Antenas

'Ante el actual debate público sobre los posibles efectos nocivos de las antenas de teléfonos móviles sobre la población en general y sobre los niños en particular, quisiera dirigirme al Sr. Monteseirín, como máximo responsable de la salud pública en Sevilla, con la demanda de que en tanto en cuanto no haya estudios definitivos sobre los efectos de dichas antenas, prohiba cautelarmente y como medida de elemental precaución su existencia en el casco urbano de nuestra ciudad. Medidas como ésta ya han sido tomadas en otros municipios españoles, y países como Australia han adoptado normas legales altamente restrictivas para la ubicación de dichas antenas.

Por citar un ejemplo concreto, a pocos metros del Colegio Público Macarena, en la c/ Feria, existe una antena gigantesca ubicada sobre un edificio de Telefónica además de otras dos en la c/ Resolana. ¿Debemos esperar a que se declaren casos de leucemia entre los alumnos de dicho colegio para que se piense en adoptar alguna medida? ¿Tanto poder tienen las empresas del ramo para que sus intereses prevalezcan sobre la vida de nuestros hijos?

Sr. Monteseirín, yo le pregunto: ¿podrá Vd. volver a conciliar el sueño si algún niño en esta ciudad muriese por su negligencia o por su debilidad ante poderosos grupos empresariales?

Sr. Alcalde, cumpla con su obligación y encabece la lucha por la defensa de la salud de nuestros hijos. Si así lo hace, todos se lo agradeceremos.'