Un lastre para los nacionalistas

Los dirigentes del PP gallego admiten que, tras el triunfo del PSOE en las últimas elecciones generales y con el apego que tradicionalmente los emigrantes han demostrado al partido del Gobierno, sea cual sea éste en cada momento, será muy difícil para Manuel Fraga repetir sus abrumadores resultados de las anteriores elecciones autonómicas.

Pero los populares también están convencidos de su triunfo entre los votantes de la emigración, pese al inesperado vuelco de los pasados comicios europeos. "Esta vez la movilización será mucho mayor, y el tirón personal de Fraga en Latinoamérica es indiscutible", argumenta un miembro del comité de campaña del PP gallego.

Los analistas de todos los partidos coinciden en que probablemente la influencia de los votos de la emigración sólo será decisiva en caso de que haya algún escaño en disputa por un pequeño margen de votos entre el PP y el BNG. En ese caso, la desproporción entre ambos es abismal, ya que los nacionalistas, sin una plataforma institucional y con dificultades para difundir su mensaje entre personas que llevan décadas fuera de España, nunca han superado el 5% de los votos.

El BNG ha denunciado en numerosas ocasiones la falta de garantías con que se emiten los sufragios en el exterior, que se tramitan por correo. El semanario nacionalista A nosa terra denuncia en su último número que un colaborador suyo en Suiza logró votar por 16 personas en una oficina de correos de Zúrich sin necesidad de identificarse.