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Los 70 años de Kris Jenner, la ‘momager’ que convirtió a las Kardashian en un imperio multimillonario

Había cumplido los 50 cuando decidió dar un giro a su vida y convertirse en personaje televisivo con su numerosa familia. Una decisión que ha trascendido la televisión: los miembros de ese ‘klan’ y sus negocios han influido como pocos en la cultura popular de las últimas décadas

Kris Jenner
Elisabet Sans

Kris Jenner cumple este 5 de noviembre 70 años coronada como la artífice de uno de los fenómenos de la cultura popular más relevante de las últimas décadas. El mundo probablemente no sería el mismo sin la visión y determinación que tuvo esta californiana hace casi 20 años. Ella no solo parió a Kourtney, Kim, Khloé y Rob Kardashian, así como a Kendall y Kylie Jenner, sino que, primero, los convirtió en personajes televisivos para, después, ayudarles a crear negocios millonarios de los que ella también obtiene su parte. Un poderoso klan que Kris Jenner empezó a moldear cuando ya había cumplido los 50 años.

Pero empecemos por el principio. Nacida como Kristen Mary Houghton el 5 de noviembre de 1955 en San Diego, su infancia estuvo marcada por los dos divorcios de su madre. Su primer trabajo fue a los 10 años, envolviendo regalos. Luego trabajaría en una tienda de dónuts y en una de ropa infantil que pertenecía a su madre. Después, sería azafata de American Airlines. Su currículo se detiene cuando conoce al abogado Robert Kardashian: ella tenía 17 años; él, 11 más. Tras aceptar su segunda proposición de matrimonio, se casaron en julio de 1978. En 1990, y tras ampliar la familia con cuatro hijos, el abogado —quien se hizo mundialmente conocido como parte del equipo de defensa de O. J. Simpson en el juicio que le exoneró del asesinato de su exmujer Nicole Brown Simpson y Ronald Goldman— pedía el divorcio al conocer la aventura de su mujer con el jugador de fútbol Todd Waterman. “Le mentí constantemente a Robert” durante la infidelidad, escribió Jenner en su biografía de 2011, Kris Jenner … And All Things Kardashian. “No podía controlarme”, confesaba. Robert Kardashian la sorprendió desayunando con su amante (ella cree que un detective privado les siguió), lo que provocó una gran pelea. Esto continuaría durante tres meses y él los vería juntos hasta en tres ocasiones.

El divorcio se puso tan feo que él incluso le cortó el acceso a las tarjetas de crédito. “No tenía dinero, ni un dólar, a mi nombre. Él controlaba todo”, escribió Jenner en sus memorias, publicadas hace ya tantos años que probablemente requerirían una segunda parte. “Nunca antes de ese momento en esta época oscura se me ocurrió que no tenía poder. Más adelante, decidiría que era una situación en la que nunca volvería a estar durante el resto de mi vida”, añadía. El divorcio finalizó en marzo de 1991, después de que la nueva pareja de Jenner fuera a ver a Kardashian para asegurarle que no querían dinero. Kris y entonces Bruce —hoy Caitlyn— Jenner se casaban un mes después; no había pasado ni un año desde que les presentaron en una cita a ciegas.

Caitlyn Jenner era por entonces conocido como Bruce, medallista olímpico de decatlón. Él fue el primer proyecto de Kris Jenner. Eran familia numerosa (cuatro hijos de ella, cuatro de él; y luego llegarían dos hijas en común, Kendall y Kylie), y necesitaban dinero. A Kris se le ocurrió rentabilizar el éxito deportivo de su pareja. Lo preparó para comercializar su discurso motivacional, Finding the Champion Within, a una audiencia más amplia, y lo ayudó a crear una serie de vídeos de ejercicios (Kris aparecía en los anuncios entrenando). El éxito del negocio de conferencias fue la primera vez en la que se dio cuenta del talento que tenía en su propia casa, así como de su potencial para la seguridad financiera.

El giro definitivo llegaría cuando un amigo que trabajaba como director de casting fue de visita a su casa de Hidden Hills (California) y observó el caos. Les sugirió que debían presentar a su familia para protagonizar un reality. Quién sabe si lo hizo en broma o no, pero al día siguiente Kris Jenner se lo presentó a Ryan Seacrest, productor del canal de programas de telerrealidad E! Con solo una primera grabación casera durante una barbacoa familiar le compraron el show, que empezó a emitirse en 2007. “No teníamos idea de que se convertiría en el monstruoso negocio de la cultura pop que es”, ha comentado alguna vez Seacrest.

Así es como Kris Jenner empezó a labrarse una carrera como personaje televisivo a los 51 años. “Estábamos trabajando en nuestras tiendas en Calabasas [Los Ángeles] y pensé que esta sería una excelente manera de dar visibilidad a nuestro negocio, ya que era como un grupo focal instantáneo. Esta fue una herramienta de marketing inmediata y algo que podría resultar útil para otras cosas”, recordaba Jenner en una entrevista con Vogue Arabia publicada el pasado mes de agosto. Probablemente, en esos momentos ni ella se podía imaginar hasta qué punto le iba a ser rentable exponer su vida familiar.

