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Las 20 mejores canciones de Oasis, ordenadas: el repertorio perfecto para la gira que comienza hoy

Este viernes, en Cardiff, regresan los de Mánchester después de 16 años de trifulcas. Hemos elegido las composiciones que nos gustaría que sonaran en el Millennium Stadium de la capital galesa

La primera formación de Oasis, en una imagen tomada en Mánchester en 1993. Desde la izquierda: Noel Gallagher (guitarra y voz), Paul 'Bonehead' Arthurs (guitarra), Paul McGuigan (bajo), Tony McCarroll (batería) y Liam Gallagher (voz).
Carlos Marcos

Llegó el día. Hoy, viernes 4, a las 20.15 (21.15 hora española) ocurre lo que seguramente es el momento musical del año, la gira de reunión, después de 16 años tirándose los trastos, de Oasis. Aunque muchos todavía lo dudan ateniéndose a su historial de peleas, Noel Gallagher (Mánchester, 58 años) y Liam Gallagher (Mánchester, 52 años) estarán en Cardiff (Gales), en el Millennium Stadium, ante 70.000 personas. La denominada gira Live ’25 cubrirá hasta noviembre Reino Unido, Irlanda, Canadá, Estados Unidos, Japón, Corea del Sur, Australia y Latinoamérica. Se espera que en 2026 actúen en el resto de Europa, España incluida. ¿Qué repertorio ofrecerán hoy? El que quieran, porque si hay una cosa clara es que sus canciones han pasado la prueba del tiempo, seguramente porque cuando se lanzaron ya sonaban a rock clásico. Para nosotros estas son las mejores. Si interpretan la mitad de ellas ya nos sentiremos en la gloria.

Liam Gallagher, Bonehead y Noel Gallagher en Nueva York, en julio de 1994, en la primera gira de Oasis en Estados Unidos.

1. Supersonic (1994)

Dentro de las canciones de rock que al escucharlas te hacen sentir que eres el rey del mundo esta debe estar entre las primeras. “Necesito ser yo mismo, no puedo ser nadie más. / Me siento supersónico, dame un gin-tonic. / Puedes tenerlo todo, pero ¿cuánto lo quieres?”. Supersonic, el primer sencillo de la historia de los de Mánchester, condensa lo que era Oasis al principio: un entramado de guitarras crudas, una melodía sacada del cofre de John Lennon y una voz con una rabia planetaria que te cantaba que ahora era tu momento. Los Gallagher había tenido una vida de mierda y esta era su propuesta para salir del agujero. Así resumió Noel Gallagher el embrión de Supersonic: “Recuerdo que alguien pidió comida china y fui al cuarto trasero. Y, aunque suene raro, escribí Supersonic en lo que tardan seis tíos en comerse su comida china. Fue un momento brillante porque nunca volvería a hacer algo así”. También reconoció el compositor y guitarrista que, aunque el mensaje está claro (“vamos a enfrentarnos a U2, esa es nuestra ambición”, dijo sobre la letra) parte del texto no tiene mucho sentido, con frases inventadas aquí y allá. “Probablemente siga siendo mi grabación favorita, por ese destello de inspiración. Algo pasaba esa noche, un estallido, y la canción apareció allí”. Todo cobra sentido cuando comienza a sonar la batería, la guitarra cruje y ya eres “supersónico”.

Liam Gallagher durante un concierto de Oasis en 1994.

2. Slide Away (1994)

Seguramente la mejor interpretación vocal de Liam Gallagher. Y eso es decir mucho. Su hermano Noel estará orgulloso de cómo el vocalista proyectó el sentimiento de desgarro amoroso que sentía el guitarrista. Porque sí, esto es una canción de amor, que no todo iba de comerse el mundo a dentelladas. Noel se inspiró para escribir Slide Away en su relación con su novia de entonces, caracterizada por unos altibajos con final triste. “Sueño contigo y todas las cosas que dices. / Me pregunto dónde estás ahora. / Sujétame, todo el mundo duerme”, canta Liam, estirando las palabras, penetrando en el corazón de su hermano mayor. Una canción larga, de 6,32 minutos que Noel compuso con la Gibson Les Paul que le regaló Johnny Marr, de The Smiths.

