Gráficos | La elección judicial registra la participación más baja en 30 años

En las elecciones judiciales participaron uno de cada diez mexicanos convocados a las urnas. De acuerdo con los datos de las proyecciones estadísticas del Instituto Nacional Electoral (INE), las estimaciones rondan entre el 12,5% y el 13,3% de participación total, con esta asistencia a las urnas se convierte en la elección menos concurrida desde 1994.

Los procesos a los que menos asistieron los mexicanos, desde que se implementó la estructura democrática que ahora conocemos, ocurrieron en los últimos cinco años. El menos atendido fue la consulta popular sobre la posibilidad de juzgar a los expresidentes recientes, en la que participó el 7,1% de la lista nominal, lo equivalente a poco más de 6.600.000 de personas.

La siguiente llamada a las urnas con menor asistencia fue para la Revocación de Mandato. Esta fue propuesta por López Obrador para brindar herramientas a la ciudadanía para terminar con el Gobierno de los presidentes en turno a la mitad del sexenio, que tuvo una asistencia del 17,7%, en este caso 16.500.500 personas emitieron su opinión.

Pero la elección judicial es el proceso electoral de voto directo con la convocatoria más baja. Es decir, en el que se buscaba elegir representantes, ya fuera del poder judicial o del legislativo. En las elecciones intermedias de 2003, durante el Gobierno de Vicente Fox, 26.700.000 de personas, el 41,3%, emitieron su voto. En la elección presidencial del 2000, la participación fue de las más altas, con 63% y representó el cambio histórico de régimen, que dejó al PRI fuera del gobierno por primera vez desde 1929. En 2009, bajo el Gobierno de Felipe Calderón (2006-2012), el 44,7% de las personas convocadas asistieron a las urnas, unos 34.680.000 para elegir a los diputados durante unas elecciones intermedias.

Marcela Ríos, de la Misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) para vigilar la elección, declaró ante la prensa durante la noche electoral, que en América Latina las elecciones intermedias y extraordinarias suelen tener una participación baja, por lo que este comportamiento es habitual en la región. Esto se suma a que, si bien en México las elecciones son, según dice la ley, una obligación ciudadana, las autoridades no imponen un castigo para las personas que decidan no ejercer este derecho.

La asistencia ciudadana

Con el 79% de los votos escrutados por el INE, San Luis Potosí y Coahuila registran la mayor participación, con más de 20% de los votos, mientras Jalisco y Guanajuato tienen el menor número, con 7% cada uno. Veracruz y Durango, a pesar de tener elecciones locales, no muestran una relación en el número de asistentes a las urnas. En Durango solo uno de cada 10 votantes acudieron, mientras que en Veracruz fue poco menos de dos de cada 10.

La violencia no fue un factor determinante para inhibir el voto en esta jornada. La elección judicial contó con 83.950 casillas instaladas, que representaron el 99,98% de las que se planearon para la votación, de acuerdo con los datos publicados por el INE. Las autoridades electorales dieron a conocer que 16 no fueron colocadas, la mayor parte, 14, fueron en Chiapas, una en Sinaloa y otra en Michoacán. En 50 sitios, además, se suspendió la elección por diversos incidentes, calificados como menores.

Sin embargo, sí se registró una baja de más de la mitad de las casillas. En la última elección se instalaron 170.181 casillas, por lo que las personas tuvieron que desplazarse a otros puntos de su ciudad para emitir su voto, sumado a que los mexicanos en el extranjero y las personas privadas de la libertad tampoco estuvieron consideradas.