Un siglo bajando la bandera

Un siglo de carreras. El servicio de taxis cumple 100 años en Madrid. Los primeros coches llegaron en 1909 para sustituir a los carruajes de caballos a una velocidad de poco vértigo: a 10 kilómetros por hora. En la década de los años veinte del siglo pasado llenaron las calles de colores. Del amarillo al rojo cereza, según cada compañía. El cartel de "libre" lo colocaron en los años treinta. Cuando estalló la Guerra Civil, la mayoría de los 3.200 vehículos que circulaban por la ciudad fueron requisados por el bando republicano. Llevaban a los soldados al frente del Guadarrama. Luego hubo que recuperarlos por todo el país. Y se impuso una ley del silencio, vía bando municipal, para que no tocaran el claxon por el centro. ¿Lo respetaban? "Sí, porque hubo muchas denuncias de la Policía Municipal", explica Javier Leralta, periodista y escritor, autor del libro Historia del taxi en Madrid, del que prepara la tercera edición para el centenario y que ha servido para documentar las imágenes de esta página. Entonces -y eso no ha cambiado- "los taxistas mantenían un pulso con el Ayuntamiento", añade el autor.

Una tarde calurosa de junio de 1966 lanzaron sus gorras a la Cibeles. Fue la primera gran protesta. No querían uniforme.

En los setenta creció el número de licencias y 10 años después, los coches pasaron del negro al blanco. Lo último, una flota con portátiles para consultar Internet. Nos queda mucho por ver.