Los lazos de Julio César Chávez Jr. con la familia del Chapo: “Ovidio es el tío de mi hija. Es una buena persona”

Las raíces de la familia Chávez en Los Ángeles son profundas. Pese a que es originaria de Sonora, en el norte de México, Julio César Chávez Junior, de 39 años, vive a temporadas en Estados Unidos, en concreto en la ciudad de Los Ángeles. De hecho, tiene una casa al norte de la misma, en la localidad de Studio City, donde ha sido detenido este jueves, al otro lado de las famosas colinas donde está colocado el cartel con las letras blancas de Hollywood. En esta ciudad es donde conoció hace más de una década a su exesposa, Frida Muñoz Román, viuda de un hijo de Joaquín El Chapo Guzmán. A partir de ahí comienza una relación con la familia del capo que Chávez nunca ha ocultado.

El campeón de peso medio de boxeo hace casi 15 años, también llamado El Hijo de la Leyenda, por los logros de su padre, historia viva del boxeo al sur del río Bravo, trabaja en la ciudad con frecuencia. De hecho, hace unos días se enfrentó con el también boxeador Jake Paul en Anaheim, al sudoeste de Los Ángeles. Poco después llegaba el arresto por un problema con su visado. Además, tras la detención, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) informaba que Chávez será deportado a México, donde tiene una orden de arresto en su contra por tráfico de armas y vínculos con el Cartel de Sinaloa. Los indicios de la acusación son precisamente su relación con la familia del Chapo.

Chávez se casó en el año 2018 con Muñoz, en el que es el segundo matrimonio para ella. Antes, Muñoz, de 37 años y que es licenciada en Administración por una universidad de Culiacán, fue esposa de Edgar Guzmán, hijo del capo. Ambos tuvieron una hija, una niña llamada Frida Sofía Guzmán Muñoz, nacida en 2006, y que solo conoció a su padre durante dos años, ya que este fue asesinado en 2008. Fue entonces cuando ella se mudó a Los Ángeles y conoció a Chávez, Jr. Allí vivieron juntos y más tarde se casaron. El boxeador crió a su hijastra desde muy pequeña y siempre la ha considerado una hija más. Además, la pareja tuvo dos hijos, Julia y Julio, en este caso, Julio César Chávez III. El año pasado, decidieron divorciarse.

Su relación, que han mostrado con frecuencia a través de las redes sociales, siempre ha sido agitada, con muchas subidas y bajadas. De hecho, un año antes, en 2023, estuvieron a punto de separarse. Las peleas y acusaciones de malos tratos han sido constantes; él afirmó en una ocasión que ella le empujó cuando estaba borracho. Sin embargo, hace apenas tres días la propia Muñoz colgó una fotografía en su perfil de Instagram, con más de 84.000 seguidores, donde aparecía con Chávez Jr., celebrando su victoria en Anaheim. “En la vida y en el ring, la verdadera victoria es tener una familia que te ama y cree en ti”, escribía, junto al icono de un corazón.

Frida Muñoz es ciudadana estadounidense. De hecho, en su comunicado de este jueves por la detención de Chávez, el Departamento de Seguridad Nacional ha destacado la conexión de ambos con el Cartel de Sinaloa. “El 2 de abril de 2024, Chávez presentó una solicitud para el estatus de Residente Permanente Legal. La solicitud de Chávez se basó en su matrimonio con una ciudadana estadounidense, que está conectada con el Cartel de Sinaloa a través de una relación previa con el hijo ahora fallecido del infame líder del cartel, Joaquín El Chapo Guzmán”, señala.

Pese a que Frida Muñoz ha asegurado que lleva años desvinculada de la familia de su primer marido, entre 2015 y 2018, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) mexicana, decidió investigar y congelar sus cuentas y las de su hija.

Chávez Jr. nunca ha escondido su relación con Los Chapitos, y en concreto con Ovidio Guzmán, El Ratón. “Me llevo bien con todos”, dijo en una retransmisión por internet en 2022. Sobre El Ratón, afirmó: “Es el tío de mi hija, que ha sido mi hija desde hace mucho tiempo. Lo conozco bien y es una buena persona”. Pero siempre trató de insistir en que no se le vinculara con ningún grupo criminal, del que su mujer estaba ya alejada y cuyo único vínculo era la pequeña Frida.

Aunque Frida Sofía tiene ya 19 años, mantiene una buena relación con su padrastro, que la ha criado durante su infancia en Los Ángeles. La joven está tratando de hacerse una carrera en el mundo de la música, en concreto en el regional mexicano.