Agustín Coppel: “Las empresas son parte vital de la solución de los retos que tiene México”

En un contexto de incertidumbre económica global, la inversión de más de 80.000 millones de pesos (más de 4.000 millones de dólares) en cinco años anunciada por el Grupo Coppel es uno de los síntomas más claros de la buena salud financiera de la compañía. La apertura de 100 nuevas tiendas este año y la creación de 4.500 kioskos digitales, con los que Coppel busca duplicar las ventas digitales al 20% del total es una parte. De las palabras de Agustín Coppel Luken (Culiacán, 63 años), presidente del Consejo de Grupo Coppel, se desprende que la expansión física y la transformación tecnológica han de ir de la mano, siendo la segunda una necesidad imperiosa, no solo de cara al cliente, sino también al interior de la empresa; un proceso de modernización necesario para no quedarse atrás ante el avance de las grandes firmas de venta en línea.

Durante cerca de una hora de entrevista, el pasado miércoles en las oficinas de Coppel en Ciudad de México, Coppel Luken reflexiona con un característico hablar pausado, sin esquivar un tema, sobre el futuro de la compañía, el impacto de las medidas y amenazas del Gobierno de Estados Unidos sobre la economía y de la relación con el actual Ejecutivo mexicano de Claudia Sheinbaum, sobre quien tiene más que buenas palabras y de quien confía contribuya al crecimiento del país, a lo que, en más de una ocasión, insiste en que quiere contribuir. “Las empresas son parte vital de la solución de los retos que tiene México”, sostiene.

Pregunta. ¿Por qué apostar por una inversión tan grande en un contexto de desaceleración e incertidumbre global?

Respuesta. La globalización la tenemos en el pueblo. Ya llegaron Amazon, Mercado Libre, Walmart, Costco. Hasta Ikea llegó a México. Ya tenemos todo a domicilio sin salir del pueblito. Un porcentaje de las ventas son en línea y sea chiquito o grande, lo tenemos que tener perfectamente bien. Es un requisito de competencia tener un e-commerce bien montado, que funcione, tenemos que ganar ese pedazo mercado, ese nuevo centro comercial que se llama e-commerce.

P. ¿Cuál es su visión de cómo se debe vender en línea?

R. Hay que proporcionar una buena experiencia al cliente. Si tú entras en una tienda a comprar una bicicleta, si no te marcan rápido dónde está te vas a acabar perdiendo. Tienes que tener una manera de dirigirte y que estén todas las bicicletas para los distintos tipos de cliente. Después, estudiamos los resultados de un sistema de medida que se llama Net Promoter Score, que es el más usado y que te pregunta cómo ha sido tu experiencia. Por eso estamos cambiando toda la tecnología y trataremos de dar pronto una mejor salida, con un sitio renovado a final de este año.

P. ¿Cuál diría que es la clave del crecimiento sostenido que ha tenido Coppel?

R. Analizar bien dónde estás ganando y perdiendo es muy importante, tener una fórmula comercial de vender algo que sí sea rentable, porque si le echamos muchas ganas a algo donde no hay margen no vamos a tener dinero ni para crecer, ni para invertir en tecnología ni para nada. Luego, la marca se va construyendo con lo que vendemos. Uno de nuestros consejeros, Eduardo Padilla, siempre nos dice que los clientes son los que dan permiso a las marcas de vender cosas. A Walmart, por ejemplo, no le vas a dar permiso de que te venda una bolsa de 2.000 dólares. Nosotros, por la historia que tenemos, porque las tiendas son más departamentales, sí tenemos la aceptación de la clientela de poder ofrecerle una afore, un banco, crédito y otro tipo de servicios financieros. Eso se ha sido construyendo en la medida en que la clientela ha aceptado la marca.

P. El presidente de Estados Unidos ha amenazado con poner impuestos a las remesas. ¿Cómo afectaría ello a Coppel? ¿Están ya adoptando algún tipo de medida por si se concreta?

R. La afectación no es a Coppel. La afectación es para los mexicanos y para los que están trabajando en Estados Unidos, que están recibiendo un sueldo y se les está afectando la libertad de hacer con su dinero lo que ellos quieran. ¿Por qué si envías dinero a Suiza no te cobran lo mismo? ¿Porque nosotros somos pobres y mexicanos? Es discriminatorio e injusto. Ellos saben mejor que nadie que las remesas son de 1.000 dólares. Están pulverizando una cantidad de dinero que le llega a toda esta gente, que no están con la desesperación de estar yendo, porque ya ha ido un miembro de la familia que tiene el derecho de enviar su dinero donde lo tenga que enviar. No se debería estar metiendo el Gobierno en eso. Lo está usando como una palanca de negociación muy injusta, muy abusiva.

P. ¿Cómo está viviendo la incertidumbre económica que ha generado la llegada de Trump a la Casa Blanca?

R. Los países europeos y Canadá, que siempre han tenido una alianza con Estados Unidos en temas de democracia, de división de poderes, de libertades, del sistema financiero, se sienten como traicionados por la posición del presidente de querer imponerles aranceles sin una previa negociación. Acá en México estamos más acostumbrados al maltrato, a que nos ataquen. La presidenta ha tratado de sacar el tema con dignidad, que es muy difícil. Lo ha hecho muy bien. Lo más importante es que hay un interés, mucho más del lado mexicano que del americano, de arreglar las cosas, de seguir con el tratado [el T-MEC], de ser un buen socio.