Era 2015 cuando un artículo publicado en The New York Times decía: “Todavía hay personas que desestiman a Kris Jenner y su familia como ‘famosas por ser famosas’, una tonta familia de reality show que crea un espectáculo artificial. Pero hemos llegado al punto en el que las Jenner y las Kardashian no son famosas por ser famosas: son famosas por la industria que han creado, el megacomplejo Kardashian/Jenner, que no solo ha invadido la cultura, sino que ha hecho metástasis en ella, con los miembros de la familia emergiendo como empresarios legítimos y Kris como la madre líder de todos ellos”. Y eso que por aquel entonces la influencia de las redes sociales aún no era lo que es hoy y sus hijas —las cinco acumulan 1.547 millones de seguidores; siendo Kylie, la pequeña, la que más tiene— aún no habían lanzado todas sus exitosas marcas de moda y belleza. “Me gusta todo de cierta manera”, declaraba Kris Jenner al periódico neoyorquino. “No soy alguien que simplemente pueda relajarse y dejar que ocurra. Eso nunca me va a suceder. Y creo que eso es lo que me ha llevado a donde estoy en la vida. No puedo encender y apagar”.

Le gusten a uno o no le gusten los reality shows, no se puede negar el atractivo global de Kris Jenner. En televisión durante los últimos 18 años, desde el estreno de Keeping Up With the Kardashian el 14 de octubre de 2007 en E!, hoy equilibra sus roles como madre y manager de seis hijos, abuela de 13 nietos, pareja de Corey Gamble (Atlanta, 44 años) —con quien mantiene una relación desde 2014— y directora ejecutiva de las nueve empresas de la familia Kardashian-Jenner, valoradas en miles de millones (incluidas Skims, Kylie Cosmetics y Good American).

En el reality familiar han dejado ver muchas victorias y momentos de alegría, pero también las peleas físicas entre las hermanas o los más agrios divorcios. Como la muy pública separación del matrimonio Jenner tras 22 años, que culminó con la transición de género del padre de sus dos hijas menores, anunciada ante el mundo entero en la portada de la revista Vanity Fair en 2015. Casi 17 millones de personas encendieron la televisión para escuchar a Caitlyn Jenner contarle su proceso de transición a la periodista Diane Sawyer. “Pasar por esto fue hacerlo día tras día, de verdad. No tenía experiencia en nada de eso, así que solo estás tratando de entenderlo todo. Soy la madre de los niños y trato de navegar en ello; honestamente, fue difícil porque quería ser la mejor madre posible y no siempre supe lo que eso significaba”, recordaba Kris en una entrevista con la revista de The Wall Street Journal en 2021.

Actualmente se emite la séptima temporada de Las Kardashian en Hulu/Disney +, plataforma a la que dieron el salto en 2020, y se emite en dos centenares de países. La familia, en su eterno control de la narrativa, posee los derechos de edición del programa. “Siempre tuvimos estos derechos, así es como negocié el trato”, explicaba Jenner en su entrevista con Vogue Arabia. “No iba a poner a mi familia en una situación vulnerable firmando un papel diciendo que podían hacer lo que quisieran con nuestra imagen, y que solo la veríamos en la televisión. Pero rápidamente nos dimos cuenta de que los momentos crudos, las lágrimas y mostrar nuestras vidas reales tenían un valor real. Solo quitamos algo cuando nos veíamos mal o había un ángulo mejor”, aseguraba.

“Kris Jenner es una fuerza imparable”, recordaba Seacrest en Forbes en octubre de 2022. “Logró llevar a su familia a crear un imperio más grande que cualquier cosa que hubiéramos imaginado cuando se nos ocurrió el concepto del programa hace 15 años”. Entonces fue cuando la publicación decidió incluirla en su lista 50 Over 50, 50 personajes poderosos con más de medio siglo de vida. “El hecho de que haya convertido a la familia en un nombre familiar y a sus hijos en emprendedores, todo después de cumplir 50 años, le otorga un lugar en esta segunda lista anual”, justificaba la publicación. Famosa por recibir un 10% de cada dólar que sus hijos obtienen en sus trabajos como modelos, en acuerdos de licencias y en sus compañías, Forbes entonces le calculaba a Kris Jenner una fortuna de 200 millones de dólares. “No tanto como los 1.400 millones de dólares de Kim o los 600 millones de dólares de Kylie, pero sí bastante impresionante dado su origen hace 15 años”, decía el artículo.

A sus 70 años, lejos de pensar en la jubilación, sigue ejerciendo de momager (combinación de "mom" —madre— y manager, término que la propia Jenner popularizó) de sus hijas, aunque se ha convertido en una estrella por derecho propio. Hoy acumula casi 52 millones de seguidores en su cuenta de Instagram, tiene su propia empresa (Safely, una línea de productos de limpieza que lanzó en 2021), protagoniza campañas de importantes marcas (la última, para la firma de maquillaje MAC) o portadas de revista, como la de Vogue Arabia del pasado septiembre, el mes que siempre se considera más jugoso en las cabeceras de moda.

“No sé cómo se supone que hay que estar con 70 años, pero me siento genial y feliz de estar allí. Mi madre trabajó hasta los 82 y yo planeo hacer lo mismo. ¿Tal vez los 85?”, dijo a la publicación, en la que también hablaba de por qué este año había decidido someterse a su segundo lifting, cuyo resultado se hizo viral el pasado mayo. “El hecho de que envejezcas no significa que debas renunciar a ti mismo. Si te sientes cómodo con tu piel y quieres envejecer con gracia, es decir, que no quieres hacer nada, entonces no hagas nada. Pero para mí, esto es envejecer con gracia. Es mi versión”, explicaba en Vogue. Desde hace dos décadas, Kris Jenner, que en los últimos años también ha amenazado con lanzar su propia marca de skin care, vive en mundo altamente calibrado del que deja ver la mayor, y mejor, parte.

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Sobre la firma

Elisabet Sans
Responsable del suplemento El Viajero, ha desarrollado la mayor parte de su carrera en EL PAÍS. Antes trabajó en secciones como El País Semanal, el suplemento Revista Sábado y en Gente y Estilo. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Ramón Llull de Barcelona y máster de Periodismo EL PAÍS.
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