Duran se centra en los valores y aparca las demandas soberanistas

"Cataluña será más fuerte cuanto más fuertes sean nuestras familias". El democristiano Josep Antoni Duran Lleida -candidato a las generales por Convergència i Unió- dejó ayer a un lado las demandas soberanistas y centró su discurso en los valores, los mismos que tantos réditos electorales les dieron a los candidatos de CiU en las municipales en Tortosa, Figueres y Sant Cugat.

Demandas como la autodeterminación, el concierto económico o el derecho a decidir el futuro político de Cataluña han pasado en los discursos de Duran a un segundo plano. En Vic, anoche, se esforzó por publicitar su imagen más moderada con mensajes centristas y reivindicó la "Cataluña del esfuerzo". El democristiano apostó por incorporar en la sociedad, en la familia y en la escuela valores como "la autoridad y el respeto".

Por la mañana ya había descartado que Cataluña pueda celebrar su referéndum de autodeterminación. En una conferencia junto a Artur Mas para presentar un paquete de medidas de mejora de la calidad democrática, Duran apostó por una democracia a la helvética, repleta de referendos para que los ciudadanos opinen sobre mil variados asuntos. La propuesta se concretaría a través de una ley estatal para delimitar los asuntos objeto de consulta. Y éstos no podrían exceder las competencias propias de cada Administración.

El Estatuto faculta a la Generalitat la posibilidad de celebrar consultas populares -no vinculantes-, pero deja su desarrollo a una futura ley. La norma podría entrar en el Parlament tras estas elecciones. Esa es la pretensión del tripartito, que mantiene un inexplicable hermetismo sobre el contenido de la norma. Pero todo apunta a que, pese a que la ley debe redactarla un departamento en manos de Esquerra Republicana, omitirá referencias a todo aquello que suene a autodeterminación, para no toparse con el veto socialista.