P. En este contexto de desaceleración, de recesión económica, ¿hasta qué punto le preocupa que baje el consumo?

R. Es muy difícil salir de la desaceleración o el estancamiento que tenemos y volver a generar crecimiento, se tienen que dar muchas variables positivas. No llegas a una situación como en la que estás no más porque Trump dijo algo. Si tú tienes una calentura, puedes hacer muchas cosas, pero si no te das cuenta de que tienes una infección en los pulmones… ¿Cuál es nuestra infección en los pulmones? Tenemos que darnos cuenta qué no está funcionando bien, es un análisis que debemos hacer para no meternos en un diálogo de que el crecimiento no es importante, que hay otras cosas más importantes en la vida. No, el crecimiento es muy importante porque es parte de la futura prosperidad de cada uno de los mexicanos. Tenemos que entender por qué estamos tan estancados en México. Otro problema fuerte que tenemos es que por alguna razón está muy alta todavía la tasa de interés que define el Banco de México. El gap es exagerado. En un estancamiento en donde los precios tienden a bajar, debería empezar a bajar la tasa de interés y sería una palanca importantísima. Creo que va a ser otro motor de crecimiento.

P. ¿Qué opinión tiene del Plan México que impulsa el Gobierno?

R. El Plan México es otra de las formas para salir del estancamiento. La planeación en México, no solo con el gobierno anterior, ha sido muy mala, muy superficial. Entra un gobierno y critica al anterior, se empieza y termina el mundo en seis años. Ahora no hay descalificación del anterior, pero tampoco hubo planeación. Ella [la presidenta, Claudia Sheinbaum] está empezando un plan de desarrollo, de especialización, de apoyar. Apoyar y fomentar el desarrollo en las regiones que corresponden es el papel correcto de un gobierno. Es muy buena idea el Tren Transístmico, urge planeación en energía, en Pemex… Ella va a tener interés en que suceda y nosotros lo vemos de muy buena manera. Las empresas son parte vital de la solución de los retos que tiene México para el desarrollo y para mejorar el nivel de educación y de vida de todos, principalmente de los que hoy menos tienen.

P. ¿Siente que el Gobierno está propiciando la inversión?

R. Sí. Y la planeación es vital para propiciar la inversión. El nivel de planeación que tiene el Plan México es todavía limitado, podría ser mucho más grande. Tampoco hay una experiencia en México de planeación, somos muy orgullosos los mexicanos de que sabemos todo y no es cierto. Hay que consultar a firmas que han hecho planeación en países con mucho éxito, ver cómo lo hicieron, aprender.

P. ¿Cómo ve la relación entre el sector privado y el Gobierno?

R. Yo creo que hay muy buen diálogo. La presidenta escucha, atiende, contesta lo que le preguntas, argumenta, toma nota. Cuando me ha tocado estar con ella no tiene más que buenas ideas. Está más abierta al diálogo. También hay buena relación con Marcelo Ebrard [secretario de Economía], con el secretario de Relaciones Exteriores [Juan Ramón de la Fuente], con el nuevo de Hacienda [Édgar Amador], en Seguridad también, con Omar García. La presidenta tiene buena capacidad de análisis, de razonamiento, una popularidad muy importante y buen mando. Muchos la cuestionan, pero también en esta empresa a mí me cuestionan varios.

P. ¿Cómo les ha afectado la crisis de seguridad en Sinaloa?

R. Ha sido una afectación muy grande, nos han bajado las ventas, los clientes tienen más dificultad para pagar porque hay desempleo. Hay una especie de huelga de la ciudadanía de no querer salir en la noche hasta que no se sientan realmente confiados. Todo el mundo se entera de lo que está pasando y de cualquier afectación a los ciudadanos.

P. Como sinaloense, ¿qué cree que será necesario para volver a integrar a a Sinaloa en la normalidad?

R. Lo más importante es que el esfuerzo que está haciendo el Gobierno federal de apoyar y contener no lo dejen solo unos meses, sino unos años para que se termine de arreglar el tema, para que no exista impunidad. Que la delincuencia sepa que hay una policía, que haya investigación, ministerios públicos preparados, tecnología. Ese tipo de cambios están sucediendo. Es importante que todos entendamos que la capacidad del Ejército, la Marina, la Guardia Nacional, la Policía Local es infinitamente mayor que la de los delincuentes.

P. Usted está involucrado en proyectos educativos y sociales, ¿qué le motiva a hacerlo?

R. Me motiva participar en temas estructurales de México, ayudar a que funcionen mejor cosas que no están funcionando bien, como la educación pública en México. Soy parte de una asociación que se llama Mexicanos Primero, con 18 años tratando de aportar ideas, conocimiento, para mejorar la educación en México. Creo que en este gobierno hay una apertura al diálogo. Ahora, con el problema del poder judicial y que la reforma no tuvo el apoyo de muchísima gente, también tenemos que ayudar a ver qué se puede hacer para que el Poder Judicial sea independiente, sea eficiente y haga justicia. A mí me motiva ayudar a buscar caminos racionales y sustentables a los problemas grandes de México.