Lo que cuesta comer en los 10 mejores restaurantes del mundo: hay uno con un menú que supera los 2.000 euros

Forman parte de un selecto club gastronómico internacional. La lista de The World’s 50 Best Restaurants, editada por la empresa de medios William Reedse, se presentó anoche en Turín, con un ganador, el peruano Maido, en Lima (Perú), que durante un año lucirá el título de mejor del mundo. El Asador Etxebarri, en Axpe (Bizkaia), tenía más papeletas para liderar la lista, ya que partía de la segunda posición, en la que se mantendrá, al menos, un año más. Además, es el restaurante de la presente edición más longevo en el top ten, donde se mantiene desde 2016. Entre las novedades en este exclusivo grupo se encuentran Sézanne, en Tokio (Japón), que asciende del puesto 15º al séptimo; y Kjolle, en Lima (Perú), la iniciativa de Pía León, socia de Virgilio Martínez en Central, elegido mejor restaurante del mundo en 2023. Y esto es lo que cuesta aproximadamente comer en el Top 10.

1.

Maido (Lima, Perú)

Abierto en 2009 por el peruano Mitsuharu Tsumura, conocido como Micha, de origen peruano y raíces japonesas de Osaka, este restaurante es uno de los máximos exponentes de la cocina nikkei, que fusiona las recetas de su país con las técnicas y elaboraciones japoneses. En esta edición asciende al primer puesto, desde la quinta posición. Ofrece varias opciones de menú degustación: sin maridaje de vinos (288,29 euros); con armonía de vinos (455,45 euros); con bebidas prémium (586,28 euros); y una versión sin alcohol (376,48 euros). La propuesta, compuesta por más de diez pases, puede incluir platos como El Triple —una reinterpretación del clásico sándwich limeño con aguacate, huevo, tomate y chashu (panceta de cerdo estofada)—; caracoles al sillao (salsa de soja) con espuma de ají amarillo y salsa nikkei; ramen de calamar con chorizo amazónico; dumplings de pato; y una secuencia de nigiris con influencias peruanas y japonesas.

2.

Asador Etxebarri (Axpe, España)

Situado en el valle de Atxondo, en Axpe (Bizkaia), el restaurante de Bittor Arginzoniz se mantiene en el segundo puesto de The World’s 50 Best Restaurants, tras ascender desde la cuarta posición. Su cocina tiene el aroma inconfundible del humo: es la esencia de una propuesta que se basa en el dominio ancestral del fuego y el uso de distintas maderas —encina para pescados, mariscos y verduras; sarmiento para las carnes—. La estrella es el producto. Desde las gambas rojas que llegan a diario de Palamós hasta el queso elaborado con leche de sus propias búfalas, todo pasa por las brasas que Arginzoniz ha convertido en instrumento de precisión. La sala y la bodega están en manos de Mohamed Benabdallah, conocido como Moha. que acaba de ser elegido mejor sumiller del mundo. Con servicio exclusivamente a mediodía, el restaurante atiende a cerca de medio centenar de comensales. Ofrece carta y un único menú degustación (280 euros, bebidas no incluidas), que incluye un recorrido por piezas excepcionales: chorizo artesano como aperitivo, tosta con ventresca en salazón, queso de búfala, gamba de Palamós, berberechos con guisantes, chipirón al natural, cocochas de merluza con langostinos en tempura, ventresca de bonito, besugo, mollejas de ternera y chuleta de vaca. El postre: helado de leche reducida con jugo de remolacha.

La carta ofrece también platos como anchoas en salazón (35 euros), caviar ligeramente braseado (10 g, 50 euros), ostras (15 euros la unidad), bogavante a la brasa (160 euros el kilo), suflé de chocolate (25 euros) o flan de queso (25 euros). El pago debe realizarse por adelantado y cubre el total de comensales de la reserva.

3.

Quintonil (Ciudad de México, México)

Abrió en 2012 y poco a poco se ha convertido en uno de los máximos exponentes de la cocina mexicana de vanguardia. Al frente está el chef Jorge Vallejo, con experiencia en casas como Noma (Dinamarca) y Pujol (México), de Enrique Olvera. Lo acompaña su esposa, Alejandra Flores, sumiller y jefa de sala, formada en la prestigiosa escuela suiza Les Roches y exdirectora comercial y de operaciones del grupo Olvera. La propuesta gira en torno a ingredientes locales frescos, técnicas tradicionales y sabores ancestrales de México, reinterpretados en clave moderna. Entre sus platos destacan el chileatole de colinabo con hoja de maíz fresco, epazote y cilantro; el taco dorado de atún; hongos lactofermentados en almendrado yucateco; buñuelo de plátano macho con escamoles y crema de miel de agave; tartaleta de mejillones con mole del mar; ensalada de melón y tomates con horchata de arroz y pepita de calabaza; barbacoa de pesca del día en adobo de chapulín con crema de coliflor y plancton; tamal de cerdo al pibil con crema de elote tierno; o rib eye añejado de Tequisquiapan con garum de huitlacoche, mole de espárragos y hojas de primavera.

