Respuesta de Iberia

En relación con la carta remitida por Xavier Ferré y publicada en su diario el día 19 de agosto de 2002 bajo el epígrafe 'Falta de memoria', en la que se afirmaba que no era la primera vez que se producía un incendio en un motor de un avión de Iberia, me gustaría hacer la siguiente puntualización:

Una vez consultado en nuestros archivos el informe del incidente que se menciona en la carta, le puedo asegurar que en el vuelo del día 27 de marzo de 1993 no se produjo ningún incendio de uno de los motores. Lo que el comandante de vuelo detectó fue una pérdida circunstancial en la eficiencia de uno de los cuatro motores del avión. En ningún momento hubo fuego ni aviso de fuego. En estos casos, las normas de seguridad y el sentido común obligan, pese a las molestias que esto origina a los pasajeros, a regresar al aeropuerto de procedencia o a otro alternativo más cercano.

Una vez en tierra, tras las inspecciones y pruebas a las que se sometió el motor, se comprobó que no era necesaria su sustitución y el avión realizó el vuelo con normalidad.