El final que dividió a los fans: así termina ‘El verano en que me enamoré’

Son las nueve de la mañana y Lucía, de 32 años, se levanta precipitadamente para, antes de ir a trabajar, ver el recién lanzado capítulo final de la serie que la ha tenido en vilo los últimos dos meses: El verano en que me enamoré, la ficción de Prime Video basada en la trilogía de Jenny Han y que tuvo su primera temporada en 2022, ha llegado a su fin. El viaje emocional de sus protagonistas, Belly y los hermanos Fisher (Conrad y Jeremiah), ha captado la atención de millones de fans, que ya conocían su historia gracias a los libros, pero también ha atraído a nuevos seguidores que se han enganchado al triángulo amoroso más popular de internet. Pero, ¿es el desenlace justo para los personajes? ¿Se respeta el espíritu de las novelas? ¿Qué opinan los fans?

Solo una hora y media después del estreno del último capítulo, el hashtag #TheSummerITurnedPretty (el título original de la serie) acumulaba en la red social X más de 46.000 publicaciones y en TikTok, algún vídeo sobre la serie ya superaba las 300.000 visualizaciones. Esto es signo de la locura general de los espectadores por compartir su opinión a la esperada conclusión de la trama principal, convirtiendo así a El verano en el que me enamoré en uno de los principales focos de conversación online alrededor del mundo.

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El secreto del éxito de 'El verano que me enamoré'

La tercera temporada prometía dar un cierre definitivo al triángulo amoroso que ha dividido a la audiencia entre el Team Conrad y el Team Jeremiah. El público ha seguido la evolución de los protagonistas desde la adolescencia hasta la madurez, unos años marcados por sus complejas relaciones, que también han atormentado la trama del resto de personajes. El conflicto estaba servido: ¿seguirá Belly su historia con Jeremiah, con quien parecía haber encontrado estabilidad, o volverá a cruzar caminos con Conrad, su primer amor y el claro favorito de los espectadores?. “Yo espero que terminen juntos. Es lo más lógico. ¡Ha pagado 500 dólares por ir a París a verla cuando él donde tenía que ir era a Bruselas!”, dice alarmada Lucía refiriéndose a Conrad y Belly antes de ver el último episodio.

Emma, de 25 años, prefiere esperar a la noche para ver el capítulo final. “Después de trabajar iré a la carnicería porque voy a preparar una cena elegante para la ocasión”, confiesa. Y da más detalles: “Me llegó un proyector hace un par de días y así puedo ver la serie en pantalla grande”. Emma admite que empezó a ver la serie hace solo tres semanas pero que ahora es “la mayor fan”. Al igual que Lucía, tiene claro el que para ella es el final ideal de la temporada. “Espero que Conrad y Belly no se queden juntos, no sé cómo lo harían, han pasado cuatro años desde que lo dejaron y en medio, ella ha estado con su hermano… ¡con el que casi se casa!“, cuenta Emma desesperada a través de un audio de WhatsApp.

Atención, ‘spoilers’: ¿Con quién se queda Belly?

Lo cierto es que Emma se llevará una decepción cuando vea el episodio: Belly elige a Conrad. “¡No podía ser de otra forma!”, clama Lucía al ver la escena final. Esta seguidora de la serie recibe al instante un mensaje de una compañera de trabajo que también está viendo el capítulo a primera hora de la mañana que dice: “No entiendo lo que pasa con Jeremiah, no tiene sentido que acabe con otra chica random, y espero que él y Belly puedan ser amigos sinceros después de todo”.

A medida que pasan las horas, las redes sociales se van llenando de reacciones enfrentadas: para muchos del Team Jeremiah, el resultado fue satisfactorio y justo, pero para buena parte del Team Conrad, numeroso y muy intenso a la par que sentimental, el final dejó un sabor amargo. Consideran que su personaje no recibió el desarrollo ni la redención que deseaban. “Yo espero que se quede solo o con alguien que de verdad le valore”, sugiere Emma.

Las reacciones ante el final de El verano en que me enamoré no han sido unánimes ni mucho menos. Mientras algunos seguidores celebran el cierre como un desenlace coherente y fiel a los libros (aunque Jenny Han intentara despistar asegurando que la historia no tendría por qué acabar como la trilogía) otros lo ven como una oportunidad perdida, apresurada y carente de la profundidad emocional que la historia merecía. Incluso ha fallado a las pocas Team Belly, que querían de ella que fuera una joven independiente que después de cortarse la melena decide seguir su camino sola y en París, alejada de la playa de Cousins, el lugar que la vio crecer junto los chicos de su vida Conrad y Jeremiah Fisher.

Termina así el verano que sobrecogió a una generación, o a varias, que encontró en los tres protagonistas el eco de los romances que marcan, de las decisiones difíciles, de las despedidas y los reencuentros definitivos. Aunque el desenlace no ha convencido a todos, el debate seguirá vivo en redes durante mucho tiempo, lo cierto es que esta serie se despide habiendo dejado una huella profunda en sus espectadores. El verano en que me enamoré ha acabado. O quizás no. Porque igual que los amores, hay finales, que siempre encuentran la forma de volver.