El presidente de RTVE admite ante el Congreso el fiasco de ‘La familia de la tele’: “Asumo la responsabilidad profesional de haberlo intentado y que no haya funcionado”

Hace menos de un mes, en la sala Herrero y Rodríguez de Miñón del Congreso de los Diputados y ante la Comisión de control parlamentario sobre RTVE, el presidente de la corporación de medios públicos españoles, José Pablo López, defendió al programa La familia de la tele pese a la mala respuesta del público y la proliferación de críticas cosechadas por su contenido. “Prefiero equivocarme a no intentarlo”, afirmó. También aseguró que no albergaba entonces “el convencimiento profesional” de que el espacio fuera incapaz de “remontar la audiencia”, pero dejaba una puerta abierta: “A lo mejor tengo ese convencimiento dentro de un mes”. No ha llegado a tanto. Su gran apuesta para las tardes del primer canal de Televisión Española desapareció definitivamente de la parrilla la semana pasada tras despeñarse en audiencias y varios cambios de formato que no lograron cambiar de rumbo. Y durante la comparecencia de este jueves ante la misma Comisión de control celebrada en la misma sala del Congreso, López ha admitido el fiasco: “Asumo la responsabilidad profesional de haberlo intentado y que no haya funcionado”.

En su anterior comparecencia de finales de mayo, el presidente de RTVE logró poner de acuerdo a partidos políticos tan alejados como Sumar y Vox en la crítica hacia el controvertido programa cancelado. “No cumple una función de servicio público”, coincidieron en afirmar sendos portavoces de ambas formaciones. En la sesión de este jueves, el mismo representante de Sumar, Francisco Sierra, ha reprochado que “el modelo de referencias a la programación siga siendo Telecinco, una política que resulta contraproducente”. Y la misma portavoz de Vox, Carina Mejías, ha preferido en esta ocasión arremeter contra los servicios informativos de la corporación al afirmar que su trabajo no se ajusta “a los principios de objetividad, veracidad y credibilidad”. Mientras que el socialista Vicent Sarrià ha indicado que aquella apuesta por La familia de la tele “era arriesgada” —a lo que López respondió con su particular asunción de responsabilidad: “cuando no acertamos tomamos las medidas adecuadas y tratamos de hacer los cambios de la manera más rápida”—, ha sido el PP quien más ha incidido en sus ataques al espacio fracasado y al presidente de la corporación.

“Hace un mes sacaba pecho del programa y ahora lo cancela, ha vuelto loca a la audiencia”, ha afirmado la diputada popular Soledad Cruz-Guzmán antes de recordar a López que “asumir responsabilidad significa dimisiones, consecuencias, actos”. La diputada del PP ha citado las advertencias al respecto realizadas desde esta misma Comisión de control parlamentario, así como los pronunciamientos realizados por diversos sindicatos y extrabajadores de la corporación. Su compañera de filas Carmen Riolobos Regadera ha ido más allá en la asunción de responsabilidad del presidente de RTVE por “este auténtico engendro de telebasura, chabacano, contrario a los principios de servicio público”, y le ha preguntado si va a “asumir de su bolsillo los seis millones que nos ha costado a los españoles”.

El compareciente ha reprochado la cifra esgrimida por la diputada Riolobos Regadera sobre el coste del programa, presupuestado en 5,3 millones de euros para los 65 capítulos de la primera temporada que no han llegado a emitirse en su totalidad. “Cuando tenga la liquidación de lo que ha costado la voy a traer y le voy a pedir que rectifique la cifra que ha dado porque no es cierta”, ha respondido López después de citar otros fracasos en la programación anteriores a su etapa como directivo de la corporación. El actual presidente asegura que “la tele es algo muy complicado” y no está dispuesto a “echar la culpa del fracaso al medidor de audiencia como se hizo en los años 2015, 2016 y 2017 [cuando gobernaba el PP]”. Para López, su modus operandi en términos de programación es el siguiente: “A lo que funciona, p’alante. Y lo que no funciona, se elimina”.

Para Riolobos Regadera no ha sido suficiente. La diputada popular ha afirmado que “los españoles estamos hartos de pagar la prostitución, las comisiones ilegales, la amnistía y los puestos de trabajo de la esposa del presidente y su hermano, mientras que despilfarrar el dinero público en Televisión Española también es una forma de corrupción”. López ha respondido que su único objetivo es “dejar la tele pública mejor que la recibió”. Y ha contratacado con el 14,5% de cuota de pantalla con el que el primer canal terminó 2011, cuando el PP regresó al Gobierno. “Cuando lo abandonaron en 2018, TVE estaba en el 10,5% de audiencia”. El compareciente también defendió a otras apuestas en la programación de abril y mayo que corrieron mejor suerte que La familia de la tele. “De las cuatro puestas en marcha no ha funcionado una, pero las otras sí: Futuro imperfecto de Buenafuente, Mañaneros 360 y Malas lenguas”.

Sobre los dos últimos espacios mencionados y otros que abordan la actualidad política, la diputada del PP Macarena Montesinos ha asegurado que RTVE contrata como colaboradores “a telepredicadores del Sanchismo”. Durante su intervención, Montesinos ha catalogado a la copresentadora de La hora de la 1, Silvia Intxaurrondo, como “ministra número 23 del Gobierno de España”. Ha sido después de la intervención de su compañera de partido Miriam Bravo, quien en referencia a la misma periodista ha preguntado al compareciente si va a renovar en septiembre “a la vocera de Sánchez”. El presidente de la corporación ha pedido a la senadora Bravo retirar esa expresión, “que atenta contra el honor de cualquier profesional de RTVE”. Y ha añadido a toda la bancada del PP: “Ustedes tienen un problema con la señora Intxaurrondo. Como lo tuvieron con el señor [David] Broncano y lo tuvieron con el señor [Xabier] Fortes. Antes de la renovación del consejo de administración pusieron sobre la mesa que para llegar a un acuerdo esos tres profesionales tenían que salir de RTVE”.