El Juli y la pasión

Si Tomás es el toreo cerebral, frío, El Juli es la pasión. Julián López oye esta frase y pone cara de si usted lo dice. 'Lo que está claro es que el toreo no es cosa de uno sólo. Hay muchos toreros, muchas figuras y, sobre todo, muchos toros', dice conciliador, y suelta decidido: 'En cualquier caso, la rivalidad no es sólo buena, sino necesaria'. Cumplida la cita con José Tomás en Las Ventas, corre turno y comparece en la otra estrella de la feria: 'Aunque mi toreo evolucione, a lo que nunca renunciaré es a mi carácter: La pasión es mi mejor arma. Y siempre será así'.

Con 18 años y tan sólo dos de alternativa, El Juli regresa a San Isidro con la expectación (y la reventa) por las nubes. 'Esta vez estoy más tranquilo', dice en referencia al año pasado. Entonces, con José Tomás fuera del ciclo isidril, la confirmación de Julián López se convirtió en la corrida estrella. 'Pese a lo que pueda parecer, esta temporada es aún de más responsabilidad. Estoy más tranquilo, porque la atención está más repartida, pero sé que es el momento de enseñar otras cosas'. ¿Quiere esto decir que El Juli está cambiando? 'No, simplemente tengo claro que esto es una carrera larga y que hay que enseñar otras cosas'.

Las otras cosas de las que habla hay que rastrearlas en la temporada que le mantiene ocupado. Hasta ahora, ha toreado 16 veces (tres de ellas en Sevilla, con un balance de otras tantas orejas) y... 'he empezado mucho mejor que el año anterior. No me refiero a los trofeos, sino, y eso es lo que me importa, a la profundidad de mi toreo. Quizá he sido menos espectacular, pero más de verdad'. ¿Veremos a un Juli más calculador? 'Para nada. La profundidad no es incompatible con la pasión', insiste.

Queda claro. De momento, sus tres presencias en la feria se abren con una corrida de Domingo Hernández; acto seguido (el jueves 31), la de la Prensa, con un toro de Alcurrucén (la divisa que le sirvió para salir a hombros en su despedida de novillero) y otro de Victorino Martín, y, por último, los de Guardiola Fantoni (el martes 5 de junio). El Juli cumple con el acontecimiento que está llamado a hacer esta feria diferente: cada figura deja que su nombre luzca en un hierro de los tradicionalmente considerados duros. En su caso, los guardiolas.

¿Por qué, quién empezó esto? 'Ha sido como una cadena. El año pasado empecé con un encierro de Victorino en Castellón y bueno, una vez que se apunta uno, el otro no puede quedarse atrás', contesta. 'Cada uno dirige su carrera como quiere y hace el marketing que quiere. Esto no es cosa de estar un día bien y ya está', ofrece como respuesta a su elección de ganaderías. 'Lo que cuenta es la continuidad, las formas. Un torero no es un robot o una máquina. Además está el toro... Como se dice, el torero propone, Dios dispone y el toro lo descompone'.

Pues eso, cuando hoy complete el paseíllo, a tenor de lo dicho, veremos a un diestro más profundo, menos bullicioso, pero apasionado: 'La pasión es mi mejor arma'.

La corrida de hoy

La corrida de hoy, 14ª de abono: toros de Domingo Hernández para Espartaco, Eugenio de Mora y El Juli. A las siete de la tarde.