El precio de mantenerse en forma

Para estar en forma, no sólo hace falta dedicarle tiempo al ejercicio, sino también hay que invertir dinero. Las opciones más baratas, por supuesto, son las gratuitas, como ir a correr, por ejemplo, a la Casa de Campo o al Retiro.

Luego viene la opción de apuntarse a un gimnasio. Dependiendo de las actividades que se elijan, puede costar entre 50 y 100 euros al mes. Pero para ir a hacer deporte, hace falta estar equipado. Un conjunto de top y pantalón para mujer, de precio medio, de algodón y licra, cuesta alrededor de 60 euros. En la versión masculina de pantalón y camiseta, el precio sube hasta los 70 euros. Siempre se puede recurrir, claro, al clásico, y más barato, chándal de toda la vida.

Puestos a invertir, hay quien prefiere montarse el gimnasio en su casa. Los aparatos básicos son la cinta andadora y la bicicleta estática cuestan, si se quiere un aparato profesional, alrededor de 2.200 euros. En el caso de una máquina multiusos, con la que se pueden ejercitar todos los músculos del cuerpo, el desembolso supone alrededor de 4.000 euros.

Los aparatos de relajación también se pueden llevar a casa. Por 1.900 euros se puede tener una sauna. En el caso del jacuzzi, los precios se disparan hasta los 9.000 euros. Otro de los aparatos con más éxito en los últimos años son las máquinas de rayos uva. Ponerse moreno sin salir de casa cuesta unos 7.200 euros.

En el apartado de curiosidades, los aparatos de musculación para hacer ejercicio en la piscina cuestan alrededor de 3.000 euros o una máquina para recibir masajes acuáticos, vestido, cuesta la prohibitiva cifra para un particular de 44.000 euros. También se pueden encontrar bicicletas estáticas que interactúan con juegos de ordenador, es decir, el transcurso del juego depende de la intensidad de las pedaladas. Precio: 3.500 euros.