Ir al contenido
_
_
_
_

Los voluntarios de la riada regresan a La Rambleta, un punto desde el que se organizó la solidaridad

El centro cultural valenciano estrena el documental ‘Voluntarios: La riada silenciosa’ que tendrá un segundo pase el 3 de julio

Centro logístico del voluntariado tras la dana en una fotografía del documental 'Voluntarios: La riada silenciosa'.
Andrés Herrero Gutiérrez

El centro cultural La Rambleta estaba a tope. Los espectadores hacían cola el pasado 18 de junio para ver el documental Voluntarios: La riada silenciosa, que rinde homenaje a quienes de forma altruista se organizaron para socorrer a los vecinos abandonados a merced del desastre. “La Rambleta está en un barrio limítrofe con el río. Al otro lado es zona cero de la inundación. Desde el día siguiente se produjo una concentración espontánea de voluntarios en la plaza del teatro”, recuerda en el documental Rocío Huet, directora del centro cultural.

La estampa es muy distinta a la del 30 de octubre ―un día después de la riada que segó 228 vidas humanas y devastó buena parte de la provincia de Valencia―. El ambiente el día de la proyección es de tarde primaveral casi veraniega. Los que no tienen entradas ―se han vendido todas― verán la película en la calle, que se exhibe en la fachada. El documental se podrá volver a ver en un pase el día 3 de julio en el centro cultural.

Luisa fue de las pioneras. Los apellidos de los entrevistados se omiten en el documental. La joven explica que al día siguiente de la catástrofe pensó “nadie está haciendo nada” y recuerda que “sabíamos que había gente atrapada”. Entonces creó un grupo de WhatsApp. "Pensé que se unirían solo amigos míos. Vimos que no. Nos pasamos a Telegram, que no tiene límite de miembros, y alcanzamos más de un millón de personas”, asegura.

Voluntarios limpian las calles tras la dana del 29 de octubre en una fotografía del documental 'Voluntarios: La riada silenciosa'.

Entre los espectadores hay afectados por la riada y voluntarios. “Madre de Dios”, susurra una señora durante el visionado de las escenas domésticas en las que el lodo arramblaba furibundo.

Durante los 50 minutos de metraje hablan muchos voluntarios. La narración ofrece la estimación de que “en los 11 días en que la plaza fue el centro de organización de voluntarios pasaron por ella más de 1.800 ciclistas, que hicieron 7.500 viajes y pedalearon 52.000 kilómetros”.

Fotografía del documental 'Voluntarios: La riada silenciosa'.

Uno de ellos fue Borja Falgás, de 49 años, que no sale en la película pero ha acudido a verla. A la salida, en el vestíbulo de La Rambleta Falgás ―originario de Gandía, aunque vive en Burjassot desde hace años― cuenta que estuvo una semana, desde el 1 de noviembre, de voluntario en las zonas afectadas. “Al principio venía en bici con una mochila y me ofrecía para llevar cosas a donde fuera”, explica. “Con el tiempo he tenido estrés postraumático y volver a la realidad costó bastante”, señala.

Falgás señala que el documental “en general” le ha gustado mucho. “Sobre todo”, hace hincapié, “en la espontaneidad de la gente”. Pero lamenta que “se iguale a todos los partidos políticos. No es así y es muy peligroso ese discurso. Puede que se hayan pasado la pelota entre ellos, pero unos han hecho mucho más que otros”.

Los afectados cargan en la película contra la respuesta de la Administración. “Cuando te despertabas decías: hoy sí, hoy va a haber gente que te diga cómo tienes que hacer las cosas. Pasaban los días y no”, señala una mujer. “La primera vez que vi ayuda oficial fue al octavo día. Ni policía, ni bomberos, ni ejército. Solo llegaron bomberos forestales a achicar agua de garajes”, explica otro entrevistado.

Esther Robledo, de 39 años, es vecina de la ciudad de Valencia y fue voluntaria. Para ella el documental “ha reflejado muy bien la realidad que vivimos en La Rambleta y en Valencia. La frustración, pero también el amor”. Robledo organizaba en la plaza del centro cultural. “Uno de los días críticos que no había botas de agua yo estuve dentro controlando quién se llevaba y quién no. Era increíble el orden que había. Funcionaba muy bien”.

Precisamente, antes del pase, el consejero delegado de Rambleta, José Adolfo Vedri, ha destacado ante el público “el orden dentro del desorden” que imperó esos días. Vedri ha explicado cómo surgió la idea del documental. “Esto se tiene que conocer, no se puede olvidar. Todas las experiencias y conversaciones con voluntarios y afectados me impulsaron una noche a escribir un ensayo que acabó siendo el germen del documental”, asegura.

Vedri recuerda que de las conversaciones que mantuvo le llamó “poderosamente” la atención cómo los voluntarios, “a pesar de tener vidas totalmente diferentes y culturas distintas, estaban unidos en una empresa tan extraordinaria y generosa. Y me fui a casa diciendo, joder, ‘¿yo qué puedo hacer?’”

La Rambleta tiene en una de sus fachadas un mural del dibujante valenciano Paco Roca que muestra a una mujer con el cepillo y con las piernas envueltas con plástico y que se ha convertido en un icono de los voluntarios que ayudaron tras la catástrofe.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_