Condenados a dos años y medio de cárcel los tres acusados por el naufragio de Banyoles

La juez Elena Mercado del tribunal de Girona ha condenado hoy a dos años y medio de cárcel a cada uno de los tres acusados del barco de recreo L'Oca, que naufragó el 8 de octubre 1998 en Banyoles (Girona). Además, tendrán que indemnizar con tres millones de euros a 115 personas, entre víctimas, perjudicados y familiares. En la tragedia murieron 21 jubilados franceses.

Los dos propietarios del barco, Bartolomé Gayola y su yerno, Simón Rodríguez, han sido encontrados culpables de de delitos de homicidio y de de heridas por imprudencia grave. El tercer condenado, Josep Alsina, ex concejal del ayuntamiento, ha recibido la misma pena como responsable político de las actividades turísticas del lago.

Según la sentencia, las compañías aseguradoras de la empresa La Carpa de l'Estany, propietaria del catamarán naufragado, y del ayuntamiento deberán hacer frente al pago de 1,2 millones del total de las indemnizaciones, mientras que el resto hasta los 3 millones lo tendrán que pagar directamente el ex concejal, el ayuntamiento de Banyoles -como responsable civil subsidiario- y los dos barqueros.

Subasta del barco

La juez ordena además que los dos propietarios del barco lo pongan a la venta en subasta pública para cubrir una parte de las indemnizaciones que tendrán que pagar.

Además de la pena de cárcel, que probablemente no comportará de momento el ingreso en prisión de los tres condenados, Gayolá y Simó también han sido condenados a dos años y medio de inhabilitación "para el ejercicio de profesión o industria de cualquier tipo relacionada con la actividad de transporte de personas en cualquier tipo de aguas".

Durante el juicio, el fiscal había solicitado cuatro años de cárcel e indemnizaciones por valor de más de 12 millones de euros para los tres acusados de 21 delitos de homicidio por imprudencia. El abogado de los dos barqueros, Carles Monguilod, ha anunciado una conferencia de prensa para hoy.