Una mujer mata a su pareja en Tavernes 7 meses después de intentar asesinarlo

Un hombre de 40 años, Andrés Catalá Estruch, murió el martes en Tavernes de la Valldigna (Valencia) a consecuencia de los golpes que con un arma contundente le asestó supuestamente su compañera sentimental, Consuelo E.G., de 42 años. La presunta agresora ya había intentado asesinar a su compañero sentimental hace siete meses. Los hechos ocurrieron la mañana del martes, pero el cuerpo de la víctima no fue encontrado hasta las diez de la noche, según informó la Guardia Civil.

Un familiar del fallecido alertó a la policía de que en la vivienda había luz pero nadie respondía. La Guardia Civil forzó la puerta y encontró el cadáver de Andrés C.E. con varios golpes en un sofá ubicado en la entrada de la residencia.

El 6 de septiembre la mujer acudió al hospital Francesc de Borja de Gandia a visitar a Andrés, que se recuperaba de las heridas sufridas por varias puñaladas. Durante el encuentro la pareja inició una discusión. Un guardia de seguridad acudió a la habitación y descubrió que la mujer portaba un vidrio y dos cuchillos en el bolso. Uno de ellos coincidía con el arma con el que el herido había sido agredido. Consuelo E. G. fue detenida por 'tentativa de homicidio', pero el hombre pagó la fianza y la pareja reanudó su turbulenta convivencia.

Consuelo, tras golpear varias veces a su compañero con un objeto contundente, posiblemente un martillo, huyó con el vehículo de la víctima y sufrió un pequeño accidente a la salida del municipio. La Guardia Civil acudió al lugar del siniestro y, tras levantar un atestado, indicó a la mujer que se dirigiera al cuartel para prestar declaración. Pero, en un intento de huida, cogió el autobús y se dirigió a Gandia, a 15 kilómetros de Tavernes. Sobre las cinco de la tarde, la mujer fue auxiliada por la Policía Nacional en una plaza del municipio gandiense, donde fue encontrada semidesnuda y con varias contusiones, y trasladada al hospital Francesc de Borja. Fuentes de la investigación señalaron ayer que la mujer mantuvo que había sido agredida por varios desconocidos, un extremo que la Guardia Civil, encargada de las pesquisas del homicidio, no confirmó.

Consuelo E. G. permanecía ayer ingresada en la UCI con traumatismo facial, intoxicación y depresión respiratoria, según el parte médico facilitado por el centro hospitalario gandiense. Varios agentes la custodiaban, y procederán a su detención como principal sospechosa del homicidio en cuanto se recupere de las lesiones. Al cierre de esta edición evolucionaba favorablemente y se esperaba su traslado a planta.