Ir al contenido
_
_
_
_

El Concierto de Año Nuevo de la Filarmónica de Viena. Así te lo hemos contado en directo

Riccardo Muti brinda un inolvidable Concierto de Año Nuevo, dramático y refinado, pero sin público en la sala

Riccardo Muti, de espaldas, al frente de la Filarmónica de Viena en el Concierto de Año Nuevo de 2021.
Pablo L. Rodríguez

El Concierto de Año Nuevo de la Filarmónica de Viena se ha celebrado en la ciudad austríaca con una de las mejores orquestas del mundo sobre el escenario, y uno de los directores más destacados sobre el podio, Riccardo Muti, que no parece que se haya visto afectado por la ausencia de público motivada por las restricciones de la pandemia. El evento más mediático de la clásica, ha presentado, como cada año, un programa de piezas breves, atractivas y elegantes, formado por valses, polcas y marchas de la familia Strauss y sus coetáneos.

Ha habido momentos especiales en esta peculiar edición. Al final de la primera parte han sonado los aplausos virtuales y hemos visto varios mosaicos con fotos de espectadores, una iniciativa de la ORF que, a través de una página web ha recopilado aplausos e imágenes de espectadores del Concierto de Año Nuevo. La segunda parte se ha iniciado con un mensaje de paz y optimismo del actual presidente de la Filarmónica de Viena, Daniel Froschauer. Y también homenajes, como la cita de La traviata, de Verdi, al inicio de la cuadrilla Nuevas melodías que ya sonó, en 1998, con Zubin Mehta sobre el podio. Y, para terminar, la Marcha Radetzky, de Johann Strauss padre, pero sin las palmas acompasadas. Se ha escuchado la versión de la orquesta vienesa que desdeña el arreglo del miembro del partido nazi Leopold Weninger.

Daniel Barenboim dirigirá el Concierto de Año Nuevo de 2022, año en el que cumplirá 80 años. Será su tercera vez, tras 2009 y 2014.

Juan Carlos Galindo

Y con estas imágenes para la historia nos despedimos, gracias a todos y en especial a Pablo L. Rodríguez por sus comentarios y análisis. 

Juan Carlos Galindo

Marcha con aplausos virtuales. "Y faltaba para terminar, la Marcha Radetzky, de Johann Strauss padre, pero sin las palmas acompasadas. Se ha escuchado la versión de la orquesta vienesa que desdeña el arreglo del miembro del partido nazi Leopold Weninger.  Y, efectivamente, ese año hemos escuchado detalles diferentes de la obra, que no permitían los aplausos, y en los que Muti se ha recreado. Pero ha sido, obviamente, menos festiva, a pesar de los aplausos virtuales. Hemos visto un gran Concierto de Año Nuevo. Ha sido un placer comentarlo para ustedes. Gracias por su atención y feliz año nuevo", comenta Pablo L. Rodríguez en este final de concierto que ha analizado para EL PAÍS. 

Juan Carlos Galindo

Para la felicitación del año nuevo, nos señala Pablo L. Rodríguez, "Muti ha cambiado la tradicional felicitación del nuevo año y lo ha precedido con un breve discurso. Ha recordado que la música no es una profesión, sino una misión. Y ha pedido, a todos los mandatarios del mundo, que la cultura es un elemento primordial para conseguir una sociedad mejor. Tras ello, ha llegado la obra que mide siempre el nivel cada edición del Concierto de Año Nuevo. Diríamos que es algo así como la “obligada” y también más famoso de todos los valses: El bello Danubio azul, de 1866, casi como un segundo himno nacional austríaco. Muti ha dirigido una versión profundamente madura y reflexiva de la obra, sin el brío que caracterizó sus versiones de los noventa. La realización de Kasten ha evitado, esta vez, mostrarnos las aguas del río, como en 2018, y se ha concentrado en tomas de la sala vacía". 

Juan Carlos Galindo

Ya solo queda  la Marcha Radetzky, de Johann Strauss padre. 

Juan Carlos Galindo

Noticia importante adelantada por Pablo L. Rodríguez: Daniel Barenboim dirigirá el Concierto de Año Nuevo de 2022, año en el que cumplirá 80 años. Será su tercera vez, tras 2009 y 2014. 

Juan Carlos Galindo

Ya suena  En el bello Danubio Azul de Johan Strauss hijo. 

