Puente viaja a China a conocer los trenes ‘low cost’ de alta velocidad ante el déficit de flota de Renfe
El ministro de Transportes visitará las instalaciones del gigante CRRC Changchun Railway Vehicles


Nueva escala en la travesía del ministro de Transportes Óscar Puente en busca de trenes para reforzar la oferta de Renfe en la alta velocidad. China es el mercado a examinar y CRRC Changchun Railway Vehicles, el fabricante que podría colocar su material rodante en España.
Puente señaló la semana pasada en una entrevista concedida a la SER que la industria ferroviaria europea ofrece fiabilidad y calidad, “pero tiene un problema de precios y tiempos de entrega”. En un contexto de urgencia, el ministerio se ha abierto a la posible compra de trenes en Asia: “Los fabricantes chinos entregan trenes a la mitad de precio en un plazo de seis meses a dos años, mientras la industria europea te los ofrece a 60 meses. Yo soy el político que compra y no tengo 60 meses”, aseveró el ministro. Se busca material a buen precio y, sobre todo, de entrega exprés.
La agenda del viaje al gigante asiático incluye una visita al instituto de innovación Gotion High-Tech Engineering, ubicado en la ciudad de Hefei y especializado en la fabricación de baterías de ion-litio para vehículos eléctricos. El ministro conocerá el anillo de pruebas ferroviarias Beijing National Railway Test Centre, propiedad de la estatal China Railway Construction Corporation. También viajará en tren de alta velocidad desde Pekín hasta Changchun, y allí podrá pasar revista a los modelos del fabricante CRRC. Durante los tres días en China también está programado un encuentro con su homólogo el ministro de Transportes Liu Wei.
Renfe trabaja para licitar dos contratos a primeros de 2026 con los que hacerse con nueva flota a corto y medio plazo. La compañía está reforzando en estos momentos sus servicios de alta velocidad y media distancia (Avant), al tiempo que ha de recuperar el servicio Avlo en el corredor Madrid-Barcelona, sin material rodante por averías en el nuevo Talgo Avril. Además, el gestor de la infraestructura Adif tiene previstas reformas en la red para elevar la velocidad máxima de circulación a 350 kilómetros por hora, para lo que Renfe también precisa renovar vehículos.
Otro de los planes que maneja Adif es el de la construcción de un circuito de pruebas para la homologación de trenes, proceso que actualmente se lleva a cabo en corredores con baja densidad de tráfico o en horarios nocturnos. Para ello se tantean emplazamientos en Andalucía después de que la propia Adif aparcara durante la crisis financiera la construcción de un anillo de pruebas en Antequera (Málaga).
Desde el Ministerio de Transportes se explica que Puente quiere ser “testigo en primera persona de la fabricación de material rodante en el país [por China] y de los avances tecnológicos que el gigante asiático está implementando en su sistema ferroviario, el primero en alta velocidad del mundo”. Sobre la reunión con el ministro chino de Transportes, se buscan opciones de colaboración en materia de movilidad sostenible.
En su reciente intervención en la SER, Óscar Puente reconoció haber hablado con distintas compañías ferroviarias europeas y con el Comisario de la UE ante la seguridad de que el sector “debe ir hacia el modelo de Airbus, con el que se consiguió salvar a la industria aeronáutica”.
Los contactos con la industria ferroviaria china suceden a distintas visitas en los últimos meses a plantas de Alstom y Stadler en España, y de Siemens en Alemania. Puente también sigue al minuto las evoluciones de Talgo, de la que confía en que pueda ofrecer una solución fiable a Renfe, tras un estreno del modelo Avril en mayo del año pasado jalonado por múltiples incidencias.
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