Pollo ‘cásate conmigo’: una receta para decir “sí, quiero”
Las pechugas ‘marry me’ han sido un fenómeno culinario viral. Ideales para novatos en la cocina, llevan una salsa cremosa de tomates secos y albahaca más convincente que un anillo de diamantes

Después de probar unos cuantos “panes” sin hidratos que circulan por las redes -dentro de la sección de El Comidistest-, habíamos perdido la fe en las recetas virales (y en la humanidad). Sin embargo, uno de los últimos fenómenos culinarios de TikTok nos ha hecho recuperarla. Se llama marry me chicken, y por efectivo, sencillo y golosón nos ha convencido más que un anillo de compromiso de los caros.
Digievolución facilona del engagement chicken de los ochenta, el pollo cásate conmigo no es mucho más que unas pechugas salteadas con una salsa cremosa. ¿Tiene un aire a comida internacional levemente viejuna? Sí. ¿Está buenísimo? También, porque la untuosidad de la nata está equilibrada por la acidez del tomate, el picante de la guindilla y el frescor de la albahaca. Si quieres ver cómo se hace, mira el vídeo de arriba.
Tiempo: 30 minutos
Dificultad: Nivel TikTok
Ingredientes
Para 4 personas
- 800 g de pechuga de pollo
- 2 dientes de ajo picados
- 1 cucharada de tomate concentrado (o 2 de tomate triturado)
- ½ cucharadita de orégano seco
- 1 cucharadita de cayena molida o de guindilla seca picada
- 250 ml de caldo de pollo bajo en sal
- 150 g de nata para montar
- 40 g de queso parmesano
- 100 g de tomates secos en aceite
- 1 cucharada de mantequilla (opcional)
- Albahaca fresca
- Harina
- Aceite de oliva
- Pimienta negra
- Sal
Instrucciones
Si las pechugas son muy gruesas, cortarlas horizontalmente en dos. Cortar después en dos trozos cada mitad.
Secar la carne con papel de cocina y salpimentar.
Poner a calentar un chorro de aceite en una sartén grande a fuego medio alto. Preparar un plato hondo con harina.
Pasar las pechugas por la harina e ir dorándolas en la sartén. En cuanto las pechugas se doren, sacarlas a un plato.
Bajar el fuego y rehogar el ajo picado en la sartén un par de minutos, removiendo para que no se queme.
Añadir el tomate concentrado, el orégano y la cayena y seguir removiendo hasta que se oscurezca un poco.
Mojar con el caldo y subir el fuego. Cuando hierva, bajarlo y cocinar suave durante 5 minutos, hasta que el líquido se reduzca más o menos a la mitad.
Añadir la nata y cocinar unos minutos a fuego bajo más hasta que espese ligeramente.
Cortar los tomates secos en tiras, reservar unos pocas y sumar el resto a la salsa junto con el parmesano rallado.
Por último, poner el pollo de vuelta en la sartén y cocinar a fuego suave un par de minutos.
Retirar del fuego y servir con las tiras de tomate reservadas y albahaca fresca por encima
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