La literatura sale a jugar en "Cuentos de fútbol 2"

Alineados sobre la tarima, 10 escritores y un entrenador-escritor hablaron ayer de fútbol y literatura a propósito del libro Cuentos de fútbol 2 (Alfaguara, 344 páginas, 2.700 pesetas), que recoge 22 relatos seleccionados por Jorge Valdano. Desde vertientes muy diversas, los autores han puesto su mirada sobre un juego que, en opinión de Valdano, en estos momentos es víctima de un exceso de seriedad. "Es importante que los intelectuales nos recuerden el carácter recreativo del fútbol, justo ahora en que el juego se está poniendo demasiado realista".Alrededor de Jorge Valdano se reunieron diez de los 24 escritores que han participados en Cuentos de fútbol 2. A un lado se sentaron Pedro Sorela, Juan José Armas Marcelo, Rafael Azcona, Ramón Irigoyen y Josefina Aldecoa. La otra delantera estuvo integrada por Juan Manuel de Prada, Martín Casariego, Soledad Puértolas, Jorge Cela y Manuel Hidalgo. Cada uno explicó su relación con un juego que apasiona a algunos y que interesa a todos. A unos desde la curiosidad, a otros desde un cierto fastidio y, en algún caso desde una mirada casi misteriosa. En este sentido, Soledad Puértolas señaló el lado enigmático que tiene el fútbol para el universo femenino. Puértolas recordó la figura de su padre en una familia integrada por mujeres. "Cada domingo salía de casa y nos decía que iba al fútbol, a La Romareda. Aquella rutina dominical me provocaba asombro y misterio".

Rafael Azcona, que se borró del Bernabéu cuando comenzaron a aparecer los ultras, dijo que el fútbol contiene momentos sublimes de inteligencia: "En pocas actividades se producen resplandores inteligentes como en el fútbol. De vez en cuando, los jugadores encuentran soluciones a problemas que resultan imposibles de adivinar para los espectadores que están cómodamente sentados en la grada". A esta reflexión se adhirió Valdano, quien comentó la dificultad que supone para un jugador tomar la decisión correcta frente a 100.000 espectadores y en medio de una tormenta de ideas. Azcona afirmó que el azar es decisivo en el juego y que ese aspecto es el que pretende describir en su cuento, en el que "un señor que no quiere meter un gol, lo mete".

Varios de los autores señalaron el carácter global del fútbol, capaz de aglutinar lo mejor y lo peor de la condición humana. Y sobre esta base surgen las narraciones. En el caso de Juan Manuel de Prada se trata una aproximación a la figura de Julen Guerrero. Hincha del Athletic, Prada describe su cuento como "una fantasía casi gay en torno a Julen".

Manuel Hidalgo recordó la importancia del fútbol en algunas de sus novelas, incluida La infanta baila, su última obra. Jorge Cela habló del personaje de su relato, un portero y, por tanto, "un personaje singular". El héroe de Cela es un guardameta casi inactivo en un equipo que ataca constantemente.

El libro contiene 23 relatos. Sus autores, además de los diez referidos anteriormente, son Patxo Unzueta, Francisco Umbral, Antonio Skármeta, Ana María Moix, Vicente Verdú, Joaquín Leguina, Javier Pérez Sánchez, Humberto Constantini, Álvaro Cepeda Samudio, Juan Bonilla, Luis Miguel Aguilar y Mario Benedetti, el único que repite participación con respecto al primer volumen de Cuentos de fútbol, publicado en 1995.