Maíllo advierte de que la reconstrucción de la izquierda no puede hacerse sobre “liderazgos fallidos”
El líder de IU reivindica la aprobación del embargo de armas como un éxito de su formación frente a la “bajada de las exigencias” de los ministros de Sumar


En el arranque de un curso político ya electoral, con la celebración de los comicios autonómicos en Castilla y León y Andalucía en el primer semestre de 2026, Izquierda Unida fija posiciones y advierte de que estas dos citas pueden marcar la política de alianzas de cara a las generales. En el borrador del informe político que el líder de la formación presenta este sábado ante la Coordinadora Federal —maximo órgano de dirección entre Asambleas—, Antonio Maíllo vuelve a defender las primarias como método para elaborar las listas, y deja un mensaje claro a los dirigentes actuales. “Asistimos al enésimo intento de construir procesos políticos sobre liderazgos, que ya se han antojados fallidos“, sostiene en una alusión que podría valer tanto para la número dos de Podemos, Irene Montero, fuera ahora de la coalición Sumar, como para la vicepresidenta Yolanda Díaz, elegida en su día sin que mediara una votación de las bases.
Sobre las candidaturas conjuntas, para Maíllo, hay una primera fase, entre septiembre y diciembre, en la que se debe concretar ya lo que ocurrirá en las dos comunidades autónomas que irán a elecciones el próximo año. ”De esta concreción dependerá qué toma de decisiones se deberán realizar respecto a los demás procesos y el principal de todos, el estatal".
“Contemplamos con prevención la resistencia en avanzar en la concreción de propuestas unitarias y metodológicas de toma de decisiones”, denuncia antes de defender un proceso “participado y proactivo” con realización “necesaria de primarias como ejercicio democrático y de reconexión con amplias capas populares que se incorporen”.
IU apuesta claramente tanto en Castilla y León como en Andalucía por presentarse con otras fuerzas y ya ha elegido al candidato que propone IU en la primera cita con las urnas: el actual coordinador castellano y leonés, Juan Gascón. Ni en esa comunidad ni en Andalucía el escenario es fácil para la izquierda, con el PP en el Gobierno y la precedible subida de Vox.
“En Andalucía, apoyamos el proceso mantenido con la candidatura Por Andalucía, apuesta de IU-LV-CA como espacio natural de convergencia ya construido. Hay que evitar más dispersión de nuevos procesos inspirados por quienes no han mostrado intención de construir o fortalecer el existente”, afirma Maíllo en alusión a Podemos y Adelante Andalucía, que, al menos de momento, han decidido seguir un camino propio.
“El papel de nuestra organización es fundamental para la construcción de la única posibilidad de evitar que el reaccionarismo se cobre la pieza que le queda en la Unión Europea: construyendo frentes amplios y democráticos en sus procedimientos que lo impidan. No todas las partes están a la altura del reto, como estamos viendo, pero eso no quita que no pararemos para construir un gran frente que construya esperanza democrática ante el fascismo desde la defensa de políticas transformadoras y de clase que son las que fijan alianzas reales”. Esta misma semana, Maíllo acusó en RNE a Podemos de intentar “derribar al Gobierno”.
Palestina como elemento movilizador
“La movilización creciente contra el genocidio es la argamasa que puede suponer un punto de inflexión en la movilización popular y el paso a la ofensiva de la izquierda de aquí a 2027. A ello vamos a contribuir desde nuestra organización con actos públicos de despliegue autonómico y municipal en los próximos meses”, afirma el coordinador federal de IU, que añade: “No vamos a resignarnos y vamos a sentar las bases para que el fascismo no ocupe más espacios de poder”.
Ante la “parálisis”, denuncia, de la UE, el dirigente considera “muy importante” lo que pueda hacerse desde España y su Gobierno para parar el genocidio. En este sentido, reivindica el éxito de haber logrado el embargo de armas a Israel, que aún debe aprobarse en el Consejo de Ministros, y en un nuevo dardo al resto de formaciones de Sumar y también a su propia ministra, Sira Rego (rival de Maíllo en primarias) subraya que el decreto “fue una exigencia de IU” que mantuvieron “ante una propuesta [formulada] por el grupo de ministros de Sumar que bajaba las exigencias (convirtiendo la ruptura de relaciones en una retirada del embajador de España en Tel Aviv o la urgencia del embargo en un seguimiento del procedimiento por ley ordinaria, y el consiguiente retraso)“, apunta el dirigente.
Se refiere igualmente Maíllo a la necesidad de presentar los Presupuestos Generales del Estado, y señala en este caso indirectamente a PP, Junts o Podemos como responsables de un hipotético fracaso. “Hemos defendido que todo Gobierno que se precie debe presentar Presupuestos y, aunque se presentan para que sean aprobados, mantener el Gobierno en caso contrario y desnudar a quienes se opongan a ellos. Es hora de descubrir a quienes están con el Gobierno y a quienes se unen a la estrategia de derribo abriendo el paso al fascismo”, reta.
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