El plan de inversiones emergente de Sheinbaum se agrieta ante la ruptura interna de la élite empresarial

La desaceleración económica de México y la guerra arancelaria de Estados Unidos han forzado un reacomodo en la relación entre el Gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum y el empresariado mexicano. Frente a la caída de la inversión y del consumo, la mandataria ha lanzado un plan emergente para reactivar un puñado de proyectos públicos de la mano de las grandes fortunas. En aras de reflotar la actividad económica, Sheinbaum ha priorizado en las últimas semanas los encuentros uno a uno con los dueños de conglomerados, banqueros y presidentes de organismos cúpula. El ambicioso plan diseñado desde Palacio Nacional aterriza en medio de una ruptura entre el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), una de las principales patronales del país, y la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco) por los supuestos vínculos del primer organismo con Raúl Rocha Cantú, propietario de Miss Universo, ahora bajo investigación por una trama de crimen organizado.

El quiebre entre la Concanaco y el CCE se remonta al año pasado, cuando fue reelegido el empresario Francisco Cervantes como presidente del CCE. “Veíamos que se estaba convirtiendo el CCE en una gestión de empresas, no de sectores. Nosotros no podíamos ser solo el prestanombres de una representación que ya no nos representa”, relata en entrevista el presidente de la Concanaco, Octavio de la Torre. La división entre los dos organismos derivó en una pausa de relaciones impulsada por la Concanaco con el CCE desde abril. El plan original era que el organismo disidente regresaría a las filas una vez que cambiara la presidencia del CCE, una fecha que se cumple este miércoles. Sin embargo, esta idea se truncó tras el escándalo de Rocha Cantú y su relación con Cervantes.

La investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) contra Rocha Cantú, a la que este medio tuvo acceso, acusa al empresario de pertenecer a un grupo del crimen organizado dedicado al tráfico de armas, contrabando de combustible, lavado de dinero y despojo de viviendas. Según el expediente, Rocha Cantú fungía como una especie de socio capitalista en la trama criminal, a la que presuntamente financió con al menos cinco millones de pesos. Además de eso, era el encargado, supuestamente, de las conexiones con empresarios gasolineros para distribuir el huachicol, que era contrabandeado principalmente desde Guatemala y Estados Unidos.

Rocha, que negoció un salvoconducto con la Fiscalía para convertirse en testigo colaborador, tenía una fuerte vinculación con la cúpula del CCE. Fuentes de la organización empresarial refieren la cercanía entre Rocha Cantú y el presidente saliente del CCE. Cervantes, de manera unilateral y sin consultar a los organismos asociados, nombró a Rocha asesor de su presidencia en junio de 2022 y lo impulsó para que, dos años después, se convirtiese en miembro del consejo directivo del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior (Comce), que forma parte del CCE. Las fuentes consultadas refieren que Rocha actuaba como publirrelacionista de Cervantes y que este último, junto a otros dirigentes empresariales, utilizaba el avión privado del dueño de Miss Universo para sus traslados. Este periódico intentó obtener un comentario de Cervantes sobre estos señalamientos; sin embargo, un portavoz del CCE señaló que habrá un posicionamiento oficial próximamente, pero no dio más detalles.

La Concanaco envió al CCE, a principios de diciembre, una carta en la que denunciaba la existencia de fotografías y videos en los que aparecía Rocha Cantú “en actos y viajes junto a integrantes de alto nivel del CCE”. La Concanaco sostuvo que esas imágenes eran “indicios públicos de cercanía”, de “cuyo alcance institucional” el CCE debía dar una explicación. En la carta se exigía aclarar los vínculos de Rocha Cantú con “personas, órganos y comités” del organismo empresarial y el acceso que se le dio a foros, viajes y espacios de representación. José Medina Mora, quien será el nuevo titular del CCE a partir de esta semana, se comprometió con De la Torre a indagar los vínculos de Rocha, de quien dijo que era, “al parecer, un asesor personal”, según una conversación por WhatsApp a la que ha tenido acceso este diario. Aunque Medina Mora no dijo a quién asesoraba el dueño de Miss Universo, todo apunta a Cervantes.

La Concanaco asegura que las relaciones con el CCE no se reanudarán hasta que se aclare la vinculación con Rocha Cantú y, en caso de comprobarse, se subsanen los fallos que la posibilitaron. El empresario aboga por que se establezca en el CCE un código de integridad con sanciones y un registro público de invitados, asesores, patrocinios y aportaciones económicas, así como protocolos de conflictos de interés. “Si no se aclara, nosotros no vamos a regresar por el riesgo que tenemos todos. Para nosotros, como organización de empresarios, estar vinculados con una organización [el CCE] que no tiene controles, nos afecta”, zanja,

La ruptura de la Concanaco y el CCE ocurre en medio de un cambio en las relaciones entre el empresariado y el Gobierno de Sheinbaum, que contrasta con el sexenio de Andrés Manuel López Obrador. De las acusaciones por contratos “leoninos” lanzadas por el exmandatario a la reapertura de contratos mixtos, la presidenta de México ha estrechado su contacto uno a uno con los grandes capitales del país. A finales de noviembre, la mandataria se reunió a puerta cerrada con el hombre más rico del país, Carlos Slim. Durante el encuentro, de algo más de dos horas, en el que también estuvo Cervantes, el magnate mexicano y dueño de América Móvil hizo un diagnóstico detallado de los frenos a la inversión en el país. En esta misma línea, Sheinbaum conversó en Palacio Nacional con los directivos de HSBC, así como con los integrantes del Consejo Mexicano de Negocios, el organismo que reúne a las compañías más grandes del país.

En este reacomodo de estrategia, el peso de Altagracia Gómez, a la que Sheinbaum directamente designó como cabeza de su Consejo Asesor de Desarrollo Económico, Regional y Relocalización, ha venido a la baja ante la falta de resultados. Además, la presidenta del gigante harinero Minsa ha estado bajo la lupa recientemente por los contratos que su empresa ha recibido durante esta Administración y la pasada, lo que ha abierto la discusión en torno a un posible conflicto de interés. Fuentes del sector empresarial indican que Sheinbaum ha cambiado su hoja de ruta y ha optado por tener una relación directa con los grandes capitales y los dirigentes de las cúpulas empresariales.

El plan emergente de inversiones, con el espaldarazo de los principales capitales de México, manda un mensaje claro sobre la urgencia de reabrir la llave de la inversión para dinamizar la actividad económica. Además de Slim, la iniciativa contó con el respaldo del presidente de Grupo Televisa, Bernardo Gómez; el presidente de Grupo Bal, Alejandro Baillères Gual; el presidente de Grupo FEMSA, José Antonio Fernández Garza, entre otros. En plena desaceleración económica, con la incertidumbre arancelaria y el futuro incierto del TMEC, la mandataria mexicana ha dado el banderazo de salida a un nuevo Consejo para la Promoción de Inversiones y de este nuevo plan de proyectos a desarrollar entre el Gobierno y la iniciativa privada. El reto no es menor. En septiembre, la inversión fija bruta del país cayó un 6,7% a tasa anual, su peor retroceso en los últimos cinco años. Las alertas sobre la economía están encendidas y la relación entre el Gobierno y los hombres de negocios será clave para reflotar a la economía mexicana.