El gobernador de Texas moviliza a la Guardia Nacional para reforzar la seguridad durante las marchas anti Trump

Texas también se militariza ante las protestas contra Donald Trump y su política de deportaciones. El segundo Estado más poblado de Estados Unidos, con un 40% de población latina, se prepara para celebrar este fin de semana masivas marchas en las calles de sus ciudades principales. El gobernador republicano, Greg Abbott, ha movilizado por ello a 5.000 elementos de la Guardia Nacional. Esta fuerza militar se sumará a la policía estatal para reforzar la seguridad durante las manifestaciones que coinciden con el desfile que el presidente republicano organizó para su cumpleaños, que coincide con el aniversario del ejército.

Abbott, un gobernador de línea dura en el combate a la inmigración irregular, ha dicho que la decisión pretende “asegurar la orden y la paz”. La maniobra, sin embargo, no puede desprenderse de lo que ocurre al otro lado del país, en Los Ángeles, una ciudad con una nutrida presencia hispana que lleva días de disturbios por las redadas que el Servicio de Control de Inmigración (ICE) está llevando a cabo en la comunidad.

La Administración Trump envió a 4.000 guardias nacionales y 700 infantes de marina a las calles de California como respuesta a las movilizaciones. Lo hizo sin que lo solicitara el gobernador del Estado, el demócrata Gavin Newsom, quien presentó una demanda ante las cortes para frenar lo que llama una militarización que pisotea la soberanía estatal. Esto ha abierto un nuevo pulso entre la federación y California, que ha iniciado más de 20 litigios contra Washington en la segunda presidencia de Trump.

“Usaremos todas las herramientas y estrategias en nuestras manos para ayudar a las fuerzas de seguridad a conservar el orden”, aseguró Abbott, quien advirtió que todo aquel que dañe propiedades públicas o privadas será arrestado y procesado por vandalismo. La policía de Los Ángeles ha detenido en las protestas a 385 personas desde el sábado. Solo el lunes se hicieron más de 200 detenciones, aunque no fueron presentados cargos en todos los casos.

El gobernador había adelantado la decisión el martes, cuando anunció el despliegue de guardias militares antes de una manifestación en San Antonio. Los soldados pudieron verse en las calles de la ciudad la noche del miércoles en una protesta pacífica que se hizo cerca de El Álamo, un emblemático escenario de combate en la guerra entre México y Texas en el siglo XIX. La protesta, a la que acudieron cientos de personas, transcurrió en orden sin que se registraran actos de violencia.

Abbott no ha dado a conocer este jueves adonde se desplegarán las tropas. Sin embargo, cientos de movilizaciones han sido convocadas para este sábado como parte de No Kings, un evento organizado a nivel nacional en respuesta al desfile de Trump en Washington. Cerca de 30 se celebrarán en toda la geografía texana. La convocatoria seguirá a varios días de malestar social provocado por las redadas, que han dejado 330 personas detenidas tan solo en la región metropolitana de Los Ángeles.

Una organización en favor de los derechos de los indocumentados ha convocado a una manifestación el viernes en Houston. Un día después, cientos de manifestantes saldrán a las calles de las ciudades más grandes de Texas como Houston, Dallas y Austin, la capital de la entidad republicana. En las dos últimas urbes se han registrado esta semana choques entre asistentes a las protestas y policías locales, quienes han lanzado gases irritantes para dispersar a los grupos. También se registraron un puñado de detenciones.