La pistola del detenido fue la utilizada para asesinar a Lluch y al guardia urbano Gervilla

Cruchaga, de 37 años, estaba fichado por la policía como sospechoso de pertenecer a ETA y su rostro figuraba en las fotografías que mostraron las Fuerzas de Seguridad hace unas semanas en un barrido realizado en Barcelona y su cinturón industrial para hallar pistas sobre los terroristas que estaban cometiendo atentados en Cataluña.

Cuando fue detenido, Cruchaga llevaba una pistola marca HS, de nueve milímetros Parabellum, con una bala en la recámara y otras 15 en el cargador. A esa misma arma corresponde el cargador que los terroristas perdieron en su precipitada huida tras asesinar al guardia urbano Juan Miguel Gervilla. El otro etarra que participó en ese crimen, al que sigue buscando la policía, fue el que atentó el pasado 21 de septiembre contra el concejal del PP de Sant Adrià de Besós José Luis Ruiz Casado. Los investigadores, por tanto, reconocen que el comando no está completamente desarticulado y que la operación sigue abierta, ya que falta localizar inmuebles que han utilizado como infraestructura.

El nombre de Cruchaga ya apareció en 1997 en el informe que la Guardia Civil remitió a la Audiencia Nacional con motivo de la desarticulación del comando Vizcaya. Su número de teléfono aparecía en la agenda del etarra José Miguel Bustinza, muerto junto a Gaizka Gaztelumendi en un tiroteo con la policía en septiembre de 1997 en Bilbao. Cruchaga huyó y en el registro de su vivienda no se encontró ninguna prueba.

La policía considera que Cruchaga participó también junto a la otra terrorista detenida, Liarni Armendáriz, de 27 años, en la colocación de dos bombas trampa en la delegación del Ministerio de Defensa en Girona el pasado miércoles. Armendáriz no estaba fichada como terrorista si bien la policía considera que fue la que facilitó la huida de los pistoleros de ETA en todos los asesinatos que ha perpetrado esta banda en Cataluña desde septiembre. La etarra es hermana de la esposa del ex jugador del F. C. Barcelona Txiki Beguiristain, aunque tras ser detenida se identificó como Ohiane Errazquin, de 27 años, una activista fichada por la policía y que se encuentra huida. Los investigadores dudaron desde el primer momento de su identidad al no coincidir sus huellas con las de Errazquin. Armendáriz portaba una pistola Walter Special 7,65, con 7 proyectiles.

Los terroristas emplearon ayer una vez más un Renault 19 blanco. Un vehículo similar era el que transportaba los 100 kilos de explosivos y que fue abandonado por una avería el pasado 14 de agosto en la localidad oscense de Benabarre. También fue el mismo modelo que estalló en Granada tras el asesinato del fiscal jefe de Andalucía, Luis Portero, el 9 de octubre, y el empleado para huir tras matar al concejal Ruiz Casado. En el atentado contra el magistrado José Francisco Querol, el pasado 30 de octubre en Madrid, los terroristas también utilizaron un Renault 19, aunque en este caso de color rojo.