Arenas insiste en que "lo peor de los ERE está por conocerse"

El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, volvió a utilizar ayer el caso de los expedientes de regulación de empleo (ERE) irregulares como munición contra la Junta de Andalucía. En un encuentro de alcaldes de su partido celebrado en Torremolinos (Málaga), Arenas aseguró que en esta causa judicial "lo peor está por conocerse". Además, en clave electoral, prometió que si llega al Palacio de San Telmo creará un "fondo de emergencia" para personas sin ingresos que se financiará en parte con el dinero que se recupere de los ERE fraudulentos, al que calificó como "el mayor escándalo de Andalucía en 30 años".

Por otro lado, y más en sintonía con la naturaleza de la reunión, Arenas criticó que el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, no haya recibido a ningún alcalde del PP seis meses después de las últimas elecciones municipales. "Hay dirigentes a los que la cercanía les produce ronchas", ironizó Arenas en alusión a Griñán. El líder del PP regional también acusó a los socialistas de "cargarse" la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) al negarse a aceptar que la presida un alcalde popular, y calificó como "el colmo" la aprobación de la ley que impide a los regidores compatibilizar su cargo con un escaño en el Parlamento regional.

En una ciudad volcada en el turismo como Torremolinos, Arenas anunció que se ha reunido con el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, y que tiene el compromiso de que "antes de un mes haya una solución definitiva para los chiringuitos de toda la costa, que no suponen ningún atentado contra el medio ambiente, sino que están integrados en el paisaje".