3. Don’t Look Back in Anger (1995)

El mundo se dio cuenta de la grandeza de Don’t Look Back In Anger cuando en el minuto de silencio en Ann Square (Mánchester) por el atentado en la ciudad inglesa con 22 muertos la gente se puso a cantar espontáneamente el tema de Oasis. Wonderwall es su balada más famosa, pero Don’t Look Back In Anger es mejor. Honores para Paul Bonehead Arthurs, primer guitarrista del grupo, que inicia el tema con un piano lennoniano. Pero aquí el protagonismo absoluto es de Noel, que además de escribir la pieza se pone a la voz principal, con un fraseo suave que le va de perlas al tema. Una canción que adquiere un sentido especial en la reconciliación de este 2025 de los hermanos. Todos esperan el abrazo de Liam y Noel cuando canten aquello de: “Por favor, no pongas tu vida en manos de una banda de rock and roll, que lo echará todo a perder… No mires atrás con ira”.

4. Acquiesce (1995)

La grandeza de Oasis se aprecia, entre otras cosas, por la calidad de sus caras B. Porque esta gente editaba ¡sencillos! con canciones que luego no incluía en los discos, temas como este primoroso Acquiesce. La letra adquiere un nuevo significado con la reunión, porque, aunque Noel negó que esta canción sobre la amistad tratase de ellos dos, hoy resulta inevitable pensar en los hermanos cuando Liam canta: “Porque nos necesitamos y creemos el uno en el otro”. Musicalmente aquí tenemos la alianza perfecta entre Noel y Liam: el armazón guitarrero del mayor para el lucimiento vocal del pequeño.

Noel y Liam Gallagher fotografiados en un hotel de Tokio (Japón), en septiembre de 1994.

5. Live Forever (1994)

Cuántos chicos y chicas se habrán visto impulsados a formar una banda de rock después de escuchar esta canción. Unas cuantas. Noel Gallagher consiguió dotar de identidad a muchos jóvenes de mediados de los noventa que necesitaban como el respirar que alguien les cantase: “Tal vez seas igual que yo. / Vemos cosas que ellos nunca verán. / Tú y yo vamos a vivir para siempre”. Eso es: somos especiales, lo vamos a conseguir a pesar de ellos (de los padres, de los pijos, del equipo rival —el United, en el caso de los hermanos—, del mundo hostil). A igual que Supersonic, Live Forever comienza con la batería para luego entrar la voz enojada de Liam, que por primera vez demuestra que también sabe transmitir con un falsete. Live Forever tuvo una trascendencia enorme para el grupo. Así lo contó Noel en el documental Supersonic: “La primera canción real que escribí fue Live Forever. El primer tema de verdad que terminé y que pensé que era bueno. Llevábamos seis meses ensayando. Recuerdo estar con la guitarra una noche y parecíamos ese tipo de banda alternativa de mierda de Mánchester. Pero a la noche siguiente nos pusimos con Live Forever y todo cambió. Recuerdo que Bonehead [guitarrista de Oasis] me decía: ‘Tú no has podido escribir esto, no puede ser que este tema sea tuyo. Es demasiado bueno’. Aún hoy me discute si lo escribí o no”.

6. Cigarettes & Alcohol (1994)

“Nunca podrás tocar Cigarettes and Alcohol para suficientes personas. Setenta mil personas no parecían suficientes, ni ciento veinticinco mil… Pensabas que debería haber más gente allí para escuchar esto”, dijo con arrogancia Noel Gallagher sobre este tema, y con toda la razón. Una canción para pillarla cuando eres joven, un canto hedonista, hasta podríamos decir que se trata de una canción política: “¿Es mi imaginación, o por fin he encontrado algo por lo que valga la pena vivir? / Buscaba algo de acción, pero solo encontré cigarrillos y alcohol”. Es tan implacable que te olvidas pronto del sablazo que le dan a Marc Bolan.

Liam Gallagher desgañitándose en un concierto de Oasis en Bruselas, Bélgica, en noviembre de 1994.

7. Rock and Roll Star (1994)

Antes de ser estrellas del rock, los Gallagher ya se sentían así. “En mi mente mis sueños son reales. / Esta noche soy una estrella del rock and roll”, canta Liam en el tema que abre el debut de Oasis, Definitely Maybe, y lo ejecuta con tanta rabia que nadie duda de que lo va a conseguir. Pero lo que incluso Liam ignoraba es que iba a ser solo unos meses después de lanzar esta canción.

Noel Gallagher, en la voz principal en un concierto de Oasis en Chicago, abril de 2000.

8. Talk Tonight (1995)

La inauguración de las múltiples amenazas de separación de Oasis ocurrió en la primera gira estadounidense del grupo, en 1994. Después de un turbulento concierto en el Whisky a Go Go de Los Ángeles regado con metanfetamina, Noel cogió su guitarra y dejó a la banda. Se refugió en casa de una chica que, bendita sea, le inspiró este precioso tema que no es otra cosa que la súplica de alguien que desea ser escuchado. Noel, solo con su guitarra y unas palmas sonando al fondo. La desnuda sencillez después de los decibelios y la bronca. “Quiero hablar esta noche hasta el amanecer de cómo me salvaste la vida”, implora Noel a la misteriosa chica.