El menú degustación cuesta 226,29 euros. Las opciones de maridaje incluyen vinos del mundo o vinos mexicanos (118,86 euros), una selección de vinos de terroir y rarezas (320 euros), o una propuesta sin alcohol (82,29 euros).

4.

DiverXO

Instalado en el hotel NH Eurobuilding hasta diciembre de 2027, Dabiz Muñoz continúa desplegando su creatividad en DiverXO, el buque insignia del grupo UniverXO, al que también pertenecen marcas como RavioXO, StreetXO, GoXO y Hungry Club (proyecto para aeropuertos). El menú de DiverXO ha evolucionado hacia una cocina más liviana: menos grasa, menos fondos, menos sal. El resultado es una mayor pureza y contraste en los sabores. El banquete (450 euros, bebidas aparte) arranca con un homenaje familiar a su hija Laia: sopa de leche de colinabo con lengua de buey estofada, tapioca y vainilla; quisquilla de Motril y cangrejo a la pimienta negra; y su alimento favorito, la cococha de pescadilla de pincho a la brasa con pilpil de hierbas, chutney indio de tomates asados y garam masala (mezcla de especias indias).

Entre los platos destacan el nugget de pato azulón en tempura con salsa jerk jamaicana y trufa negra; un chupe pirenaico de cangrejos de río con naranja calamondín; una sopa de aleta de tiburón con caldo de puchero, panceta cantonesa y chistorra de Arbizu; o un rollito de primavera de ropa vieja con verduras encurtidas en pasta de judía verde fermentada. También el “minutejo del Agus”, un guiño a las meriendas familiares: un sándwich de oreja a la plancha reconvertido en un potente emparedado de fiambre de cochinillo, con pan de piel crujiente, pesto de trompetas de la muerte, sriracha casera, pecorino, yema de oca curada y albahaca. La selección de vinos, a cargo del sumiller Tomás Ucha, se presenta en cuatro armonías: Eruciforme (300 euros), Crisálida (600 euros), Danaux Plexippus (900 euros) y Metamorfosis, una opción sin alcohol (250 euros). El pago del menú se realiza al efectuar la reserva.

The Alchemist (Copenhague, Dinamarca)

Ubicado a las afueras de Copenhague (Dinamarca), el espectáculo comienza en cuanto se abren sus puertas de bronce. Rasmus Munk es el cocinero e ideólogo detrás de una de las experiencias gastronómicas más audaces y transgresoras del mundo actual. Su propuesta, denominada “cena holística”, despliega unos 50 pases que navegan entre la alta gastronomía, el drama, el arte, los efectos visuales, la tecnología y el diseño. El precio del menú asciende a 724 euros, con diferentes opciones de maridaje que van desde los 269 hasta los 1.274 euros. Además, el restaurante ofrece la exclusiva Mesa del Sumiller, que incluye un maridaje con vinos de productores de referencia, café, té y una bebida digestiva, por 2.199 euros.

6.

Gaggan (Bangkok, Tailandia)

El cocinero y propietario, Gaggan Anand se define como un director de ópera en la cocina, al mando de un pequeño teatro: una mesa-barra para 14 comensales. La experiencia, tan gastronómica como escénica, se acompaña de efectos de luz cambiantes y una banda sonora explosiva. Ofrece un menú degustación de 22 platos, concebido como una narrativa literaria que estimula todos los sentidos. La base es la cocina india, reinterpretada con técnicas contemporáneas e ingredientes de todo el mundo. El precio del menú es de 424 euros, a los que se añadirá una tarifa de reserva del 3,2%. El restaurante no atiende a comensales veganos ni jainistas —cuyo credo impone una dieta estrictamente vegetariana—, ni a personas alérgicas al cilantro o al chile.

7.

