Los socios de investidura de Illa rechazan una ampliación de El Prat que los empresarios aplauden

La mayoría de la investidura de Salvador Illa, Esquerra Republicana y los Comunes, ha salido en tromba este martes a oponerse al anuncio del president de ampliar el aeropuerto de El Prat y que implicará una inversión de más de 3.000 millones de euros. Ambas formaciones, de cuyo apoyo depende la luz verde a los Presupuestos, han descartado de momento lanzar ultimátums al jefe del Govern y los de Jéssica Albiach apuestan porque sea la Unión Europea la que eventualmente entierre el proyecto de extensión de la pista, por los efectos sobre una zona natural protegida. La CUP también rechaza un proyecto que sí ven con buenos ojos el Partido Popular y Junts per Catalunya, partidos con los que el PSC podría sumar una holgada mayoría en el Parlament.

La secretaria general de Esquerra Republicana, Elisenda Alamany, no ha querido concretar ninguna posible consecuencia para el Ejecutivo de Illa por optar por este modelo de crecimiento del aeropuerto, pero ha advertido de que “se le puede complicar un poco la legislatura”. “El causante de los problemas de El Prat es Aena y Salvador Illa no se ha atrevido a poner la ambición nacional necesaria”, se ha quejado la número dos de los republicanos desde la sede del partido.

“Hoy tenemos un aeropuerto low cost porque Aena lo ha querido. Aena es parte del problema y no de la solución. Lo que toca es más ambición nacional, atreverse a abordar el problema y arrancarle de las manos a Aena la gestión del aeropuerto, que no sea desde un despacho donde se quiere que esto sea subsidiario de Baraja”, ha añadido.

Un poco más beligerantes se han mostrado los Comunes. “La clave de vuelta está en el papel de la Comisión Europea y allí será donde se le dará el golpe fatal al proyecto de ampliación”, ha asegurado el portavoz David Cid, en rueda de prensa en el Parlament, refiriéndose a la autorización ambiental que ha de llegar desde las autoridades europeas.

“Mantendremos la batalla en todos los campos, no renunciaremos a nuestra posición. Mantendremos una confrontación directa y los socialistas saben que intentaremos de cualquier manera que el proyecto fracase”, ha advertido Cid, que sin embargo ha rechazado usar la negociación presupuestaria en ciernes como presión.

Los comunes creen que la ampliación de 500 metros de la pista será descartada por la Comisión Europea porque no se puede tocar un espacio protegido como La Ricarda y el remolar si hay otra opción y el documento presentado por Illa se plantean otros escenarios. Desde el Ministerio de Cultura, liderado por Ernest Urtasun, también se ha alertado de la posibilidad de que la reforma afecte a la recién comprada Casa Gomis. El proyecto incluye además 49 hectáreas de más infraestructura hotelera y comercial y Cid cree que la meta de atraer 20 millones de turistas más tendrá un efecto nocivo en el acceso a la vivienda.

La CUP, que también se opone al proyecto de ampliación, ha pedido tanto a ERC como a Comunes que se muestren su oposición “sin eufemismos” y le ha afeado a Illa que no explicara su plan en el Parlament. “El president dice tranquilamente que no pasa nada y que hará compensaciones por el grave impacto ambiental que tendrá esta tercera pista. A esto le llamamos políticas de negacionismo climático, asimilables a los partidos de extrema derecha”, ha dicho el diputado Dani Cornellà.

El apoyo del PP y de Junts

Sí han mostrado su apoyo, con diferentes intensidades, Junts y el PP. La portavoz del segundo grupo de la Cámara, Mònica Sales, ha evitado criticar la decisión de la ampliación de la pista sobre el espacio protegido y ha centrado sus críticas en dos aspectos: por un lado, lo que considera la falta de diálogo con la oposición y los alcaldes del territorio y la necesidad de avanzar en lograr la gestión desde Barcelona de la infraestructura.

“El Govern tiene que tener la titularidad y la capacidad de gestión de para definir que aeropuerto queremos y necesitamos. Ese debería ser el punto de partida a la hora de plantear el futuro del aeropuerto”, ha dicho Sales en la rueda de prensa de los martes en el Parlament. En la pasada legislatura, Junts maniobró para lograr la ampliación, causando un cisma entre los dos partidos independentistas

El jefe de filas del PP en la Cámara, Alejandro Fernández, ha cargado contra la dependencia del jefe del Govern hacia los socios de la investidura. “La ampliación debe ser ambiciosa y al servicio del liderazgo económico y no de los cambalaches de Illa y sus socios, porque los mismos que hoy boicotean luego serán los primeros en quejarse si Madrid nos pasa por delante”, ha dicho en un mensaje en la red social X.

En el plano local, la alcaldesa de El Prat, Alba Bou, de los comunes, ha denunciado que el proyecto “no está consensuado con el municipio”. Con todo, ha añadido que hasta que el Ayuntamiento no reciba el contenido del acuerdo no podrá hacer una valoración y ha lamentado que llegado a este punto tiene “más preguntas que respuestas”: “Aún no sabemos cuál será la afectación real sobre el municipio, el ecosistema del Delta del Llobregat, y el resto de territorios naturales y agrícolas que tanto ha costado preservar”, ha aseverado.

Bou ha afirmado estar de acuerdo con el president en la necesidad de tener una Cataluña más competitiva y que mire a Europa, pero cree que la propuesta de ampliación de El Prat no da respuesta a esto y ha recordado que su grupo (Comunes) apuesta por una “Cataluña de trenes”.

El alcalde de Barcelona celebra la ampliación

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha celebrado el acuerdo, y ha asegurado que “el proyecto del futuro aeropuerto de El Prat es muy necesario para el futuro de la economía de Barcelona, los barceloneses y Cataluña”. “Nuestra economía crece más que la media española y catalana, la tasa de desempleo es mínima, creamos empleo y la economía está muy internacionalizada: es muy importante para el futuro económico mantener nuestra posición competitiva, tener una ciudad más y mejor conectada con las áreas del mundo que generan más valor, Asia y Estados Unidos”, ha valorado. El alcalde entiende que la ampliación generará “más oportunidades, de que vengan empresas, científicos o profesionales de la creación de todo el mundo, en coherencia con proyectos de la ciudad como la ampliación de la Fira, los parques científicos o el hub audiovisual de las Tres Chimeneas”. Collboni ha finalizado su intervención asegurando: “No queremos que nuestra economía tenga escalas en Madrid ni en Frankfurt”, al tiempo que ha considerado “muy importante garantizar la participación de los 36 municipios metropolitanos en la definición del proyecto”.

Desde la oposición, la presidenta del grupo municipal de los comunes, Janet Sanz, ha rechazado la ampliación. “No la necesitamos, es irresponsable socialmente y ecológicamente, el PSC se obsesiona en que es un proyecto emblemático para la ciudad y el país, intenta vendernos una mayor conexión internacional, pero sabemos que perjudicará nuestro día a día”, ha dicho y ha citado “20 millones de turistas, 70.000 vuelos, de los que solo un 3% serán intercontinentales, el 97% restante serán para compañías de bajo coste que traen más turistas a una ciudad que no puede más”. Sanz ha contrapuesto los 20 millones de turistas y una inversión de 3.000 millones, con 150 millones de usuarios de cercanías que “pasan a un segundo plano, con la inversión que necesita la red ferroviaria”.