9. My Big Mouth (1997)

En 1997 Oasis estaba en la cima; también en su cota más alta de consumo de drogas y peleas entre ellos. En este ambiente ofrecieron Be Here Now, el último capítulo de su gran trilogía que componen sus primeros discos. My Big Mouth, incluida en aquel álbum, la estrenaron en los célebres conciertos de Knebworth de 1996, que reunieron en dos noches a 500.000 personas. Noel y Liam la presentan como “jodidamente rockera”, dicen el título (“mi boca grande”) y sueltan, refiriéndose a ser un bocazas, “que nos mete a todos en problemas”. Luego se entregan a una de las canciones más rudas de su catálogo. “Eso es lo que obtienes por acostarte con el enemigo”, canta Liam. Puede hablar de la fama, la cocaína, su compleja relación, sus declaraciones contra Blur… O de todo a la vez.

Noel Gallagher y Meg Matthews (derecha) en 1995. La pareja se divorció en 2001.

10. Wonderwall (1995)

El desgaste de tanto escucharla juega en contra de Wonderwall. Pero si se evitan las emisoras de rock clásico durante una temporada volverá el poderoso empuje de la canción más famosa de Oasis. Mientras estuvo de noviazgo y luego casado con Meg Mathews, Noel dijo que estaba dedicada a ella. Pero llegó el divorcio en 2001 y ahí ya cambió la cosa: desde entonces lo que le inspiró la letra fue una relación de colegas “con un amigo imaginario”. En cualquier caso, cuando suene en su nueva gira se va a caer el estadio y todos vamos a agarrar la mano del vecino y a sentirnos mejores personas. El título, por cierto, lo cogió Noel del primer disco en solitario de su amado George Harrison, Wonderwall Music, que a su vez es la banda sonora de la película Wonderwall (1968).

Liam Gallagher, agarrando una pandereta con los dientes en un recital de Oasis en Berlín, en 2002.

11. Hung in a Bad Place (2002)

Para 2002 Noel Gallagher había bajado tanto la guardia que incluso dejaba que otros firmaran las canciones. Es el caso de Hung In A Bad Place, composición del guitarrista Gem Archer, reemplazo de Bonehead desde 1999. En sus discos de los 2000 el grupo vira a la psicodelia y se olvida de sus himnos rock. Curiosamente es Archer quien recuerda a los hermanos lo que era Oasis al principio en este tremendo tema que calca el punteo de guitarra que adorna la melodía de Birth, School, Work, Death, de los fenomenales The Godfather.

Retrato de la familia Gallagher a mediados de los años setenta. Desde la izquierda, Noel, Paul, Liam y la madre, Peggy.

12. Stand By Me (1997)

Empieza con el típico y chirriante acople de guitarra de Noel, pero lo que viene luego es uno de los más gloriosos temas tranquilos de Oasis. Escrita por el guitarrista como una dedicatoria a su madre, Peggy, que se preocupaba “porque comiese bien”, Liam ofrece con su voz una mezcla de dramatismo y ternura. “Quédate a mi lado, nadie sabe cómo va a ser”, implora. Los arreglos de cuerda adornan una canción melódicamente sobresaliente. ¿Nos importa que copie partes de All The Young Dudes, de su admirado David Bowie? Pues no mucho.

13. Listen Up (1994)

Pues sí, el inicio es idéntico a Supersonic. ¡Y por eso nos gusta tanto! Pero luego Listen Up se eleva por sí sola con una melodía del arcón mágico de Noel. Otra de esas canciones que el grupo se permitió el lujo de colocar en una cara B y no incluyó en el disco de la época. Más tarde formó parte del recopilatorio The Masterplan, de 1998. Liam canta sobre luchar por ser una persona independiente: “No me importa estar solo, voy a decir lo que pienso”.

14. Champagne Supernova (1995)

Si los Rolling Stones tienen You Can’t Always Get What You Want y los Beatles Lucy in the Sky with Diamonds, la de Oasis se llama Champagne Supernova. Las tres aportan una visión de insatisfacción vista desde la cima e impulsada por un estado de psicodelia acentuado por las sustancias. Noel ha intentado explicar el significado de la canción en muchas ocasiones, pero nunca lo ha conseguido. “Son un montón de frases absurdas”, concluye. Lo cierto es que este tema, que cerraba con siete minutos y medio el segundo disco de la banda y contiene un incisivo solo de guitarra de Paul Weller, se convirtió de inmediato en canción de brazos agitados arriba y “cantemos todos juntos”.

