'No sabemos nada de ellos desde el viernes pasado'

El Ministerio de Asuntos Exteriores español declaró desaparecidos en el naufragio del barco Le Joola en Senegal a Magarita Jiménez Salvador y sus dos hijos, Jorge y Lara Díez de Turanca. Lo hizo el viernes, tras recibir una llamada desde el domicilio de Margarita en Madrid, donde sus familiares confirmaron que ella y sus hijos estaban en aquel barco. Pero desde entonces, tres días después de semejante noticia, el teléfono no ha vuelto a sonar. 'No sabemos nada nuevo desde entonces. No hay noticias, ni llamadas, ni nada', declaraba ayer un cuñado de la desaparecida.

La familia recibió la noticia a las cinco de la madrugada. 'Un amigo de allí', declaró un familiar, 'que es uno de los supervivientes, nos llamó para decirnos lo del naufragio y que elllos estaban en el barco'. El grupo lo formaban Margarita y sus hijos, con un amigo y un niño pequeño. Ninguno de los supervivientes se encuentra en estado grave.

Margarita Jiménez y sus hijos llevaban casi 20 días de vacaciones por la zona con un viaje organizado, y se dirigían a Dakar para regresar a Madrid.

Responsabilidad estatal

El presidente senegalés, Abdoulaye Wade, asumió ayer ante la catástrofe que la responsabilidad estatal 'es evidente'. Wade prometió que el Estado senegalés indemnizará a las familias de las víctimas, y aseguró que comprende 'la cólera y el dolor de las familias'.

Desde que empezaron a recuperarse cadáveres del mar, miles de personas han asaltado los hospitales de Dakar, donde están siendo trasladados los cuerpos. Wade anunció que una oficina de información en el puerto ofrecerá novedades a las familias 'cada media hora'. Asimismo, se tomarán fotos de los cadáveres y éstas serán expuestas en un lugar aún no precisado para que las familias puedan identificar a sus parientes.