Juan Carlos Galindo
"Es extraño para nosotros interpretar en una sala vacía (...) Pero aquí estamos, con el poder de la música. Mi mensaje para los gobernantes del mundo es que consideren la cultura como uno de los elementos fundamentales para conseguir un mundo mejor", asegura Riccardo Muti en su mensaje.
Juan Carlos Galindo

Diabólico deambular. "Tras los aplausos virtuales y el mosaico de fotos, Muti ha dirigido la primera propina, la Polca Furiosa (Casi Galope), de 1861, también de Johann Strauss hijo. Y Muti ha vuelto ha sacar todo el potencial musical a la partitura con ese diabólico deambular por tonalidades mayores y menores. Lorin Maazel dirigió una versión impresionante de esta polca en 1996. Y Muti ha vuelto a ir a la zaga", nos comenta Pablo L. Rodríguez.

Juan Carlos Galindo

Antes de los bises... "La polca rápida Tempestuoso en el amor y en el baile, que pone fin al programa habitual, fue la contribución de Johann hijo al baile de la asociación de la prensa, en 1881. La obra está basada en melodías de la opereta El pañuelo de encaje de la reina de temática española.  Una obra que dirigió admirablemente Daniel Barenboim, en 2014. Muti tampoco se ha quedado atrás!

Juan Carlos Galindo

Una gran pieza icónica, una dirección excepcional. "El Vals del Emperador es una de las pieza más conocidas de Johann Strauss hijo. Conocido en origen como Mano a mano para celebrar, en 1889, la visita del káiser Guillermo II de Alemania al emperador Francisco José I de Austria. Kasten ha ilustrado este hecho con una imágenes del Palacio Imperial de Viena y el Museo Sisí. Al final, la obra se llamó Vals del Emperador para no ofender a ninguno de los dos emperadores. Es una pieza icónica en el Concierto de Año Nuevo ya desde su primera edición, en 1939, con Clemens Krauss. Muti ha dirigido otra versión excepcional, llena de contrastes dramáticos y conjugando todo el refinamiento y potencial de la orquesta vienesa (con otro exquisito solo del violonchelista Tamás Varga), tal y como hizo el inolvidable Mariss Jansons en esta misma sala hace cinco años. No obstante, hemos escuchamos esto lo mejor, hasta ahora, de esta edición del Concierto de Año Nuevo", comenta Pablo L. Rodríguez.

Juan Carlos Galindo

Citas y homenajes. "Seguro que han reconocido", asegura nuestro crítico,  "la cita de La traviata, de Verdi, al inicio de la cuadrilla Nuevas melodías que ya sonó, en 1998, con Zubin Mehta sobre el podio. Johann Strauss hijo confeccionó, en 1861, este homenaje a la Ópera Imperial vienesa con este popurrí de temas de Verdi en forma de suite que incluye citas de Ernani, Rigoletto, Il trovatore y La traviata.  Y Muti se lo ha pasado de maravilla viendo cómo los vieneses son capaces de llevar a su terreno hasta la música de su querido Verdi".  

Juan Carlos Galindo

Versión exquisita, a ojos de nuestro crítico: "Ha seguido la música de Johann Strauss hijo: la polca francesa En los bosques de Krapfen. La escribió, en 1869, para los conciertos en Pavlovsk (se llamó en origen En los bosques de Pavlovsk). Y después adaptó su título a un escenario vienés. Destaca por ese soplo de escapismo campestre tal del gusto vienés. Donde retrata el canto del cuco y el gorjeo de los pájaros. Strauss hijo escribe incluso una una cadencia al final para los pajaritos de agua. La versión de Kleiber, de 1989, vuelve a ser inalcanzable en esta pieza. Pero Muti y los filarmónicos vieneses han ofrecido un versión exquisita y paladeada". 

Juan Carlos Galindo

Así lo está viendo Pablo L. Rodríguez: "Segunda escena de ballet, ahora ubicada en el Palacio Liechtenstein, donde José Carlos Martínez y Christian Lacroix, han encontrado encanto, elegancia y variedad en una propuesta de ballet más tradicional, pero no menos interesante. Voces de primavera fue, en origen, un vals vocal para soprano de coloratura, que Johann Strauss hijo estrenó, en 1883, aunque pocas veces se hace en su versión vocal que se hizo popular en Viena y se incluyó hasta dentro de las representaciones de El barbero de Sevilla de Rossini. La única vez que se ha hecho cantando en el Concierto de Año Nuevo fue, en 1987, con Herbert von Karajan y Kathleen Battle. Pero en su versión instrumental tiene una gran solera en el Concierto de Año Nuevo, desde 1943 con Clemens Krauss. Destaca, por encima de todas la interpretaciones escuchadas un primero de enero, la de Carlos Kleiber, de 1989. Muti ha tratado de seguir la estela de amigo Kleiber con una gran interpretación, exquisita y muy refinada, de la obra".  

Juan Carlos Galindo

Se interpreta ahora Voces de primavera, op. 410 de Johann Strauss hijo. Valls acompañado de ballet con imágenes grabadas. 

