Sodupe frente a Pagès

Jaume Sodupe, ex consejero delegado del Fòrum 2004, hizo ayer de presentador de Jaume Pagès, su sucesor en el cargo tras un paréntesis de medio año en la entidad estuvo al pairo por la sorpresiva renuncia de Josep Caminal. Ayer, Sodupe y Pagès compartieron la mesa de un debate sobre los acontecimientos que deben tener lugar en 2004, organizado por Tribuna Barcelona.

Los dos dieron su punto de vista sobre el Fòrum y lo que debe representar. 'Los valores del Fòrum se explican perfectamente en la apuesta por la reforma del territorio del Besòs. Es una zona que siempre ha estado marginada y a la que se le quiere dar el mismo nivel que al resto de la ciudad', defendió Sodupe, que fue el primer consejero delegado. Fue destituido en julio de 2001. 'Yo era consciente de que me podía caer algún tiesto en la cabeza', comentó refiriendose a su relevo.

Frente a la defensa de lo que se ha denominado la excusa del Fòrum -la reforma de la desembocadura del Besós y de esa parte del frente marítimo, incluido el barrio de La Mina- Pagès subrayó más la oportunidad de organizar un gran encuentro de debate sobre los problemas con los que se tropieza el mundo: 'No podía ser más oportuno convocar un Fòrum para hablar de los problemas de la globalización y de la paz'. Dijo que el evento está abierto a los movimientos antiglobalización, pero sólo a los que sean constructivos y quieran participar. No, matizó, a los que buscan una plataforma 'para hacerse notar' matizó. No fue muy concreto explicando cómo estaba la ejecución del programa. Es más, llegó a decir que era como un periódico: 'Se tiene que replantear constantemente a medida que llega la información'. Y llegó a prever la posibilidad de que la organizació del Fòrum coseche 'un alud de críticas de la sociedad civil'.

A propósito del desapego de la población sobre los preparativos del Fòrum, Pagès señaló que a partir de diciembre se pondrán en marcha unos equipos para promover la participación de todos los sectores de la sociedad civil, desde el mundo empresarial, pasando por el movimiento asociativo vecinal. Agitación y propaganda, que se decía hace unos años.