Paul Carrack presenta un disco intimista en solitario

Paul Carrack, que formó parte, junto a Glenn Tilbroock y Chris Difford, de una de las bandas más respetadas de lo que se llamó new wave, Squeeze, aprovecha ahora el parón de Mike & The Mechanics, superbanda encabezada por el miembro, de Genesis Mike Rutheford y en la que colabora tocando los teclados para presentar en todo el mundo Blue view, su quinto álbum en solitario.

Carrack, que ha pasado toda una semana en España realizando una serie de cortas actuaciones acústicas para presentar su disco, explica: "Tenía unas cuantas canciones que enseñé a Miles Copeland, el representante de Sting, y él me convenció para que hiciera mí propio álbum. Entonces salió a la calle el último disco de Mike & The Mecanics, que había pegado comercialmente, poniendo de nuevo la máquina del grupo a funcionar. Yo quería hacer mi disco, pero tampoco podía dejar al grupo tirado, así que esperé". Finalmente, aprovechando un descanso del grupo, Paul Carrack ha tenido la oportunidad que necesitaba, y siento que es importante para mí, porque supone un nuevo principio. En la música siempre se está volviendo a empezar".Paul Carrack, nacido en la localidad inglesa de Shefflield hace 41 años, dejó familia y estudios a la edad de 16 años para enrolarse en su primer grupo, en el que tocaba la batería, y más tarde se dedicó al órgano y a cantar. Su voz, hermosa y cálida, es la responsable de preciosas canciones como How long, que ya grabara con su primera banda, ACE, y que vuelve a versionar ahora en este Blue view, o, el archiconocido Tempted, recuperado para la banda sonora del filme Reality bites y que ahora sirve de soporte musical en un anuncio de automóviles. A este respecto, Paul opina que "uno sólo es responsable a la hora de componer una canción. Después, ésta pertenece al público y a lo que él le manda".

Su actual disco es fruto del gusto de Paul por el pop, el soul y las baladas: "Es intimista. Con él no quería echar al público, sino hacer que éste se acercara. Las letras hablan de relaciones, de amor. Yo no hablo de política, porque no soy un intelectual". Ha sido grabado con extraordinaria sencillez, "batería, bajo, dos guitarras, dos teclados, coros y mi voz solista. Es algo clásico, sin trucos de estudio, samplers o máquinas"; ha sido hecho en una semana por importantes músicos que mantienen con Paul Carrack unas buenas relaciones: "El resultado es un elepé bonito que, si se tiene el ánimo indicado para oírlo, te gusta".

Precisamente, ese estilo es ahora evocado por grupos como Blur u Oasis. Acerca del auge de estos últimos, Carrack exclama medio en broma: "¡Me asusta su actitud", para reconocer unos instantes después que es prácticamente la misma que él mantenía, más de quince años atrás. Carrack se siente ahora un músico de batalla, que lo mismo trabaja, componiendo para Diana Ross o Rod Stewart que se engancha como músico acompañante a los Mecanics _"Mike Rutheford es un buen jefe, pero hay veces en las que apetece no tener jefe"-.