¿Qué colaboradora de 'Sálvame' protagoniza el nuevo videoclip de Ojete Calor?

Mañana TENTACIONES estrrenaremos en exclusiva Madrid-Bilbao-Bollo, el esperado nuevo single de 'Ojete Calor'. El grupo 'subnopop' por excelencia de canciones tan conocidas como 'Viejoven' o 'Tonta Gilipo', su última canción.

Anibal Gómez y Carlos Areces, los nombres que hay detrás de Ojete Calor, nos han confesado  que la canción está inspirada en un acontecimiento real: un vuelo desde la capital a Bilbao en el que compartieron asiento con Raquel Bollo, colaboradora de Sálvame, cuya presencia les embaucó de manera instantánea. "Raquel es musa, es dura, es fuerte; una mujer de carácter indómito que se ha hecho a sí misma. Es un referente para toda una generación que ha aprendido a sacar pómulo, ponerse aros y seguir adelante", responden Ojete y Calor.

Además Madrid-Bilbao-Bollo,  no habla de la Bollo sino que además, entremezcla otro tema totalmente distinto: "Se trata de una aventura con dos tramas, dos líneas argumentales independientes. La andanzas de Raquel Bollo nos inspiraron un trozo, pero también queríamos poner el foco mediático en el drama de la adopción. El dolor de una madre reencontrada con su hijo biológico trocea el panegírico a Bollo inexplicablemente porque así lo ha querido dios. Dos canciones que no tienen nada que ver, y de repente están ahí juntas sin que podamos hacer nada por evitarlo. Los Beatles ya lo hicieron con A day in the life, y como los Beatles del subnopop que somos nos sentimos un poco obligados a seguir sus pasos", declaran sin trabarse. 

En cuanto al estilo, los cantantes aseguran que es un eslabón intermedio entre el primitivo sonido de su primer álbum (Delayed!, 2013) y su nuevo disco, con título que todavía está por revelar y que podrá conocerse a lo largo de 2017.

¿Ganas de escucharlo y de verlo? Mañana podrás disfrutar de Madrid-Bilbao-Bollo, una nueva lobotomía condensada en un programa doble en sesión golfa. Escalas, secuestros y migrañas techno. "Es quizá nuestra canción más personal" -dicen sus autores. Y sentencian: "Tiene todos los elementos para no gustar".