Los sindicatos negocian con el Ayuntamiento la reducción de jornada a 35 horas semanales

Los sindicatos que representan a los casi 15.000 trabajadores del Ayuntamiento de Barcelona están negociando el futuro convenio, para el periodo 2025-2028, que tendrá como principal novedad reducir la jornada de las actuales 37,5 horas semanales a 35 horas. El futuro convenio también incluye el derecho a la desconexión digital fuera de horas de trabajo, movilidad (que un funcionario pueda cambiar de un distrito al que está asignado a otro), reducción por conciliación familiar hasta los 14 años de los hijos, permiso por duelo gestacional o compactación de las reducciones de jornada en cuatro días de los cinco de la semana laboral. Tras varias reuniones desde el mes de enero, este martes CC OO y UGT anunciaron que la reducción está cerrada para el grueso de casi 10.000 personas que trabajan en la administración con el llamado “horario común”, que supone mañanas y una tarde a la semana.

Pero queda por bajar al detalle en el caso de los trabajadores especiales (Guardia Urbana o Bomberos), que trabajan todas las tardes (guarderías) o con horarios que no son fijos y en los que se atiende a la ciudadanía: servicios sociales, oficinas de atención ciudadana o de vivienda. Estos dos sindicatos, con ocho de los 15 representantes en la mesa de negociación, confían en poder firmar el acuerdo antes de final de año. Un convenio que afecta a los funcionarios hasta jefes de servicio (deja fuera a las categorías superiores: directivos y gerentes) que luego afrontará un trámite político, ya que debe ser validado por el pleno municipal.

Fuentes del Ayuntamiento explican que las negociaciones, en diálogo con los sindicatos mayoritarios, están en la fase final, “y han permitido acercar posiciones para conseguir un acuerdo que refuerce la calidad del servicio público”, con medidas largamente reivindicadas en el sector público como la reducción de la jornada laboral.

CC OO y UGT son mayoría en la mesa de negociación. El sindicato CGT ha cuestionado la aplicación de la reducción horaria a 35 horas por el impacto que puede tener en los servicios públicos. “Una propuesta que se quiere vender como una gran victoria cuando en realidad es una gran tomadura de pelo, ya que no cuenta con un aumento de presupuesto y repercutirá en una sobrecarga de la plantilla y degradación y recorte de los servicios públicos municipales”, alertó hace unas semanas. Por ahora, el colectivo que mayor oposición ha manifestado es el del Instituto Municipal de Servicios Sociales, que congrega a servicios sociales, los servicios que atienden a mujeres, la ciudadanía o las solicitudes de prestaciones, por lo que ha convocado una protesta para el próximo jueves. “Las plantillas están al límite, con ratios imposibles de asumir, listas de espera que vulneran los derechos básicos y una presión institucional por la que resulta imposible garantizar una atención social de calidad”, han denunciado en un comunicado.

En la mesa de negociación del convenio, en la parte social hay cinco representantes de CC OO, cuatro de UGT, tres del CSIF (con mayoría de guardias urbanos entre sus afiliados) y tres de CGT. Por parte de CC OO, el sindicato mayoritario también en el comité del Ayuntamiento, la secretaria general en el consistorio, Maria Rosa Tomás, celebra una reducción que está prevista “sin reducir los salarios” de la mayoría de los trabajadores municipales, que simplemente pasarían de trabajar una tarde a la semana a no trabajarla. Tomás destaca que esta reducción “debe salvaguardar los servicios públicos”, por lo que queda “cerrar y desgranar la aplicación en los colectivos que sí tienen horarios de tarde o son colectivos especiales como los Bomberos o Guardia Urbana”, para los que una fórmula sería compensarles económicamente.

El representante de UGT en la mesa de negociación del convenio y secretario general de servicios públicos del sindicato en el Ayuntamiento, Pablo Romero, recuerda que el consistorio ya funciona con reducción de horario en verano (de mayo a septiembre) y Navidad. “Ahora falta el encaje para el conjunto de los trabajadores, también en servicios sociales y oficinas de atención ciudadana o de vivienda y guarderías”, además de Bomberos y Urbana.