Ocho detenidos y siete policías heridos en las fiestas de Alcorcón

Las fiestas patronales de algunas localidades de la región se han convertido en escenario de altercados. Esta violenta moda estalló en Pozuelo de Alarcón hace dos años cuando centenares de jóvenes a los que se prohibió hacer botellón intentaron asaltar la comisaría. En la madrugada de ayer en Alcorcón (165.000 habitantes), el inicio de las fiestas resultó especialmente violento. Un grupo de unos 300 jóvenes lanzó todo tipo de objetos contra la policía. Los agentes lograron frenar los disturbios unas dos horas después con la detención de ocho jóvenes (de entre 16 y 25 años, y casi todos españoles), según fuentes policiales. Siete policías resultaron heridos leves.

Los hechos comenzaron a las cinco de la madrugada en la calle de los institutos, junto a la avenida del Olímpico Fernández Ochoa, cuando unos 300 jóvenes estaban haciendo botellón y quemaron un contenedor de basura.Los bomberos y el coche patrulla de la Policía Municipal de Alcorcón, que acudieron al lugar, fueron recibidos a botellazos y con lanzamiento de otros objetos como piedras. Una de ellas alcanzó el parabrisas del coche policial, cuyas lunas quedaron destrozadas. Los agentes pidieron refuerzos.

Cuando llegaron más coches patrulla, se encontraron con el mismo panorama. Al frente de los alborotadores estaban unos 60 jóvenes más violentos que eran los que dirigían al resto, según fuentes del caso. Los policías se replegaron hasta la confluencia de las calles Escolares y Polvoranca ya que carecían del material para afrontar la revuelta, como cascos o escudos. Alrededor de las 5.15 llegaron más refuerzos dotados con escopetas de gomas. Siete municipales resultaron heridos con cortes, contusiones y torceduras en tobillos, rodillas y hombros. En la refriega, los violentos destrozaron otros dos coches de particulares que estaban estacionados en la zona. Los investigadores no descartan que haya más vehículos dañados.