La muerte clandestina
Un número creciente de enfermos terminales quiere decidir cuándo poner fin a su vida. La clandestinidad de la eutanasia añade culpa y soledad al dolor de la muerte
Un número creciente de enfermos terminales quiere decidir cuándo poner fin a su vida. La clandestinidad de la eutanasia añade culpa y soledad al dolor de la muerte
Dos de cada tres personas preferirían afrontar en su domicilio el final de la vida, según algunos estudios
Los populares lo creen innecesario, y el PSOE les acusa de negar derechos al paciente