Rusia corta el gas a Europa

El primer ministro ruso, Vladímir Putin, llevó ayer la guerra del gas con Ucrania a un punto máximo: cortó todo el suministro que pasa por el país vecino hacia Europa. La medida colmó la paciencia de Bruselas, que exigió a Moscú y Kiev que antes de mañana restablezcan el suministro. Si no lo hacen, al menos cuatro países -Hungría, Bulgaria, Rumania y Eslovaquia- se quedarán sin un metro cúbico de gas para ese día en pleno invierno. Son los más afectados por un recorte que ya perjudica a 17 países europeos, entre ellos las grandes economías de Alemania, Italia y Francia. Hoy está prevista una reunión entre los presidentes de las empresas de gas rusa y ucrania en Bruselas para intentar un acuerdo. Pero si esto falla, habrá una cumbre europea de emergencia el lunes. En la UE crece la sensación de ser el rehén en esta crisis. Putin la utiliza para demostrar su fuerza, y Ucrania, para reforzar su posición frente a Moscú. España no recibe gas ruso, y los suministros, de otras procedencias, no corren ningún riesgo.