André Essel, cofundador de la Fnac

André Essel, uno de los dos fundadores de la cadena de ocio cultural Fnac, murió el 31 de enero en París, a los 86 años, a causa de una larga enfermedad.

Nacido el 4 de septiembre de 1918 en Toulouse, Essel entró en política a los 15 años como militante de las Juventudes Socialistas de la SFIO, el antecesor del Partido Socialista francés. En 1936 descubrió a Trotski, dejó las JJ SS y participó en la creación de la Juventud Socialista Revolucionaria, de la que fue responsable de Propaganda bajo el alias de André Lessart.

Para sobrevivir realizaba trabajos muy variados, lavando coches o como obrero en numerosas fábricas, de las que siempre le despedían por izquierdista.

Insumiso durante años, en 1939 se alistó en el Ejército francés para luchar contra los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Finalizado el conflicto, se reintegró a las Juventudes Socialistas, pero en 1947 rompió con el movimiento socialista.

André Essel fundó en 1954, junto con su compañero y amigo Max Théret, también trotskista, un club de venta de material fotográfico en un apartamento de París. A partir de ese local, los dos amigos y militantes de la izquierda configuraron los primeros centros especializados en la venta de discos, libros y material fotográfico, en un momento en el que todavía no habían aparecido los primeros hipermercados.

Además, su empresa era un ensayo con carga ideológica: querían aunar los intereses de los comerciantes y de los consumidores. Para impulsar el consumo, abarataron los precios, sacaron una revista, Contact, y se organizaron como un club con tarjetas de socio. Por otra parte, para contrarrestar, redujeron los gastos publicitarios.

"La acción en favor del consumidor completa nuestra lucha política", escribió André Essel. "Queremos, mediante los aumentos salariales, incrementar la capacidad adquisitiva de los trabajadores. Si logramos reducir los precios, conseguiremos el mismo resultado". Los descuentos, que al principio eran del 15%, pronto se uniformaron en un 20%.

Además, organizaron debates, actividades culturales y un laboratorio de análisis de productos que publicaba los resultados comparativos de los experimentos de producción, venta, actividades y consumo que realizaban.

El éxito fue espectacular. En las décadas de los años sesenta y setenta, la Fnac abrió varios centros en París y en provincias y, como primera empresa de distribución de productos culturales de Francia, se convirtió en una referencia.

En los años ochenta comenzaron su expansión europea con la apertura de locales en Bélgica, Berlín y más tarde en Italia y España.

En 1970, UAP y Paribas se hicieron con el 40% de las acciones. Siete años después, Essel y Théret vendieron su parte a las Cooperativas de Consumidores, aunque Essel continuó al frente para facilitar la sucesión, que él consideraba debían decidir los accionistas.

Pero 1a elección de Claude Neuschwander en 1983 llevó a una serie de enfrentamientos que condujeron a André Essel a retirarse. En 1985 escribió sus memorias, Je voulais changer le monde (Yo quería cambiar el mundo).

El nombramiento en el año 2003 del ex trotskista Dennis Olivennes al frente de la empresa fue vista por André Essel como un intento de renovar los principios fundacionales.