Juan Carlos Galindo

Un clásico de todas las ediciones. "El Galope veneciano, Johann Strauss padre, es la pieza más antigua del Concierto de Año Nuevo, estrenada en el Augarten, en 1834, donde trata de retratar el ambiente de la Plaza de San Marcos en Venecia con una extrañas castañuelas. Muti ha seguido elevando, en lo posible, esta música menor", comenta Pablo L. Rodríguez.

Juan Carlos Galindo
¿Qué es lo que se ha visto ahora? "Primera escena de ballet con otra novedad en el programa del Concierto de Año Nuevo: la polca francesa Margarita dedicada a Margarita Teresa de Saboya consorte del rey Humberto I de Italia, la primera reina de Italia tras la unificación. Josef Strauss la escribió para su enlace, el 22 de abril de 1868, pero no se tocó en aquella ocasión y se estrenó en Viena al margen de ese evento. El coreógrafo español José Carlos Martínez repite por vez primera en la historia de las retransmisiones del Concierto de Año Nuevo. Y ha tratado de no repetirse. Se ha ubicado el ballet en distintas estancias de la Casa Loos, un edificio construido en 1909 que inicialmente era una fábrica de moda y hoy es la sede del Banco Central Raiffeisen. Martínez ha sumado el delicado y elegante de Christian Lacroix para crear una pequeña dramaturgia con un bailarín y tres bailarinas ambientada en los años treinta del siglo XX con un aire de cine mudo", analiza Pablo L. Rodríguez.
Juan Carlos Galindo

"Otra novedad este año ha sido la música de Karl Komzák y su obra más conocida: el vals  Las chicas de Baden . El compositor forma parte de una dinastía de músicos militares checo y la obra fue compuesta, en 1898, mientras dirigía la orquesta del balneario de Baden, que Kasten nos ha mostrado en su realización. Que la Filarmónica de Viena no hubiera tocado nunca esta obra en el Concierto de Año Nuevo no quiere decir que no la haya grabado. Aparte de Willi Boskovsky, la grabación inolvidable esta pieza la realizó Hans Knappertsbusch para Decca, en 1857. Muti ha comprendido a la perfección el tono socarrón y bombástico de la obra, con esos arranques retenidos, y los ha equilibrado con episodios opuestos donde la orquesta vienesa ha lucido toda su elegancia. Una magnífica interpretación, pero una obra menor", nos comenta Pablo L. Rodríguez

Juan Carlos Galindo
Análisis del inicio de esta segunda mitad, por Pablo L. Rodríguez: "La segunda parte se ha iniciado con una mensaje de paz y optimismo del actual presidente de la Filarmónica de Viena, Daniel Froschauer. Se ha abierto con la obertura de Poeta y campesino, de 1846. Aquí resulta mucho más evidente el estilo de Suppè que conjuga lo vienés con lo italiano, tan del gusto de Muti, con especial influencia de Rossini y Donizetti. Una introducción con un coral en el metal, con un bello solo para violonchelo acompañado por el arpa (excelentes tanto la arpista Charlotte Balzereit como el violonchelista Tamás Varga) y un dramático trino de la cuerda que traslada la música al ambiente de las óperas de Donizetti. Pero siguen varios contrastes con episodios de vals vienés que se conjugan con otros pasajes de aire italiano que incluyen ejemplos del famoso crescendo de Rossini, como escuchamos en el galope que cierra la obertura. El director italiano ha vuelto a recrearse en cada episodio, aunque la orquesta vienesa ha brillado más en las partes más refinadas de la obra.
Juan Carlos Galindo
Para empezar la segunda parte, suena la Obertura de Poeta y campesino, de  Franz von Suppé.
Juan Carlos Galindo

Tras el descanso, llegarán la segunda parte y las propinas. ¿De dónde vienen? ¿Cuántas son? Nos lo cuenta Pablo L. Rodríguez: "Es bien sabido que en el Concierto de Año Nuevo el programa previsto no concluye el concierto. Siempre hay tres propinas, es decir, composiciones que se añaden al final y fuera de programa. En el Concierto de Año Nuevo tienen un carácter especial pues están previamente establecidas desde 1958. Aquel año Willi Boskovsky determinó que se incluyera una polca rápida que varía año tras año (en 2021 será Polca furiosa (casi galope) de Johann Strauss hijo), seguida por el vals En el bello Danubio azul y la Marcha Radetzky para terminar". Más claves, en esta guía http://cort.as/-WblG

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Pablo L. Rodríguez
Zamorano residente en Zaragoza, es doctor en Historia del Arte y Musicología. Colabora en EL PAÍS como crítico de música clásica desde 2013. Tuvo un pasado como violinista, pero finalmente se decantó por la teoría. Desde 1999, es profesor del Máster en Musicología de la Universidad de La Rioja, donde también coordina el Doctorado en Humanidades.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_