La Volkswagen mexicana invertirá 130 millones de dólares

Tras haber superado en menos de tres años una crisis que hizo pensar a sus dirigentes en un eventual cierre, la subsidiaria mexicana de la Wolkswagen alemana ha iniciado un ambicioso programa de inversiones - 130 millones de dólares en el próximo ejercicio- y ha conseguido modificar la inclinación de sus balances anuales hasta el punto que el del año pasado totalizó unos beneficios de veinte millones de dólares.

Dicha metamorfosis es, en parte, consecuencia del giro dado al sector privado mexicano por el presidente José López Portillo después que llegó al poder, en diciembre de 1976, que ha convertido una situación de franca recesión en una prosperidad sin precedentes.

En el sector automovilístico, los fabricantes sufrieron inflación, devaluación de la moneda y la austeridad propiciada por Luis Echeverría en 1976. Desde entonces, el cambio experimentado en la dirección económica, ha producido un aumento de las ventas del 10%, y ha hecho que todas las empresas del sector tengan, en conjunto, un programa de inversiones de 620 millones de dólares en los próximos tres años.