El planeta y la creación

El planeta Tierra será el protagonista de las actividades iniciales de la Alhóndiga, el centro de ocio, deporte y cultura que se inaugura el próximo martes en Bilbao. La relación entre la naturaleza y las manifestaciones culturales define el Proyecto Tierra, un programa multidisciplinar que abarca el arte, la arquitectura, el cine, la filosofía y el medio ambiente. A partir del 19 de mayo, el Proyecto Tierra será la presentación en sociedad del programa de la Alhóndiga en el campo cultural.

El Proyecto Tierra coincide con el Año Internacional de la Biodiversidad y el Acercamiento entre Culturas de la Unesco. En el centro de la programación se sitúa una exposición de 12 obras que suma piezas artísticas a proyectos de arquitectura y documentales. Su comisaria, Alicia Chillida, ex directora del Centro Atlántico de Arte Moderno de Las Palmas de Gran Canaria, ha elegido, por ejemplo, una instalación de José Ramón Amondarain, una pintura de Darío Urzay y un vídeo de Antoni Muntadas.

Artistas como Darío Urzay o Antoni Muntadas participan con sus trabajos

La asociación Slow Food organizará un mercado de productos del mar

La muestra se abre a las piezas sonoras, como Caimán: nariz blanca (1970-2010), de Lothar Baumgarten, en la que se puede escuchar una grabación de más de 35 horas de duración captada a lo largo de tres décadas en la selva entre Brasil y Venezuela.

Junto al proyecto que Jorge Oteiza y el arquitecto Francisco Javier Sáenz de Oiza realizaron hace más de 20 años para reconvertir la vieja alhóndiga bilbaína en un centro cultural cubierto por un cubo de cristal y a un documental de la antropóloga Olatz González Abrisketa sobre las relaciones entre los animales y los seres humanos, se ofrecerán pinceladas sobre la sostenibilidad, las lenguas, el paisaje y los procesos creativos.

La exposición que componen las 12 obras se completará con la muestra Tierra Natal. Otro lugar comienza aquí, creada por el filósofo y urbanista Paul Virilio y el fotógrafo y cineasta Raymond Depardon alrededor de la biodiversidad y los riesgos para la naturaleza y las culturas minoritarias.

El proyecto engarza alrededor de las exposiciones proyecciones de películas (Tierra, de Julio Medem, o Zoo, de Peter Greenaway, entre otras), conferencias y debates sobre artes visuales, educación y gestión cultural. También se sale de los límites convencionales de un programa cultural con un mercado sobre productos del mar, organizado en colaboración con la asociación Slow Food, el movimiento de defensa de la gastronomía tradicional y los productos locales.

La participación del público será activa en los talleres del Proyecto Tierra. Los habrá para arquitectos y paisajistas, para concienciar a los niños sobre el reciclaje y para que todos los ciudadanos aprendan ciencia experimental.