Noel Gallagher, en Londres, en 1995.

15. Some Might Say (1995)

Dentro de los grandes (y múltiples) robos de Oasis, Some Might Say ocupa un lugar estelar, con un riff de guitarra inicial copiado de T. Rex. No pasa nada, se lo perdonamos porque la canción es buenísima. El primer sencillo de Oasis que fue número uno en Reino Unido. Los laboristas ya acariciaban el poder (no llegarían hasta 1997 con Tony Blair) después de 16 años de trituradora conservadora y muchos analistas creyeron ver en esta canción de un estribillo, una vez más en los de Mánchester, memorable la bienvenida a un nuevo tiempo: “Algunos podrían decir que encontraremos un día más brillante”, canta Liam.

16. Half the World Away (1994)

Una composición que demuestra lo competente que resulta Noel cantando temas pausados. Cuando el mayor de los Gallagher se encuentra con las defensas bajas le salen estas preciosidades. Half the World Away transpira una atmósfera muy Burt Bacharach y habla de salir de una situación o un lugar que no parece el mejor sitio para quedarse a vivir. Gran labor de Bonehead, otra vez con el piano eléctrico y no con su instrumento principal, la guitarra.

Desde la izquierda, Gem Archer, Noel Gallagher, Liam Gallagher y Chris Sharrock, en el estadio de  Wembley (Londres), en la presentación del último disco de Oasis, 'Dig out Your Soul', en octubre de 2008.

17. The Turning (2008)

Después de tres discos colosales en los noventa, para los cuatro siguientes de los dos mil Oasis compuso música más densa ligada en muchas ocasiones a la psicodelia. The Turning pertenece a su último trabajo, Dig Out Your Soul (2008). Un tema de Noel donde no se muestra muy optimista con el futuro, quizá visualizando el final del grupo, que llegaría un año después, en 2009: “¿Qué esperanzas hay para el cambio si todo lo que sabes está mal?”, entona Liam. La canción es estupenda, con unos graves funk que junto al piano encarrilan la canción para una psicodelia ligera que explota con las guitarras en el estribillo.

18. Little by Little (2002)

Noel ha comentado en alguna ocasión que Liam intentó cantar Little by Little pero que “no pudo”, así que lo hizo él. Seguramente la primera parte del tema, casi susurrado, no se acoplaba con la actitud aguerrida de Liam. Posee la pieza una ambientación un poco Pink Floyd que desaparece cuando llega ese tipo de estribillo soberbio de Oasis. En la letra se aprecia la evolución del Noel “vamos a comernos el mundo” de los noventa a este más reflexivo: “Nosotros, el pueblo, luchamos por nuestra existencia. / No afirmamos ser perfectos, pero somos libres”.

Portada del segundo disco de Oasis, '(What's The Story) Morning Glory?', de 1995.

19. Morning Glory (1995)

Entre los años 1993 y 1997, Noel Gallagher componía genialidades con una absurda facilidad. Morning Glory, con sonido de helicóptero al principio y al final, es una de ellas. Esta vez se trata de una letra que refleja las sensaciones de euforia y dependencia de la cocaína. “Todos tus sueños se hacen realidad cuando estás encadenado al espejo y a la cuchilla de afeitar”, canta Liam en la primera estrofa. Sobre una maraña de guitarras se abre una melodía salida del cielo de las grandes canciones de rock.

20. Whatever (1994)

Esta vez Noel no se salió con la suya: su inspiración para algunas partes de Whatever fue tan evidente que debió compartir los créditos, después de una reclamación, con Neil Innes, un músico y comediante inglés vinculado a Monty Python y autor de How Sweet to Be an Idiot, el tema que sin duda tenía rebotando en su cabeza el mayor de los Gallagher cuando escribió la canción. Por primera vez en ese momento, los de Mánchester utilizan los instrumentos de cuerda de forma evidente para dibujar la melodía, influencia de sus adorados Beatles. Liam canta con coraje la insurgente actitud de Noel hacia el estricto padre de ambos: “Soy libre de ser lo que yo elija”.

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Sobre la firma

Carlos Marcos
Redactor de Cultura especializado en música. Empezó trabajando en Guía del Ocio de Madrid y El País de las Tentaciones. Redactor jefe de Rolling Stone y Revista 40, coordinó cinco años la web de la revista ICON. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y Máster de Periodismo de EL PAÍS. Vive en Madrid.
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