Refinada sencillez
Estudio de A. Troitzky, 1929.
Este trabajo de Alexei Troitzky es extremadamente sencillo, pero precisamente en esa sencillez reside su encanto y su mérito. Además, contiene -y por eso se habla de sencillez refinada- una notable sorpresa, como suele suceder con los estudios de este notable creador. Todo gira en torno a la pobre situación de la torre negra, que, limitada por su propio peón, no está en condiciones de detener el de su adversario, que marcha raudo a coronar después de la natural primera jugada 1 b7. La salvación, si existe, debe basarse sin dudas en el infante negro de g3; surge de inmediato la idea de 1... Tb2, que detiene el peón blanco y deja espacio para el avance del propio. Después de 2 C - b2, g2 / 3 b8=D, g1=D la posición es de tablas, y si 2 R - b2, g2 / 3 b8=D, g1=D se da el mismo resultado. Sin embargo, el recurso fracasa después de 1 b7, Tb2 / 2 R - b2, g2 / 3 Cd2 j.!, Re3 -forzada; si 3... Rd3 / 4 Cf3, etcétera, y si 3... Rf4 / 4 b8=D j.- / 4 b8=D, g1=D / 5 Db6 j., ganando. Sin embargo, existe un ocultísimo y hermoso recurso de empate, después de 1... Tc2 j.! / 2 R - c2, g2 / 3 Cd2 j., Re3 -otra vez forzada- y ahora comprueban las blancas con horror que después de 4 b8=D, g1=D / 5 Db6 j., Re2 / 6 D - g1 la posición es de tablas por ahogado. Y al no poderse capturar la dama negra el empate parece inevitable. Las blancas ganan, sin embargo, con 4 b8=A!! Si 4... g1=D / 5 Aa7 j. y 6 A - g1 ganando, pues no hay ahogado, y si 4... Rf2 -amenazando coronar defendiendo la pieza que se escoge- / 5 Aa7 j., Rg3 / 6 Ag1 después de lo cual el final está sencillamente ganado. Lo del título: sencillez, sin duda, pero altamente refinada.
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