Más presión para el sistema financiero

El mercado de valores español volvió a ser ayer víctima de las presiones y el Ibex 35 quedó descolgado de la orientación alcista del resto de las plazas europeas.

Esta vez, las presiones cayeron de lleno sobre el sector bancario después de que la firma JPMorgan rebajara el precio objetivo de la banca mediana, la más orientada al mercado doméstico. Aunque la rebaja del precio objetivo y las recomendaciones que la acompañan iban dirigidas a entidades muy concretas, todo el sector se vio envuelto en una nueva racha vendedora y arrastró al conjunto del mercado.

El Ibex 35, que comenzó la sesión con una subida del 1,81% que le situaba por encima de los 9.800 puntos, terminó con un recorte del 0,60% y en 9.683,30 puntos, aunque antes había llegado a caer hasta los 9.572,20 puntos tras ceder el 1,74%.

La credibilidad del sistema financiero español pasa por momentos complicados, incluso después de la defensa que han hecho de su solvencia varias instituciones. El mercado continúa presionando sobre el bono español y ayer situó su rentabilidad a solo tres puntos básicos del 5%, lo que encarece la financiación y crea un problema donde no lo había.

El Banco de España salió en defensa de la banca española al decidir divulgar los resultados de las pruebas de solvencia a las entidades, aunque sea en solitario. Sin embargo, en el mercado hay cierto escepticismo respecto del final de las presiones, ya que influyen sobre las cotizaciones y permiten comprar deuda y valores a unos precios muy atractivos y rentables.

Los indicadores económicos conocidos ayer en Estados Unidos volvieron a sembrar la confusión entre los inversores pues, si la producción industrial creció en el mes de mayo, el inicio de construcción de viviendas cayó con fuerza, lo que confirma que aquella economía se recupera de forma poco equilibrada. La Bolsa de Nueva York, que en la sesión anterior se anotó fuertes subidas, no parecía definir una dirección concreta ante datos tan dispares.

La contratación en el Mercado Continuo se mantuvo sin grandes variaciones, con 3.266,80 millones de euros en el conjunto de las partidas y 2.442,59 millones de euros en las operaciones del "mercado abierto", en el que el 74% del total se acumuló en torno a seis valores.