirige la Autoridad Bancaria Europea. Esta circunstancia siempre es tenida en cuenta en el juego de equilibrios que hay en las instituciones comunitarias. Y existe un tercero: tradicionalmente los países pequeños recelan de que un ministro procedente de un país grande presida el Eurogrupo y en este órgano la presidencia se elige por el mecanismo de un país un voto no hay mecanismos de ponderación por tamaño.

Pese a que estos elementos hay que tenerlos en cuenta, en Bruselas no falta quien está convencido que Cuerpo acabará dando la batalla. Varias fuentes de diversos Estados consultadas así lo creen y hacen referencia a que el ministro español habría sondeado a otros colegas para calibrar sus posibilidades.

Si finalmente el titular de Economía y Comercio se decidiera, sería la tercera vez que un ministro español trata de hacerse con la presidencia del Eurogrupo. En 2020 lo intentó Calviño, que perdió frente a Donohoe. Cinco años antes, había probado suerte Luis de Guindos, entonces ministro de Economía en el Gobierno de Mariano Rajoy, y le ganó el candidato holandés, Jeroen Dijsselbloem.

El plazo para presentar la candidatura concluye la próxima semana y la elección, si hubiera más de un candidato, se celebrará en la próxima reunión del Eurogrupo, el próximo 7 de julio.