Sèzanne (Tokio, Japón)

Ubicado en la séptima planta del Hotel Four Seasons de Tokio, en el distrito de Marunouchi, este restaurante presenta la propuesta gastronómica del chef Daniel Calvert, originario de Surrey (Reino Unido), quien ofrece una interpretación elegante y precisa de la cocina francesa. El interior, sofisticado y sereno, ha sido diseñado por el reconocido decorador hongkonés André Fu. El menú degustación, compuesto por 12 platos y disponible tanto en almuerzos como en cenas, tiene un precio de 303 euros. Incluye creaciones como una bullabesa con azafrán de la prefectura de Saga, shirako de fugu (leche de pez globo) y salsa de cangrejo asado. La carta de bebidas destaca por una amplia y cuidada selección de champanes.

8.

Table by Bruno Verjus (París, Francia)

Hace dos años protagonizó la entrada más fulgurante en la citada clasificación: del puesto 77º saltó directamente al décimo. En la edición siguiente alcanzó el tercer lugar y este año ha descendido a la octava posición. Situado en París, el restaurante de Bruno Verjus —chef y propietario— gira en torno a una obsesión: la selección del producto. Verjus aborda cada estación, cada momento y cada región con un enfoque singular. Asegura trabajar con productores locales que le suministran cada día lo que la naturaleza ofrece, aunque no rechaza ingredientes procedentes de más lejos si responden a sus estándares.

Ubicado en las inmediaciones de Faubourg Saint-Antoine, una de las calles más antiguas de París, el local cuenta con una barra escultórica que simula una ola, creando pequeños espacios privados, además de algunas mesas dispuestas alrededor. Tiene capacidad para algo más de una veintena de comensales. La cocina, completamente abierta, permite observar al detalle todo el proceso de elaboración y emplatado.

Ofrece un único menú, bautizado como El color del día, que cambia a diario en función de las verduras y hortalizas de temporada. Entre los platos pueden encontrarse espárragos verdes escalfados con algas o bogavante templado con guisantes dulces, ortigas y salsa remoulade —una mezcla de mayonesa, mostaza y alcaparras—. El menú degustación cuesta 480 euros e incluye una reserva previa de 240 euros, no reembolsable en caso de cancelación. Se ofrecen tres opciones de maridaje: vinos (300 euros), champán (400 euros) y té (200 euros).

9.

Kjolle (Lima, Perú)

Es el proyecto gastronómico de Pía León, la mujer y socia de Virgilio Martínez, al frente del restaurante Central, elegido el mejor del mundo en 2023. Ese mismo año, León debutó en la lista de The World’s 50 Best Restaurants en el puesto 28º, ascendiendo al 16º en la última edición. Su propuesta se nutre del trabajo de Mater, una plataforma interdisciplinar dedicada a investigar y documentar saberes, comunidades y entornos que conforman la identidad peruana. A través de sus menús, León traza un recorrido por la riqueza biológica y cultural del país.

En sus platos pueden encontrarse tubérculos como yuca, olluco o sachapapa; corvina y navajas; langosta; o combinaciones de frutas y tallos andinos y amazónicos. Ofrece varios menús degustación, de entre siete y nueve pasos, con precios que oscilan entre los 185 y los 240 euros. La experiencia puede completarse con néctares y extractos líquidos, por un suplemento que va de los 85 a los 111 euros.

10.

Don Julio (Buenos Aires, Argentina)

Abierta en 1999 por Pablo Rivero en el barrio porteño de Palermo, esta parrilla se ha consolidado como una de las mejores del mundo. Sus mesas figuran entre las más codiciadas de Buenos Aires. El reconocimiento internacional se ha cimentado en la excelencia y el tratamiento preciso de las carnes, que han llevado a Don Julio a lo más alto de la gastronomía global. Rivero, que el año pasado ingresó en el top 10 de The World’s 50 Best Restaurants —posición que mantiene en la presente edición—, fue distinguido además como el mejor sumiller del mundo en la última gala celebrada en Las Vegas (Estados Unidos). Heredero de una tradición familiar ligada a la carne —su abuela era carnicera y sus padres, ganaderos—, ha elevado el oficio a una nueva dimensión. Trabaja con carnes de razas Aberdeen Angus, Hereford y Angus, con puntos de maduración equilibrados, y defiende un modelo de sostenibilidad basado en la ganadería regenerativa. También presta especial atención a las verduras de temporada, cultivadas a partir de un semillero propio.

Ofrece una carta en la que destacan cortes emblemáticos: ojo de bife (61 euros), bife de chorizo angosto (53 euros), entrecot (73 euros) y bife de lomo (74 euros).