El legado de Atapuerca
El yacimiento de Atapuerca sigue ofreciendo nuevos hallazgos acerca de la historia de nuestros más remotos antepasados. A la ya extraordinaria colección de restos fósiles que hacen de la sierra burgalesa el más antiguo hábitat conocido del hombre en Europa y uno de los más ricos en el mundo se añaden ahora otros: indicios de utensilios de hace un millón de años aproximadamente y un registro de hace tan sólo unos pocos miles de años que podría contener información sobre un momento crucial en la conformación del hombre moderno. Se ensancha así el rango de épocas sobre las que podemos obtener evidencia empírica del pasado de los humanos en Europa, haciendo retroceder en el tiempo la presencia humana en nuestro continente y, hacia delante, llegando hasta las épocas más recientes de la prehistoria. La importancia y el rigor de las investigaciones realizadas en Atapuerca son reconocidos unánimemente. El ambiente natural que rodea al yacimiento, junto con el propio espacio de las excavaciones, necesita ser protegido de forma que los trabajos allí desarrollados puedan continuar sin interferencias. Al mismo tiempo, los resultados de las investigaciones y los restos más característicos deben estar al alcance del público. De ahí que merezca todo el apoyo la idea de crear un museo en la ciudad de Burgos dedicado a exponer los conocimientos sobre la evolución humana y a impulsar la investigación en este apasionante campo. Del mismo modo, resulta natural que se haya solicitado su consideración por la Unesco como patrimonio de la humanidad. Pocas cosas podrán responder tan adecuadamente a esta calificación. El legado de los hombres y mujeres de Atapuerca es universal y su historia nos concierne a todos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Discurso a la nación: Trump exagera sus logros económicos y se olvida de Venezuela
Vicky Colbert, socióloga: “Si los niños son diferentes, la escuela tiene que adaptarse a ellos, y no al revés”
‘Arancel’, la palabra del año para la FundéuRAE no habla solo de lengua, también de poder (y economía)
Claves de una cumbre que decide el futuro de Ucrania y Europa: ¿por qué es tan importante?
Lo más visto
- La población de pumas de la Patagonia se dispara gracias a una presa inesperada: los pingüinos
- El Supremo ordena al ex fiscal general el pago de la multa y la indemnización a la pareja de Ayuso que le impuso al condenarle
- El Gobierno de Mazón pagó 107 millones de euros más a Ribera Salud al aumentar su aportación por ciudadano
- Víctor Manuel, músico: “El capital tiene que rectificar, nunca pensé que fueran a ser tan voraces”
- Carlos Alcaraz y Ferrero rompen tras siete años: “Llegan tiempos de cambio para los dos”




























































