ETA recurre a sus simpatizantes para evitar la asfixia económica

ETA está movilizando a sus simpatizantes con el objetivo de que recauden dinero para sostener a la banda durante el alto el fuego. La organización terrorista ha puesto a toda marcha la maquinaria de venta de bonos, a 60 euros cada uno, para que, a ser posible de forma mensual, quienes comparten sus objetivos contribuyan a paliar la caída de ingresos que les está provocando la menor recaudación del llamado impuesto revolucionario.

La reciente detención de Ibon Meñica con 90 bonos de 60 euros con el anagrama de ETA, ha permitido saber que este activista estaba realizando un reparto de 400 de estos boletos de ayuda voluntaria sólo en la provincia de Vizcaya. La banda, según las fuentes consultadas, pretende que todos sus simpatizantes se rasquen el bolsillo y no tener que recurrir, de momento, a la caja de reserva que aún conserva.