Ir al contenido
_
_
_
_

¿Para qué sirven las visitas de los ciudadanos al Parlamento andaluz?

Moreno dice que cesará a la consejera de Salud a final de año si los niños en cuidados paliativos siguen sin atención 24 horas

El presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, habla con dos madres con hijos en cuidados paliativos, este jueves en el Parlamento.
Lourdes Lucio

El mismo día en que la presidencia del Parlamento andaluz ha endurecido las normas de acceso de las personas que asisten invitadas por los grupos a las sesiones plenarias, un par de madres, con hijos menores que requieren cuidados paliativos permanentes, han logrado un compromiso en firme del presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno. Este les ha prometido que antes de final de año estará en funcionamiento la atención sanitaria telefónica 24 horas al día los siete días a la semana. “Si no, habrá una tercera consejera de Salud” ha dicho Moreno.

Las visitas de colectivos al antiguo hospital de las Cinco Llagas, sede del Parlamento, es algo habitual y frecuente desde hace muchos años. De vez en cuando se produce alguna protesta desde la tribuna de público (“un altercado”, en lenguaje del presidente de la Cámara, Jesús Aguirre) que obliga al servicio de seguridad a intervenir y a desalojar a los que protestan.

Las dos madres que se han entrevistado con Moreno, después de estar año y medio esperando a que las atendieran, le han arrancado una promesa de que solucionará lo que para ellas es un problemón. Las visitas al Parlamento, para buscar un encuentro con los responsables del Gobierno, sirven para al menos encauzar los problemas, como bien saben muchos alcaldes (de ahora y de antes), cuando buscan a los consejeros (de ahora y de antes) para acelerar las gestiones. Y estas mujeres, invitadas por los grupos socialista y mixto-Adelante Andalucía, han comprobado que su visita, en principio, ha sido útil.

El portavoz adjunto del PSOE, Rafael Recio, que ha recibido en la puerta a estas mujeres, ha denunciado desde su escaño que la diputada popular Beatriz Jurado había “presionado” a las madres para que antes de que él formulara la pregunta en la sesión de control sobre la atención telefónica sanitaria a los menores con cuidados paliativos, se entrevistaran con la consejera de Salud. “Han tenido 550 días para dar una solución. A una de las madres se le ha saltado las lágrimas por la presión a la que la estaban sometiendo. Es indigno”, se ha lamentado.

Moreno se quejó hace 15 días de “los comités de bienvenida” que, según él, le organizan los partidos de la oposición para que le increpen o protesten cuando se dirige desde su despacho hasta el salón de plenos. Un grupo de mujeres le interpeló a voces en el penúltimo pleno por la falta de pediatras en un centro de salud de Sevilla Este, un barrio de la capital andaluza. Aguirre anotó el disgusto del presidente de la Junta, lo escuchó perfectamente y ordenó endurecer las normas a partir de la sesión plenaria de este jueves.

Los diputados han tenido que ir a la puerta del Parlamento para recoger a sus invitados, que han recibido en el mostrador de las acreditaciones un papelito en el que se les insta a “respetar” cuatro reglas de comportamiento, recogidas ya en el Reglamento de la Cámara: no pueden hacer fotografías ni vídeo en el interior del salón de plenos; “no está permito hacer ningún gesto de aprobación o desaprobación, tales como gritos, aplausos, abucheos, etc.”; “no está permitido mostrar ningún panfleto, cartulina, pancarta u objetos similares” ni “se permiten las prendas de vestir con mensajes expresivos de aprobación o desaprobación”; también se les recuerda que no pueden acceder a la zona de diputados.

Aguirre también dio una orden, que se ha aplicado hoy, para “perimetrar” el recorrido del presidente de la Junta desde que desciende por la escalera principal y cruza el patio del Recibimiento para evitar incidentes. No ha habido vallas, ni cordones, pero sí una presencia mayor a la habitual de personal de seguridad. En contra de lo que suele hacer, Moreno ha ocupado su escaño unos 15 minutos antes de que le tocara intervenir.

Tras contestar a cinco preguntas de los grupos, Moreno ha salido del salón de plenos y se ha parado con las dos madres rodeado de numerosas cámaras de televisión, periodistas, guardias de seguridad, escoltas, algún policía, miembros de su gobierno y del grupo parlamentario popular. Moreno las ha escuchado y les ha dicho que “va a mover Roma con Santiago” para que sus reclamaciones sean satisfechas. Ha dicho que seguirá mes a mes la evolución del caso, cuando las madres les han dicho que sus hijos carecen de tiempo, y ha subrayado que su gobierno tiene la orden de “dar siempre la cara”. También ha dicho que si la atención de 24 horas no está a final de año “habrá una tercera consejera de Salud”.

El plano secuencia, con una gran componente emocional, ha seguido cuando la consejera de Salud, Rocío Hernández, que suele contestar impertérrita a todos los grupos, se ha incorporado a la concurrida conversación del presidente con las madres. “Mueve Roma con Santiago para que se resuelva”, le ha dicho Moreno a la consejera con los micrófonos abiertos, aunque no ha repetido que en caso contrario la destituirá.

A la vuelta del verano, en septiembre, el clima político de la Cámara entrará ya de lleno en el festival electoral ante unos comicios previstos en la primavera de 2026. Aguirre tiene previsto para entonces nuevas reglas de acceso a la tribuna de público. Y también sanciones a los grupos: “En el caso de que las personas expulsadas de la tribuna del público del salón de plenos hayan sido invitadas por un grupo parlamentario, la Mesa de la Cámara, a propuesta de la presidencia del Parlamento de Andalucía, podrá retirar a dicho grupo la facultad de efectuar nuevas invitaciones durante un máximo de tres sesiones plenarias”, dice el borrador que entregó a los grupos el pasado miércoles.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Lourdes Lucio
Informadora política y parlamentaria de Andalucía en EL PAÍS. Antes trabajó en Andalucía Deportiva, Nueva Andalucía y El Correo de Andalucía. Coautora del libro 'Política de Cámara'. Es premio de la Comunicación de la Asociación de la Prensa de Sevilla y premio Andalucía de Periodismo en radio por el programa con el grupo La Permanente.
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_