Una compañía británica subcontrató en Ucrania el avión de los soldados españoles

El avión Yakovlev 42 que el pasado lunes se estrelló en Turquía con 62 militares españoles que regresaban de Afganistán fue subcontratado con una compañía ucrania, presidida por un ciudadano libanés, por la firma británica Chapman Freeborn, adjudicataria del contrato de transporte de tropas gestionado por la OTAN para España. Un portavoz del Ministerio de Defensa indicó ayer que el contrato no se firmó con la empresa ucrania sino con Chapman Freeborn. Sin embargo, el avión siniestrado pertenecía a Aerolíneas Ucranio-Mediterráneas (UM Air), según admite la firma británica.

Un directivo de Chapman Freeborn reconoció ayer que su empresa es la adjudicataria del contrato de transporte de tropas gestionado por la NAMSA (siglas en inglés de la Agencia de Mantenimiento y Apoyo, de la OTAN), pero que el avión que se estrelló pertenecía a UM Air. De hecho, en la página webde Chapman Freeborn no figura el Yak 42 entre los aviones que se ofrecen a los clientes.

El citado directivo no quiso, sin embargo, explicar en qué condiciones se había subcontratado el transporte de los militares españoles con la empresa ucrania, ni si su compañía asume las responsabilidades que puedan derivarse del accidente. "Estamos recabando toda la información disponible y cuando contemos con ella no tendremos ningún problema en hacerla pública", dijo.

El ministro de Defensa, Federico Trillo-Figueroa, insistió ayer en que el Yak 42 es "absolutamente seguro, porque no sólo es un avión especialmente dedicado a este tipo de misiones, sino el que ofrece más garantías en el mercado, a juicio de la Alianza Atlántica".

Aunque admitió que puede que "choque un poquito" el alquiler de un avión de Ucrania, el ministro de Defensa aseguró que 140 países utilizan este tipo de aparatos y que, "precisamente por ese buen estado de los aviones ucranios, la agencia NAMSA es la que se encarga de hacer las contrataciones, inspecciones, mantenimiento y revisión del buen estado de aviones como el Yak 42, que es un avión moderno en muy buenas condiciones y lo mejor que se puede contratar".

Fuentes de la OTAN indicaron, no obstante, que la NAMSA no inspecciona los aviones, ya que carece de capacidad para ello, sino que se limita a comprobar que la documentación aportada por las empresas cumple los requisitos. "Su papel no es realizar inspecciones ella misma, para eso hay otros organismos, pero la NAMSA debe asegurarse de que todos los papeles, permisos y certificados están en regla", explicaron las mismas fuentes.

En el caso de los aviones ucranios, la responsabilidad de comprobar que se cumplen las normas internacionales en materia de mantenimiento del aparato y de habilitación y periodos de descanso de las tripulaciones recae en el Ministerio de Transporte de Kiev. "Evidentemente, confiamos en las autoridades ucranias cuando emiten esos certificados", afirman en la OTAN.

El papel de la NAMSA consiste en buscar los suministradores que mejor se adaptan a los servicios demandados por los aliados. "Es como una consultora que acelera y facilita los contratos. No es obligatorio pasar por ello, pero resulta útil", aclaran.

Aunque la NAMSA convoca los concursos y los adjudica, las condiciones las fija como demandante del servicio el Ministerio de Defensa español, que dice los servicios que necesita y el precio que está dispuesto a pagar.

Contratos controlados

Un portavoz de la NAMSA eludió ayer revelar detalles sobre el contrato adjudicado a Chapman Freeborn. "Los contratos están siendo extremadamente bien controlados. No firmamos contratos con gente que no nos merece confianza a la hora de realizar estos servicios", se limitó a decir.

La memoria de actividades de la agencia de la OTAN correspondiente al año 2002 señala: "NAMSA ha continuado suministrando apoyo decisivo al transporte aéreo de material y tropas para España. Durante el año 2002, fueron contratados más de 20 vuelos a Afganistán y otros destinos. Otras naciones han expresado interés en este tipo de apoyo". No consta, por tanto, que ningún otro país, además de España, fletase aviones de transporte a través de la NAMSA.

Por otra parte, el Boletín Oficial del Estadopublica hoy un decreto por el que se guardarán dos días de luto nacional por el fallecimiento de los 62 militares españoles.